Mu60
La voz del barrio: Los Villurqueros
Tras una década de teatro comunitario el inventario de este grupo incluye, entre otras cosas, la recuperación de un teatro, una estación de tren y la historia de Grafa.
Sobre la mesa hay una porción de brownie, pero no es lo único dulce. También están las palabras y gestos de Liliana Vázquez, directora del grupo Los Villurqueros, diez años de teatro comunitario, una década de poner la construcción colectiva sobre la mesa. Liliana pronuncia palabras dulces. No son suaves, no son blandas, ni siquiera tiernas. Son dulces de fondo, no de forma. Su decir es poético: hay una estética y una ética que lo sostienen. Y tan profundas que no hay nada que yo pueda escribir que no represente para mi una interferencia entre sus palabras y los ojos que desnudan estas líneas. Entonces, me retiro de la escena. Desde aquí y en más estarán conversando con una villurquera.
Recuperándose
Los Villurqueros nacimos, en el 2002, entre el ruido de las cacerolas. En esa época todos nos convertimos un poco en hacedores. Empezamos haciendo una movida teatral por la recuperación del Cine Teatro 25 de Mayo, que estaba tapiado. Parecía una utopía recuperar eso. Éramos seis vecinos, después fuimos ocho. Hoy somos 35.
Empezamos a bucear en nuestra identidad barrial, con pequeños reportajes a los vecinos: el 25 de Mayo era una referencia. Entonces hicimos puestas en escena en la puerta del cine, improvisando. La consigna era vestirnos del año 30 y esperar a Gardel, que había cantado allí. Nos vestíamos con las mejores galas de esa época y lo esperábamos. Los vecinos no entendían nada al principio, pero era una forma de activar la memoria barrial.
Después hicimos una puesta sobre la estación de Villa Urquiza, que estaba muy abandonada. En un aniversario fuimos a “hacer la inauguración”: viajamos en tren desde otra estación, todos vestidos de época y nos mezclamos entre la gente. Cuando los pasajeros bajaban en la estación Villa Urquiza se encontraban con una banda, integrada por vecinos de un centro cultural amigo, tocando música de aquella época y recibiéndolos. ¡Imaginate si vos tomabas el tren en Retiro y bajabas en Urquiza y veías eso! Se visualizaba otra estación: tuvieron que repararla, limpiarla, pintarla. Para nosotros era la forma de habitar los lugares por donde se pasa permanentemente, sin siquiera verlos.
Logramos recuperar y reabrir el Cine Teatro 25 de Mayo. Fue una movida de muchos vecinos. Hicimos asambleas, nos juntamos, se levantaron más de 5 mil firmas. Villurqueros sólo era el motor creativo: ponía en escena lo que pasaba. Se lo rescató, se lo recuperó y en la restauración estuvieron los vecinos discutiendo con el gobierno. Eso fue lo precioso: lograr que fuera rescatado por todos. Reabrió en el 2009, pero creo que es el teatro más reinaugurado por los políticos.
La máquina
Los funcionarios son una máquina de impedir: ahora estamos dando una lucha muy especial porque no estamos dispuestos a pagar el seguro al que nos obliga el Gobierno de la Ciudad cada vez actuamos. Hay una “disposición” según la cual tenemos que pagar un co-seguro en cada presentación que hacemos en las plazas públicas. Estamos en pie de guerra con eso. La lucha por el espacio público es bastante fuerte: ellos quieren que no lo ocupemos y la idea nuestra es ocupar todos los espacios que podamos.
Hasta el 2004 creamos colectivamente postales teatrales. Y empezamos a darnos cuenta que, entre postal y postal, íbamos hilvanando una historia. Un día nos invitan a la Noche de los Museos y nos preguntan si teníamos una obra. Dijimos que no, pero después pensamos: “Pará: sí tenemos una obra hecha”. No aprovechar la oportunidad de esa cantidad de gente era un desperdicio. Teníamos obra: la postal esta, la otra, la otra. Las uníamos y listo. Y así fue. Ésa es la magia del teatro: construir las escenas colectivamente e ir hilvanando la memoria. Esta obra se llama Avanti Villurca y la seguimos haciendo. Mientras, vamos ensayando y armando otra.
La marca de Grafa
Para la nueva obra estamos trabajando la historia de la Grafa, que era la fábrica textil más importante de Latinoamérica, del grupo Bunge y Born, y que estaba en el barrio. Hace dos años que estamos investigando sin parar, haciendo reportajes a obreros que trabajaron allí. Incluso charlamos con hijos de los 16 desaparecidos de la Grafa: eso nos marcó muchísimo. Nosotros sabíamos que en nuestro barrio habían pasado muchas cosas, pero es distinto ver todo el proceso: cómo se inicia la Grafa, cómo se destruye, y todo lo que está en el medio. Entonces contar la fábrica del barrio es contar la historia del país. Aún no sabemos cómo lo vamos a hacer, pero el proceso es de lo más interesante.
Los Villurqueros ensayamos dos veces por semana: miércoles y viernes. Los miércoles hacemos formación musical y coral y expresión corporal, lo que ha permitido que en el grupo crezca lo creativo. El rol del director no es más que éste: coordinar. Es el vecino/actor convertido en contador de historias el que está haciendo todo esto. El logro más importante es ese: tener confianza para tirarse a la pileta.
La clave
El teatro comunitario genera una revalorización propia y del otro. Así como vienen familias, también participa gente sola que ha encontrado en el grupo un lugar de referencia que le permite verse porque el otro te refleja. Cuando uno se queda sólo no se ve. Podés tener un espejo pero no te ves: nadie te devuelve la mirada. Cuando estás haciendo teatro y tu compañero te pinta, te ayuda y te dice “Sacate eso, ponete esto” te va transformando. Ahí tenemos la clave: apoyarse en el otro.
Mu60
El peor veneno
Mu60
El modelo tóxico
En los últimos veinte años aumentó un 1.000% el uso de agrotóxicos en Argentina. Ya existen estudios científicos que prueban los efectos en la salud y la justicia ya prohibió en siete casos el uso de pesticidas en cercanías de pueblos de seis provincias. Darío Aranda radiografía un modelo contaminante y excluyente.
(más…)
#NiUnaMás
La ley del abuso
Marta Pelloni. Creó una red en defensa de la infancia, en un paisaje donde el abuso sexual y la trata, protegidos por el poder, son cosa de todos los días. Instalada en Goya, recorre toda la provincia correntina para denunciar ante la justicia y los medios lo que todos callan. Para ella un flagelo es el machismo. La mejor defensa: crear poder social.
(más…)
- Revista MuHace 4 días
Mu 199: Aguante lo comunitario
- ActualidadHace 2 semanas
Cometierra y Dolores Reyes: censura, femicidios y literatura
- ActualidadHace 3 semanas
Otro trabajador del subte murió de cáncer por asbesto
- NotaHace 4 semanas
Rosario y el asesinato de Pillín Bracamonte: un corte de luz antes de las balas
- #NiUnaMásHace 4 semanas
Lucía Pérez: así comenzó el juicio político a los jueces
- #NiUnaMásHace 2 semanas
Jury a los jueces Gómez Urso y Viñas: sin culpa y con cargo
- NotaHace 3 semanas
Tres audiencias ante la CIDH: mujeres, derechos humanos y economía popular
- Mu198Hace 2 semanas
La comunidad organizada: triunfo vecinal en Villa Lugano