Nota
De Jujuy a Buenos Aires, contra la violencia machista: familias viajaron para reclamar el fin de la impunidad

Familiares de distintas víctimas de la violencia machista y personas que denuncian impunidad judicial viajaron desde Jujuy a Capital Federal para saltear el cerco que, denuncian, reina en la provincia: “No tenemos visibilidad en Jujuy, estamos encerrados”. Lo que tienen en común: años de impunidad, perdida de expedientes, pagos de gastos judiciales, falta de búsqueda policial, complicidad policial y judicial, no hay imputados, no hay detenidos. Qué piden: presupuesto, visibilidad, justicia, memoria y verdad. Cómo lo están haciendo: “Gracias a las marchas la gente hoy no se calla”.
Una, y otra, y otra, y otra, y otra remera blanca con una foto estampada. Una sonrisa perdida. Y una palabra: justicia.
Una decena de familiares con remeras blancas y fotos estampadas caminan por las calles de Buenos Aires. Durante un largo día mantendrán distintas reuniones, conferencias e irán a Plaza de Mayo a grabar un video. En el medio, hablarán con lavaca para denunciar el grito que traen desde Jujuy, a 1.500 kilómetros y otras cosas más de distancia de la Casa Rosada.
Muchas no pueden estar acá por falta de miedo, o por falta de dinero”, cuenta Elmiro, familiar de Katherine Vilte, asesinada en 2011. “Nosotros somos la voz de todas estas víctimas de gente que se cree impune”.
El hermano de Rosita Aliaga, asesinada el 29 de mayo de 2015, saca cuentas: hace seis años y 5 meses que no hay justicia. Ni ningún detenido. “La causa está freanada”, define. “Tenemos la cuarta abogada del caso. La fiscalía en su momento no actuó para investigar, por eso es que hoy está la causa frenada”, explica. El sospechoso, la ex pareja.
Rosalia Quiroga se encuentra desaparecida. Una de sus familiares viajó para denunciar que no la buscan. “Yo conozco toda la provincia y les pregunto a los policías si conocen el caso de mi hija: no la conocen”, revela cómo verifica la inacción policial y judicial.
En el caso de Rosalía Lucía Quiroga, de Palpalá, la familia cuenta que el sospechoso es amigo de la policía: “Una persona de dinero, que tenía negocios”, cuentan como explicando las causas de la impunidad. “No hicieron bien el rastrillaje. Y la madre no pudo seguir buscándola, porque se enfermó. Lo único que quiere ella es que la sigan buscando”, trae su voz hasta Buenos Aires una de sus vecinas.
Roxana Mabel Cruz, por su parte, fue abusada sexualmente.Su relato estremece y demuestra la otra cara de la violencia machista: “Denuncié a mi jefe. Hasta el día de hoy, va a hacer 1 año, no me llamo la fiscalía, nada. Me dieron una medida cautelar para sacarme de mi lugar de trabajo. A la semana, lo ascienden. Me empezaron a tildar por loca, mentirosa. A los directores que yo denuncio, también: la jueza dijo que para protegerme a mí me sacaban del lugar de trabajo. Pero estaban protegiendo a ellos. Yo sé que me puse al frente de la denuncia y corro riesgo. Dos veces me amenazaron en mi casa. En Jujuy se ven que las mujeres que denuncian y son contratadas o precarizadas, las echan, quedan sin trabajo. Si a mí no me echan es porque soy planta permanente, pero es una constante lo de los abusos: hay muchos abusos, muchas violaciones, y también hay mucha impunidad. Caminar este camino de dolor es feo. Yo llevo una cruz por haber denunciado que fui abusada. Piensan que es mi culpa, que miento. Pero yo sé que hay algo bien claro que yo tengo: que yo no quiero que sigan pasando estas cosas. Les digo a otras mujeres que denuncien. Es lo que nos queda: seguir y seguir, porque yo sé que es lo que tengo ahora. Hay muchas mujeres que sufrimos en silencio durante años. Me toca ahora juntarme con muchas que ahora me cuentan”.
Desde el Barrio San Isidro de San Salvador de Jujuy, la hermana de Agustín denuncia una trama de impunidad que protagoniza al narcotráfico. Agustín apareció ahorcado hace 3 años y si bien los peritos dieron lo quisieron hacer pasar por suicidio, “mi mamá recaudando datos entendió que Agustín había sido asfixiado por alguien”. Sigue contando: “El abogado que estuvo llevando el caso había sido familia del juez y el sobrino de la fiscal: se cerró el caso0. Mi mamá venía denunciando cuestiones de drogas, creemos que fue un ajuste de cuentas. Y en la familia seguimos amenazados por los tranzas. Yo tengo miedo por mis hermanos menores. Queremos que se termine, la policía hasta ahora no hace nada”.
Así, la descripción de cada caso va dibujando a la máquina de violencia institucional y machista de la cual estas personas, al igual que sus seres perdidos, siguen siendo víctimas. Por eso, el relato detallado de los culpables de femicidios y culpables de la falta de justicia es una herida abierta que el Estado sigue profundizando día a día, sin dar respuestas.
Mientras tanto, ellas y ellos viajaron como quien escapa de una burbuja: “Todo Jujuy está a la expectativa de qué estamos haciendo acá. Se ponen nerviosos porque salimos de la provincia, donde allá tienen controlado”, dice la mamá de Iara Rueda.
“Lo que tenemos en común es que todos sufrimos”, sigue, y enseguida el resto suma otras conexiones: perdida de expedientes, pagos de gastos judiciales, no hay imputados, no hay detenidos, la mayoría no supera los 20 años.
“No tenemos visibilidad en Jujuy, estamos encerrados”, repiten. Y piden recursos, porque saben que los hay: “No es que no hay, sino que los privilegian hacia otro lado. Para otros, en 2, 3 meses se solucionan las cosas”. Aquí hay familias que cuentan que hay causas que llevan 10 años sin justicia.
Ahora, por primera vez, viajaron en una red de familiares que parece recién empezar.
En Jujuy, ya parieron una fórmula: “Gracias a las marchas, la gente hoy no se calla”.
En Buenos Aires pretenden prender la misma mecha.

Los casos
Uno de los femicidios emblemáticos de esta comitiva es el de Iara Rueda. Su madre fue una de las impulsoras del viaje.
Iara estuvo desaparecida desde el 24 de septiembre, luego de que un compañero la citara para entregarle unos materiales y tarea del colegio. La familia salió a buscarla desde un primer momento mientras, cuenta su madre Mónica, la policía ponía excusas y no la buscaba.
Después de una pueblada recién ahí empezaron rastrillajes. Pero, de nuevo, ante la falta de respuesta de la policía y el Estado, se cortó la ruta.
El lunes 28 de septiembre fue finalmente encontrada asesinada en un descampado de Barrio 2 de abril en Palpalá. La encontraron en un lugar donde los vecinos habían rastrillado días antes, luego de un llamativo apagón en todo el pueblo.
Por su femicidio se encuentran detenidos en prisión preventiva Raúl Arnaldo Cachizumba y Mauricio Esteban Abad, y hay involucrado un menor de 17 años, alojado en un Centro Educativo de Menores. Cachizuma y Abad están acusados de ser los autores del delito de «homicidio doblemente gravado por alevosía y femicidio», en tanto el menor de edad está imputado como presunto autor del delito de «homicidio triplemente gravado por alevosía, por el vínculo y femicidio».
La familia de Iara realizó, a su vez, una denuncia a funcionarios por incumplimiento de deberes. Denuncian que tanto Alejandra Martínez (Consejo Provincial de la Mujer), como Exel Meyer (Ministro de Seguridad) y Guillermo Corro (Jefe de la Policía) no activaron siquiera los protocolos de búsqueda para este tipo de casos.
Teléfono: Mónica – 38850822050.
Rosa Adriana Aliaga
Rosa “Rosita” Aliaga fue asesinada el 29 de mayo del 2015 en el barrio Virgen dela Merced, Libertador general San Martín, Jujuy. Fue punzada con un cuchillo la zona del cuello y fue arrastrada hasta el fondo de la casa y la semisepultaron.
Hasta el día de hoy el caso sigue impune: hubo un detenido 11 meses, pero lo dejaron en libertad por faltas de pruebas.
Contacto: 3886 448477.
Camila Peñalva
Este caso lo habían caratulado como muerte “por una broncoaspiración por ebriedad”. Su familia denunció desde el comienzo irregularidades en la investigación y acusó al perito oficial del caso de falsear la autopsia. Tras la conformación de una junta médica que realizó un informe completo, Roberto Quipildor, la ex pareja, quedó detenido y acusado por homicidio triplemente agravado: por el vínculo, por uso de veneno y por violencia de género.
Camila tenía dos hijos: Lara Yuliana Quipildor y Aarón Bruno Peñalva.
Por su caso viajó Walter Héctor Peñalva, tío de la víctima.
Celular: 1125534759.
Tania Palacios
El 15 diciembre 2019 en San Pedro de Jujuy Mauro Aparicio (miembro de fuerza federal) le dio un tiro en el pecho a Tania. El caso elevado juicio, y se espera fecha de juicio para dictar sentencia. Su madre reclama perpetua.
Se encuentra en Buenos Aires su tío Gabriel Palacios: 3888- 517871.
Cintia Tolaba
Cintia Tolaba se encuentra desaparecida desde el enero de 2016, en el departamento Santa Bárbara, Jujuy. Su familia denuncia que nadie la busca al día de hoy.
Tenía 15 años, en noviembre cumpliría 21.
Contacto: 3888608727.
Katherine Vilte
Katy salió de su casa con una amiga y a los días su cuerpo fue encontrado en el barrio Martijena. Corría 2011. Fue abusada y prendieron fuego su cuerpo.
10 años después, no hay detenidos y la familia pide que se haga justicia.
Contacto: 3885010774.
Paula y Bruno Huanco
Paula Huanco, de 28 años de edad y embarazada de 8 meses, fue atropellada en Alto Comedero el 5 de junio de 2021.
El conductor del automóvil, Ángelo Franco, de 38 años, fue imputado por homicidio simple con dolo eventual. Estaba alcoholizado.
La familia quiere que también se lo impute por el asesinato de Bruno, el niño que no llegó a nacer.
José María Villafañe
Fue asesinada el 3 mayo 2020 por su pareja, en complicidad con su amante. Su caso está caratulado como “homicidio calificado con alevosía agravado por el vínculo”. Se encuentran imputados Magalí Quiroga Sáenz y Víctor Hugo Garnica, en libertad. La causa se encuentra elevada a juicio, sin fecha de inicio.
Su hermana María Florencia se encuentra en Buenos Aires: 388 5070614.
Matías Puca
El 17 de septiembre de 2017 Matías Puca y sus amigos se bajaron mal del colectivo, confundieron las paradas y emprendieron caminata de unas 15 cuadras hasta el Regimiento 20, donde se alojaban. En ese trayecto, sobre avenida Fascio es que un auto atropella a Matías y dos compañeros más. Él se lleva la peor parte.
El auto se dio a la fuga. Tres días después Matías muere producto de los daños cerebrales y complicaciones del resto de las heridas causadas.
R. M. Cruz es el único detenido e imputado como supuesto responsable del delito de “homicidio simple” conforme lo previsto y penado por el artículo 79 del C.P.P.
Contacto: 1553457279.
Nota
De la idea al audio: taller de creación de podcast
Todos los jueves de agosto, presencial o virtual. Más info e inscripción en [email protected]
Taller: ¡Autogestioná tu Podcast!
De la idea al audio: taller de creación de podcast
Aprendé a crear y producir tu podcast desde cero, con herramientas concretas para llevar adelante tu proyecto de manera independiente.
¿Cómo hacer sonar una idea? Desde el concepto al formato, desde la idea al sonido. Vamos a recorrer todo el proceso: planificación, producción, grabación, edición, distribución y promoción.
Vas a poder evaluar el potencial de tu proyecto, desarrollar tu historia o propuesta, pensar el orden narrativo, trabajar la realización sonora y la gestión de contenidos en plataformas. Te compartiremos recursos y claves para que puedas diseñar tu propio podcast.
¿A quién está dirigido?
A personas que comunican, enseñan o impulsan proyectos desde el formato podcast. Tanto para quienes quieren empezar como para quienes buscan profesionalizar su práctica.
Contenidos:
- El lenguaje sonoro, sus recursos narrativos y el universo del podcast. De la idea a la forma: cómo pensar contenido y formato en conjunto. Etapas y roles en la producción.
- Producción periodística, guionado y realización sonora. Estrategias de publicación y difusión.
- Herramientas prácticas para la creación radiofónica y sonora.
Modalidad: presencial y online por Zoom
Duración: 4 encuentros de 3 horas cada uno
No se requiere experiencia previa.
Docente:
Mariano Randazzo, comunicador y realizador sonoro con más de 30 años de experiencia en radio. Trabaja en medios comunitarios, públicos y privados. Participó en más de 20 proyectos de podcast, ocupando distintos roles de producción. También es docente y capacitador.




Nota
Darío y Maxi: el presente del pasado (video)

Hoy se cumplen 23 años de los asesinatos de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki que estaban movilizándose en Puente Pueyrredón, en el municipio bonaerense de Avellaneda. No eran terroristas, sino militantes sociales y barriales que reclamaban una mejor calidad de vida para los barrios arrasados por la decadencia neoliberal que estalló en 2001 en Argentina.
Aquel gobierno, con Eduardo Duhalde en la presidencia y Felipe Solá en la gobernación de la provincia de Buenos Aires, operó a través de los medios planteando que esas muertes habían sido consecuencia de un enfrentamiento entre grupos de manifestantes (en aquel momento «piqueteros»), como suele intentar hacerlo hoy el gobierno en casos de represión de sectores sociales agredidos por las medidas económicas. Con el diario Clarín a la cabeza, los medios mintieron y distorsionaron la información. Tenía las imágenes de lo ocurrido, obtenidas por sus propios fotógrafos, pero el título de Clarín fue: “La crisis causó 2 nuevas muertes”, como si los crímenes hubieran sido responsabilidad de una entidad etérea e inasible: la crisis.

Darío Santillán.

Maximiliano Kosteki
Del mismo modo suelen mentir los medios hoy.
El trabajo de los fotorreporteros fue crucial en 2002 para desenmascarar esa mentira, como también ocurre por nuestros días. Por aquel crimen fueron condenados el comisario de la bonaerense Alfredo Franchiotti y el cabo Alejandro Acosta, quien hoy goza de libertad condicional.
Siguen faltando los responsables políticos.
Toda semejanza con personajes y situaciones actuales queda a cargo del público.
Compartimos el documental La crisis causó 2 nuevas muertes, de Patricio Escobar y Damián Finvarb, de Artó Cine, que puede verse como una película de suspenso (que lo es) y resulta el mejor trabajo periodístico sobre el caso, tanto por su calidad como por el cúmulo de historias y situaciones que desnudan las metodologías represivas y mediáticas frente a los reclamos sociales.
Nota
83 días después, Pablo Grillo salió de terapia intensiva

83 días.
Pasaron 83 días desde que a Pablo Grillo le dispararon a matar un cartucho de gas lacrimógeno en la cabeza que lo dejó peleando por su vida.
83 días desde que el fotógrafo de 35 años se tomó el ferrocarril Roca, de su Remedios de Escalada a Constitución, para cubrir la marcha de jubilados del 12 de marzo.
83 días desde que entró a la guardia del Hospital Ramos Mejía, con un pronóstico durísimo: muerte cerebral y de zafar la primera operación de urgencia la noche del disparo, un desenlace en estado vegetativo.
83 días y seis intervenciones quirúrgicas.
83 días de fuerza, de lucha, de garra y de muchísimo amor, en su barrio y en todo el mundo.
83 días hasta hoy.
Son las 10 y 10 de la mañana, 83 días después, y ahí está Pablito, vivito y sonriendo, arriba de una camilla, vivito y peleándola, saliendo de terapia intensiva del Hospital Ramos Mejía para iniciar su recuperación en el Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca, en el barrio porteño de Monte Castro.
Ahí está Pablo, con un gorro de lana de Independiente, escuchando como su gente lo vitorea y le canta: “Que vuelva Pablo al barrio, que vuelva Pablo al barrio, para seguir luchando, para seguir luchando”.
Su papá, Fabián, le acaricia la mejilla izquierda. Lo mima. Pablo sonríe, de punta a punta, muestra todos los dientes antes de que lo suban a la ambulancia. Cuando cierran la puerta de atrás su gente, emocionada, le sigue cantando, saltan, golpean la puerta para que sepa que no está solo (ya lo sabe) y que no lo estará (también lo sabe).
Su familia y sus amigos rebalsan de emoción. Se abrazan, lloran, cantan. Emi, su hermano, respira, con los ojos empapados. Dice: “Por fin llegó el día, ya está”, aunque sepa que falta un largo camino, sabe que lo peor ya pasó, y que lo peor no sucedió pese a haber estado tan (tan) cerca.
El subdirector del Ramos Mejía Juan Pablo Rossini confirma lo que ya sabíamos quienes estuvimos aquella noche del 12 de marzo en la puerta del hospital: “La gravedad fue mucho más allá de lo que decían los medios. Pablo estuvo cerca de la muerte”. Su viejo ya lloró demasiado estos casi tres meses y ahora le deja espacio a la tranquilidad. Y a la alegría: “Es increíble. Es un renacer, parimos de nuevo”.
La China, una amiga del barrio y de toda la vida, recoge el pasacalle que estuvo durante más de dos meses colgado en las rejas del Ramos Mejía exigiendo «Justicia por Pablo Grillo». Cuenta, con una tenacidad que le desborda: «Me lo llevo para colgarlo en el Rocca. No vamos a dejar de pedir justicia».
La ambulancia arranca y Pablo allá va, para continuar su rehabilitación después del cartucho de gas lanzado por la Gendarmería.
Pablo está vivo y hoy salió de terapia intensiva, 83 días después.
Esta es parte de la vida que no pudieron matar:
- Revista MuHace 3 semanas
Mu 204: Creer o reventar
- AmbienteHace 3 semanas
Contaminación: récord histórico de agrotóxicos en el Río Paraná
- ActualidadHace 4 semanas
Los vecinos de Cristina
- ArtesHace 1 semana
Vieron eso!?: magia en podcast, en vivo, y la insolente frivolidad
- ActualidadHace 4 semanas
Universidad, ciencia y comunidades: encuentro en Rosario y debate frente a la policrisis