Sigamos en contacto

#NiUnaMás

Femicidio de Julieta Riera: una prisión domiciliaria que renueva el pedido de justicia

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

El acusado del femicidio de Julieta Riera (24) en Paraná fue beneficiado con prisión domiciliaria luego de pagar una caución de 500 mil pesos. Jorge Julián Christe, hasta ahora detenido en la Unidad Penal Nº1 de esa ciudad, esperará el juicio a resguardo en la casa de su madre, una ex jueza de Entre Ríos. Está imputado por golpear y por tirar a Julieta desde un octavo piso. La voz de la mamá de la joven. El contexto de violencia machista. Y la movilización social para que el caso no quede impune.

Femicidio de Julieta Riera: una prisión domiciliaria que renueva el pedido de justicia
Julieta tenía 24 años y estaba terminando materias del secundario para empezar abogacía.

Por Lucrecia Raimondi

La prisión domiciliaria de Jorge Christe la dispuso esta semana la vocal de Juicios y Apelaciones Nº1 de Paraná, María Carolina Castro, en una audiencia que definió en qué condiciones de arresto Christe será juzgado por “homicidio triplemente agravado por el vínculo, alevosía y violencia de género” por la muerte de la joven de 24 años que era su pareja.

Cuenta Ana Brugo, la mamá de Julieta, que vivían juntos hacía un año y medio en San Martín al 300, en una de las dos propiedades que tiene la ex funcionaria judicial en el octavo piso de ese edificio, a pocas cuadras de su casa, en pleno centro de Paraná. Ellos habitaban el que da a la calle peatonal, con balcón cubierto al frente; el femicidio ocurrió en el otro inmueble del mismo piso, que tiene un balcón sin protección que da a un pulmón de manzana. La investigación indica que la madrugada del 30 de abril Christe golpeó a Julieta y la arrojó al vacío.

Desde que empezó a salir con él, Ana notó que Julieta se aisló de sus amigos y al principio un poco de ellos. También que se puso más reservada con su vida en convivencia. Pero nunca pensó que Julieta podría sufrir violencia y menos que sería asesinada por su pareja. Ana todavía no sabe con certeza qué pasó esa noche, dice que está esperando los resultados de criminalística y que confía en el trabajo de su abogada y de la fiscalía.

La noticia de la prisión domiciliaria, Ana y su familia la tomaron con mucho dolor y tristeza. “Él tendrá sus derechos pero a mí no me cabe ninguna duda, porque soy su mamá, que no fue un accidente”, aseguró a lavaca. “Ella tenía sus proyectos, estaba terminando las materias del secundario porque quería estudiar abogacía el año que viene”.

El caso

El 2 de mayo, el juez Mauricio Mayer dictó la prisión preventiva de Christe por 60 días en la Unidad Penal Nº1 de Paraná, luego de que el fiscal Ignacio Aramberry lo imputara por “homicidio triplemente agravado por el vínculo, alevosía y violencia de género”. Ese plazo se venció el 28 de agosto y la jueza Castro finalmente dio lugar al pedido de la defensa y decidió que continuara detenido con prisión domiciliaria en la casa de su madre.

Jorge Julián Christe, de 31 años, hijo de la ex camarista de Paraná María Victoria Stagnaro, se abstuvo de declarar la primera vez frente al juez Mayer. Sus abogados defensores habían solicitado la prisión domiciliaria con una tobillera, a cumplir en la casa de su madre, pero esa primera vez el pedido fue rechazado. La noche del femicidio, Christe manejó su moto hasta la casa de la ex jueza. Después, a la comisaría en el centro de la ciudad y denunció que su novia se había caído. En ese momento fue revisado por los médicos: su cuerpo tenía signos de pelea.

El fiscal Aramberry presentó al juez Mayer los resultados de la autopsia que realizó el Cuerpo Médico Forense: María Julieta, entre las 2:20 y 2:50 de esa noche, sufrió maltrato físico y falleció por los golpes al caer de un balcón a 19 metros de altura.

En la primera audiencia de instrucción, el representante del Ministerio Público Fiscal relató: “Jorge Julián Christe le dio muerte a su pareja María Julieta Riera, con quien convivía en un vínculo caracterizado por la violencia de género, habiéndola sometido a maltrato físico, agresiones sexuales, daños a la propiedad y agresiones psicológicas. Para producir su muerte, Christe agredió físicamente a Riera y le comprimió manualmente el cuello hasta dejarla en estado de inconsciencia. Aprovechando ese estado, y sin ningún riesgo para sí, la arrojó con vida desde el balcón”.

No están solas

María Elena, de la Asamblea de mujeres, lesbianas, travestis y trans de Paraná, que sigue el caso de cerca, entiende que la domiciliaria de Christe responde a que la jueza consideró garantías procesales porque la querella no pudo demostrar que había peligro de fuga ni que el acusado podría entorpecer la investigación. Pero que pasados 120 días de prisión “la fiscalía debería tener suficientes pruebas al respecto”.

María Elena analizó con sus compañeras esta medida en comparación con otros casos. Lo que encontraron: “Nosotras señalamos que esas garantías deberían estar al alcance de cualquier persona acusada por un delito y no se aplican. Entonces parecería que se trata de que ciertos sectores de la sociedad pueden acceder a garantías y derechos que otras personas no. Por ejemplo no se hizo igual tratamiento al femicida de Fátima. Lo que se deja ver desde el Tribunal de Entre Ríos es la faz clasista que poseen algunas determinaciones”.

El posicionamiento de la Asamblea es claro en ese sentido: “No queremos un sistema punitivo en donde haya personas presas sin condenas. Pero deja mucho que pensar este caso, porque determinaron una caución de 500 mil pesos a alguien con mucho poder adquisitivo y dejaron en custodia del mismo a la ex jueza, madre del imputado, a quien él mismo fue a ver antes de llamar a la policía a horas de la madrugada cuando sucedió el femicidio de Julieta”.

Cuentan que las versiones de Christe cambiaron con las horas. Primero dijo que estaban jugando a las escondidas y que fue un accidente. Después dijo que ella se tiró sola. Y la primera versión de él fue que la mamá de Julieta es la que se había tirado. “Teniendo a su madre como ex jueza de la provincia, entendemos y sabemos por otras fuentes que ha tocado todos los contactos dentro del sistema judicial. De hecho buscó peritos en Buenos Aires y Concepción del Uruguay que le han dicho que no porque era muy evidente el femicidio”, revelan integrantes de la Asamblea y aseguran “Julieta está muerta, la mató Christe”.

Femicidio de Julieta Riera: una prisión domiciliaria que renueva el pedido de justicia

Sin perspectiva

Andrea es trabajadora social.Junto a otras profesionales de la Asamblea, acompaña situaciones de abuso y violencia. Entiende que el sistema judicial de Entre Ríos “es misógino y hacen manejos con un grado de impunidad asqueroso”. Afirma que la Justicia entrerriana no tiene perspectiva machista porque ha visto cómo pasan situaciones en que la víctima pasa a ser victimaria y no se la reconoce como sujeta de derechos: “Las instituciones están viciadas, son súper machistas, lo vemos cuando acompañamos a las mujeres a hacer denuncias por violencias de género, les siguen haciendo las preguntas como ‘¿vos qué hiciste para que se enoje?’. Sentimos que hay un atraso total en ese sentido, falta la perspectiva de género en todas las dependencias y en todos los niveles. Así que estamos muy preocupadas y asustadas porque le puede pasar a cualquiera. Sabemos que en la pandemia aumentaron las situaciones de violencia con intentos de femicidio y está todo muy tapado”.

“Nadie se hizo cargo de lo que reclamamos cuando hicimos la acción directa de la vigilia en Tribunales el 8 de marzo. Ni el fiscal -Leandro- Dato que es el responsable de la Fiscalía de Género de Paraná ni ningún otro funcionario de Paraná ni provincial, tampoco la Policía. La Justicia no actúa con perspectiva de género, sigue beneficiando al ‘macho alfa’, como dice Rita Segato”, manifiesta Andrea sobre la vigilia que se hizo pidiendo justicia por Fátima Acevedo, caso emblemático que movilizó a toda la comunidad y sobre el que la Asamblea denuncia que desde la Justicia taparon pruebas e información respecto a ese femicidio, además de haberla desprotegido.

Andrea asegura que van a realizar acciones pese al riesgo, advierte, de caer detenidas: “Es un contexto bastante hostil pero queremos repudiar el accionar del sistema judicial entrerriano porque estamos muy preocupadas”.

Suma su mirada María Elena: “El poder judicial sigue sin tomar nota de la gravedad de los hechos. Nos vamos encontrando con situaciones que aparecen como desbordantes pero que connotan desde que perspectiva se está ejerciendo el rol de un poder que debiera ser el resguardo que tenemos las personas para garantizar justicia”.

La calle como escenario

Si la Justicia no actúa, en las calles se denuncia a los responsables. “Parecería ser que ante la exposición publica un poco se mueven las cosas, permite visibilizar lo que sucede. Por eso conlleva a que un poder con tantas oscuridades se sienta incomodo ante la mirada atenta de la sociedad”, entiende María Elena y cree que “lamentablemente muchas cosas no han cambiado en estos casi 40 años de democracia”.

Entonces propone una línea que une y potencia las batallas que históricamente se dan en la calle: “La lucha del feminismo por un mundo más justo incluye a todos los derechos humanos, incluye los derechos por la soberanía de nuestros propios cuerpos, de una vida libre de violencia, de ejercer con libertad los proyectos de vida que cada una de las personas decidamos encarnar, en donde la distribución de la riqueza deje de ser una consigna, en donde se replanteen otros modos de producción y reproducción de la vida y que no pongamos en vilo al planeta y el medio ambiente. Estamos luchando por, y armando junto a otres un mundo feminista con otra política, otra ciencia, otra economía, otras palabras, otros gestos para habitar nuestros cuerpos en otras relaciones. Porque como bien manifestamos en todas las marchas, nos mueve el deseo de cambiarlo todo”.

#NiUnaMás

Lucía Pérez: la trama de la injusticia

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

“¿Por qué se procede de esta manera tan irregular y que revictimiza a esta familia una y otra vez para salvar a personas que se supone que son dos perejiles?” preguntó ayer el abogado Juan Pablo Gallego ante sucesivos cambios de carátulas, sospechosas reprogramaciones de fechas y maniobras que parecen revelar un entramado que busca la impunidad y la negación del femicidio de Lucía, que tenía 16 años. Ocurrió durante una audiencia en el que uno de los acusados pide salidas transitorias. El trasfondo de idas y venidas fue descripto por el abogado: “Lo que pasó es un hecho aberrante, que implicó la muerte atroz de una adolescente de 16 años en circunstancias probadas de narco criminalidad”.

Por Claudia Acuña

Hay que explicar lo inexplicable. Desde que el 8 de octubre de este año la Cámara de Casación modificó el segundo fallo por el crimen de Lucía Pérez para negar su femicidio se desató una catarata de maniobras –de alguna manera hay que llamarlas– para intentar liberar a sus femicidas.

El fallo de Casación confirmó la culpabilidad de Juan Pablo Offidani y Matías Farías y los condenó por los delitos de violación agravada por el uso de estupefacientes y por tratarse de una menor de edad, pero no por su crimen: Lucía simplemente se murió. Esta negación del femicidio tiene como consecuencia un disparate jurídico: por un lado, la familia apeló está decisión; pero al mismo tiempo esta apelación no puede avanzar hasta que no se determine el monto de la condena que le correspondería a Farías por esta nueva tipificación. Si es complicado de comprender, imagínense lo que significa para esta familia soportar lo que la obliga a padecer el Poder Judicial. A saber:

  1. Para poder determinar el monto de la pena que le correspondería a Farías –que en el segundo fallo y luego del juicio anulado había sido condenado por femicidio y por lo tanto a prisión perpetua– podría corresponderle entonces entre 8 y 20 años de prisión. Para establecer exactamente cuánto, de acuerdo a la evaluación de atenuantes y agravantes, se inventó un tribunal compuesto por tres jueces de diferentes juzgados. Serán los responsables de la audiencia de Cesura que, según dictaminó luego de una audiencia donde acordó con las partes –querella y defensa– cómo sería el procedimiento, se realizará el 29 de abril de 2026 y durante tres días.
Lucía Pérez: la trama de la injusticia
  1. Imagen de la audiencia. A la izquierda, el abogado Juan Pablo Gallego. Arriba, la foto principal, la movilización que acompañó a la familia.
  2. Unos días después la familia recibió una notificación que le comunicaba que esa audiencia se adelantaba a septiembre. Como su abogado, Juan Pablo Gallego, no estaba ni enterado de esta anticipación –y además se encontraba en España para la fecha pautada– se presentó un escrito denunciado esta irregularidad y solicitando se mantenga lo debidamente acordado: 29 de abril de 2026. Así será.
  3. Un mes después hubo otra novedad: el nuevo fiscal –cuyo rol se supone que es acusatorio– pidió el cese de la prisión de Farías, aun cuando las instancias de apelación y de establecimiento del nuevo monto de pena estaban pendientes de resolución.
  4. Unos días después llegó el turno de Offidani: solicitó salidas transitorias. La audiencia que se realizó este miércoles en los tribunales de Mar del Plata fue para decidir si las otorgaban o no.

En esa audiencia el doctor Gallego sintetizó lo que todo este proceder judicial despierta como duda “¿por qué se procede de esta manera tan irregular y que revictimiza a esta familia una y otra vez para salvar a personas que se supone que son dos perejiles? ¿Hay algo más detrás de esta causa que permite forzar tanto los procedimientos judiciales? Si nosotros, como parte querellante, no renunciamos a que se le aplique a ambos la figura de femicidio y eso está todavía en trámite, ¿qué se busca con esto? ¿Qué se fuguen antes de que se resuelva la cuestión central?”

Como respuesta la doctora Romina Merino, abogada defensora de Offidani, propuso: “Miremos para adelante”.

El doctor Gallego replicó:

“Nosotros no vamos a dejar de mirar lo que pasó porque lo que pasó es un hecho aberrante, que implicó la muerte atroz de una adolescente de 16 años en circunstancias probadas de narco criminalidad y eso implica una doble responsabilidad del Estado: por tratarse de una menor y por estar frente a una banda que vendía drogas en la puerta de un colegio, delito por el que cumplen una condena ratificada”.

El juez de garantías que debe evaluar el pedido de Offidani tiene ahora cinco días para determinar si cumple o no con los procedimientos necesarios para obtener los beneficios de la libertad transitoria.

En tanto la familia de Lucía sigue esperando justicia.

Lucía Pérez: la trama de la injusticia

Matías, el hermano de Lucía y sus padres Guillermo y Marta.

Seguir leyendo

#NiUnaMás

Adiós a Claudia Rodríguez: la Trans andina que propuso politizar el amor

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Referente del movimiento trans latinoamericano, activista, poeta, escritora y tanto más, escribió sobre su infancia, la militancia trans, la vida sexual y se autoproclamó Miss Sida en 2007. Claudia Falleció este 29 de Noviembre. Su pelea incluyó al pueblo mapuche, la educación pública, los sin techo, y planteó siempre una filosa crítica al neoliberalismo, que quita posibilidades de vida y las transforma solo en posibilidad de consumo. En uno de sus viajes a la Argentina compartió con la revista MU sus ideas sobre el orgasmo, el feminismo sin resentimiento, la creación, y por qué hay que politizar el amor. Un modo de homenajearla, de recordarla, y a la vez de volver a estar en contacto con un pensamiento y una acción que dejan una sensible huella cultural, artística y política.  

Por María del Carmen Varela

Foto: Lina Etchesuri

(más…)

Seguir leyendo

#NiUnaMás

38º Encuentro Plurinacional: el regreso

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Por Claudia Acuña

Fotos Line Bankel

A las doce de la noche parte el micro que nos trae de regreso a Buenos Aires con el grupo de mujeres que lucen imborrables sonrisas y cachetes decorados con purpurina. La noche es para soñar y la mañana para compartir la transmisión de la asamblea que decide en qué ciudad se realizará el próximo encuentro: Córdoba.

Con el festejo llega la ceremonia que preparó la Comisión de Mística.

Estamos todas sentadas en el piso superior del micro mientras una voz encantadora nos cuenta el cuento La cabeza en la bolsa, mientras recorre el angosto pasillo mostrando las ilustraciones que dan vida a esta historia que escribió Marjorie Pouchet: la de una chica rabiosamente tímida que siempre sale a la calle con una bolsa en la cabeza, hasta que un día, regado por sus lágrimas, crece allí un jardín. ¿Qué hará entonces con esa timidez y con esas flores?

Consultar a una amiga.

Algunas compartirán en voz alta lo que ese cuento les resuena; otras sus lágrimas.

Luego, las organizadoras de la colecta para el viaje nos darán dos regalos. Cada una recibirá así una de las serigrafías creadas por el grupo de arte Vivas Nos Queremos y un pedido: que sean expuestas en lugares colectivos. El otro regalo está guardado en un sobre hecho a mano con papel reciclado. Contiene stickers, calcomanías y un papel amarillo donde nos piden que escribamos un deseo que acompañe a nuestras amigas de viaje hasta el próximo Encuentro. Una cajita de cartón recoge los mensajes y de allí cada una extraerá el suyo.

El mío:

“Seguí tus sueños, abrazá tu intuición, aferrate a tus compañeras: todo es posible”. Llegamos.

38º Encuentro Plurinacional: el regreso

Seguir leyendo

Lo más leido

Anticopyright lavaca. Todas nuestras notas pueden ser reproducidas libremente. Agradecemos la mención de la fuente. ©2025 Agencia lavaca.org. Riobamba 143, Ciudad Autónoma de Buenos Aires - Argentina - Editor responsable: Cooperativa de Trabajo Lavaca ltda. Número de propiedad intelectual: 50682265 - [email protected] | Tel.: +54 9 11 2632-0383

Vistas el día de hoy: 37.040

Femicidios, narcotráfico y Estado