Sigamos en contacto

#NiUnaMás

Diana Sacayán: Hasta la victoria siempre

«Nuestra militancia no tiene que morir en los derechos de determinadas personas. Si no, vamos a tener un gueto, una mirada chica del mundo. Incluso hay que sortear la identidad travesti. Nuestra agenda no se muere con la Ley de Identidad de Género»

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

“Nuestra militancia no tiene que morir en los derechos de determinadas personas. Si no, vamos a tener un gueto, una mirada chica del mundo. Incluso hay que sortear la identidad travesti. Nuestra agenda no se muere con la Ley de Identidad de Género, nosotras planteamos la despenalización del aborto, demandas del movimiento indígena y del medio ambiente. Porque, si no, nuestro lugar pareciera ser la prostitución. Y hay sectores que quieren regularla. Particularmente, y por la experiencia que he tenido, pienso que es la expresión más clara de lo que es la violencia callejera, policíaca, institucional. Ha hecho mucho daño en la autoestima de las mujeres travestis. Incluso en la mía: me costó mucho correrme de ese lugar. Todavía sigo luchando para salir de ahí porque es un lugar horrible. Tenemos que desbaratar ese discurso: no queremos que nos condenen eternamente a esos rincones oscuros”.

Diana Sacayán: Hasta la victoria siempre

Diana Sacayán. Foto: Julieta Colomer


Tucumana y matancera, Diana Sacayán no dejaba un margen, un borde, un hueco. La última charla con MU fue hace meses (de allí esta cita), y sus palabras eran duras, filosas, claras y dulces a la vez. Ese día estaba radiante: llegaba del salón Ramón Carrillo del Ministerio de Salud de la Nación, que presentaba la Guía de Atención de la Salud de Personas Trans, luego de que el movimiento empujara con una militancia única en el mundo la reglamentación del artículo 11 de la Ley de Identidad de Género, que protocoliza el acceso a la salud integral. Diana se reía y bromeaba en plena conquista, pero al segundo se ponía seria y entre festejos planeaba ya el próximo paso: la ley de cupo laboral trans para la provincia de Buenos Aires.
Así.
Con la batalla aún hirviendo de victoria Diana ya planificaba la próxima.
Siempre hasta la victoria, hasta la victoria siempre.
Lo mejor: la consiguió, la hizo ley, la hizo carne, la hizo Historia.
Diana Sacayán fue encontrada muerta este martes en su departamento en Flores. Tras dos días de extraño silencio, sus compañeras recibieron el aviso del portero del edificio donde vivía: su puerta estaba abierta. Así encontraron su cuerpo con un puntazo en el tórax. «Se investiga un crimen, un homicidio», citó la agencia de noticias Infojus de fuentes judiciales. La Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres, a través de la fiscal federal Mariela Labozzeta, pidió intervenir en la investigación. El Inadi pidió constituirse como querellante. Interviene la comisaría N°38 de la Ciudad de Buenos Aires y la Fiscalía de Instrucción N°4, a cargo de Matías Di Lello.
Diana se postuló en 2012 como candidata a ocupar la Defensoría del Pueblo de La Matanza. Desde allí militaba en el Movimiento Antidiscriminatorio de Liberación (MAL). Trabajó en el Inadi y colaboró en el suplemento Soy (Página/12) y fue uno de los cráneos de la revista El Teje, la primera publicación travesti en América Latina.
Diana Sacayán: Hasta la victoria siempre

Diana Sacayán. Foto: Julieta Colomer


Semanas atrás había denunciado a la Policía Metropolitana. Por su detención arbitraria fueron llamados a indagatoria al menos 12 policías por torturas y privación ilegítima de la libertad. Otra agresión fue en 2013 (ver la nota Violencia de género con complicidad del Estado). Estaba en bar dentro de la estación de trenes de Laferrere cuando un hombre empezó a insultarla. Diana, naturalmente, respondió, pero finalmente se levantó para retirarse del lugar. El hombre se abalanzó sobre ella, la tiró al piso y empezó a pegarle patadas en la cara hasta dejarla sangrando. Diana logró escapar y pidió ayuda a tres gendarmes que estaban en la estación, pero soltaron al agresor y atacaron a Diana con bastonazos. Le rompieron una costilla y tuvo que ser intervenida quirúrgicamente en la nariz.
El movimiento trans está de luto.
La sociedad también: asesinaron a una de las militantes más brillantes de esta época.

Portada

Oraciones, entre la cruz y la raya: un ritual para presentar el nuevo libro del Observatorio Lucía Pérez

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Este domingo 16 de noviembre presentamos el nuevo libro del Observatorio de Violencia Patriarcal Lucía Pérez, editado por lavaca, con una perfomance conmovedora: Oraciones, entre la cruz y la raya fue una obra de teatro danza basada en los ejes teóricos de Femicidios, narcotráfico y Estado. La puesta transformó en lenguaje poético, corporal y musical una realidad que duele y mata, de la mano de talentosas artistas.

Oraciones, entre la cruz y la raya: un ritual para presentar el nuevo libro del Observatorio Lucía Pérez

Familias sobrevivientes de femicidios, con el libro del cual son parte: el nuevo libro del Observatorio Lucía Pérez.

Oraciones, entre la cruz y la raya: así se llamó la presentación performática del nuevo libro del Observatorio Lucía Pérez editado por lavaca y titulado Femicidios, narcotráfico y Estado.

La obra de teatro y danza indagó en los mecanismos que operan sobre los cuerpos y los territorios desde una dramaturgia que combinó texto, movimiento y música. El resultado fue una experiencia que funcionó tanto como obra artística como herramienta para hacer sentir, colectivamente, de qué hablamos cuando hablamos de femicidios.

La obra fue ideada y escrita por Claudia Acuña, también responsable de la dirección general del Observatorio Lucía Pérez. En escena, Oraciones desplegó el trabajo de las intérpretes Julieta Costa, Lola Dominguez Hayes, Lucía Harismendy, Pia Leone, Luca y Juana Torras, quienes construyeron una trama sensible entre la fragilidad y la fortaleza. La música en vivo, a cargo de Santiago Torricelli en piano, aportó un pulso emocional que atravesó toda la pieza.

El diseño sonoro siguió de la mano de Pía Leone, junto con la operación técnica de Teo Escobar y Lucas Pedulla. Y el diseño gráfico estuvo a cargo de Jonatan Ramborger (autor, también, de la tapa del libro) y Julie August.

La puesta en escena fue realizada por Julieta Costa, mientras que la dirección coreográfica estuvo a cargo de la reconocida directora y coreógrafa Carla Rímola.

Oraciones dejó en quienes asistieron la certeza de que el arte no sólo puede denunciar lo que duele, sino también abrir caminos para imaginar otras formas de vida y de cuidado.

Y también, otras formas de presentar un libro.

El Observatorio y su libro

El Observatorio Lucía Pérez es una herramienta de análisis, debate y acción creada por lavaca.org con el objetivo de profundizar el trabajo sobre formas de prevención y erradicación de la violencia patriarcal.  

Cada día un equipo conformado por Claudia Acuña, Amalia Etchesuri, Anabella Arrascaeta y Pablo Lozano actualiza 12 padrones de manera autogestiva, datos que sumados al seguimiento de lo publicado en medios de todo el país son luego chequeados y precisados con fuentes judiciales y periodísticas. Se trata del único registro público del país, lo cual quiere decir que pueden consultarse las fuentes de cada dato.

Cada mes el Observatorio realiza un resumen de este diagnóstico junto a víctimas y familias sobrevivientes de femicidios. El resultado es el informe mensual que se difunde a través de organizaciones sociales y referentes de la política y la cultura que intenta pensar, más allá de las cifras, la radiografía social y política de esta violencia.

Femicidios, narcotráfico y Estado reúne ahora y por primera vez los distintos informes, investigaciones y acciones del Observatorio Lucía Pérez. Es un material que indaga a través de la articulación de textos teóricos y reportajes periodísticos las vinculaciones entre lo narco, la violencia machista, los femicidios y el rol del Estado en la trama de la impunidad.

Todo eso quedó plasmado en esta presentación-ritual colectivo para empezar a sanar una realidad que duele, y organizar la realidad que viene: aquella que queremos, deseamos y nos merecemos.

Si querés el libro escribinos al teléfono que figura en este link, y suscribite para apoyar todo lo que hacemos:

Seguir leyendo

#NiUnaMás

La venda en los ojos: la justicia frente al abuso sexual contra niñas y niños 

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

El 42% de las denuncias de violencia sexual corresponden a menores de 17 años en la ciudad de Buenos Aires. El ministerio de Justicia bonaerense reveló que entre 2017 y 2022, de más de 96.000 causas por abuso sexual, 6 de cada 10 tuvieron como víctimas a menores y se duplicó el número de denuncias: el 80% fueron mujeres, principalmente niñas y adolescentes de entre 12 y 17 años. ¿Cómo recibe el Poder Judicial a las infancias que se atreven a denunciar abusos? Las víctimas convertidas en “culpables” de un delito que padece a nivel mundial entre el 15 y el 20% de la niñez. La campaña conservadora y oficial: desestimar denuncias y motosierra. Lo que no quiere ver la justicia. Cómo encarar estos casos, y la enseñanza de Luna. Por Evangelina Bucari.

(más…)
Seguir leyendo

#NiUnaMás

Cecilia Basaldúa: el cuerpo desaparecido

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Daniel y Susana denunciaron que desapareció el cuerpo de su hija, Cecilia Basaldúa, que reclamaban para realizar nuevas pericias. La historia de lo ocurrido y el rol de la fiscal de Córdoba Paula Kelm “que hizo todo lo posible para que los asesinos de Cecilia sigan hoy libres e impunes”.

Por Claudia Acuña

El 7 de noviembre Cecilia Basaldúa hubiese cumplido 42 años y no hay festejo porque no hay Cecilia: la desaparecieron, violaron y mataron en abril del año 2020, en Capilla del Monte y en pleno aislamiento por la pandemia de Covid. Su familia, como cada año, reunió amistades y  familiares de otras víctimas de femicidios territoriales –el padre de Natalia Melman, el hermano de Laura Iglesias– en el mural que la recuerda en su barrio de Belgrano. Fue ese el marco elegido por Daniel y Susana, los padres de Cecilia, para compartir lo que significa buscar justicia para este tipo de crímenes. Con la voz partida por el dolor narró cómo fue la última reunión con la nueva fiscal responsable de la investigación:  es la cuarta. La primera – Paula Kelm– desvió las pruebas para atrapar a un perejil, que fue liberado en el juicio oral y así la investigación del femicidio de Cecilia volvió en punto cero; el segundo estaba a meses de jubilarse y pidió varias licencias para acortar su salida; el tercero –Nelson Lingua– no aprobó el examen para ocupar el puesto y, finalmente, desde hace pocos meses, llegó ésta –Sabrina Ardiles– quien los recibió junto a dos investigadores judiciales y los abogados de la familia. Antes se habían reunido con el ministro de Justicia de la provincia de Córdoba, Julián López, quien le expresó el apoyo para “cualquier cosa que necesiten”. Fue entonces cuando Daniel y Susana creyeron que había llegado el momento de trasladar el cuerpo de su hija hasta Capital, donde viven y, además, habían logrado conseguir que se realice una pericia clave para la causa y que siempre, en estos cinco años, les negaron. Fue la joven investigadora judicial quien soltó la noticia: el cuerpo de Cecilia no está.

Cecilia Basaldúa: el cuerpo desaparecido

Gustavo Melmann, que sigue buscando justicia por su hija Natalia, junto a Daniel Basaldúa y Susana Reyes, los padres de Cecilia.

Según pudo reconstruir la familia después del shock que les produjo la noticia, fue en 2021 –cuando todavía estaban vigentes varias restricciones originadas por la pandemia– cuando el cuerpo fue retirado de la morgue judicial, a pesar de que Daniel y Susana habían presentado un escrito solicitando lo retuvieran allí hasta que se realicen las pruebas por ellos requeridas. La fiscal Kelm no respondió a ese pedido ni notificó a la familia de lo que luego ordenó: retirar el cuerpo de la morgue y enterrarlo.

¿Dónde? La familia está ahora esperando una respuesta formal y sospechando que deberán hacer luego las pruebas necesarias para probar la identidad, pero no dudan al afirmar que con esta medida han desaparecido el cuerpo de su hija durante varios años y definitivamente las pruebas que podía aportar su análisis.

A su lado está Gustavo Melmann, en el padre de Natalia, asesinada en 4 de febrero de 2001 en Miramar, quien desde entonces está esperando que el Poder Judicial realice el análisis de ADN del principal sospechoso de su crimen: un policía local. Por el femicidio de Natalia fueron condenados a prisión perpetua otros tres efectivos policiales. Uno ya goza de prisión domiciliaria. Falta el cuarto, el del rango más alto.

Melmann cuenta que se enteró de la desaparición de Cecilia Basaldúa por su sobrina, quien había ido al secundario con ella. “Fue el primero que nos llamó”, recuerda Daniel. También rememora que no entendió por qué le ofrecía conseguir urgente a un abogado “si yo la estaba buscando viva. Hoy me doy cuenta de mi ingenuidad”.

El silencio entre quienes los rodean es un grito de impotencia.

Daniel y Susana lo sienten y responden: “Nosotros no vamos a parar. Nada nos va a detener. Ningún golpe, por más artero que sea, va a impedir que sigamos exigiendo justicia. Elegimos contar esto hoy, rodeados de la familia y los amigos, porque son ustedes quienes nos dan fuerza. Que estén hoy acá, con nosotros, es lo que nos ayuda a no parar hasta ver a los responsables presos, y esto incluye a la fiscal Kelm, que hizo todo lo posible para que los asesinos de Cecilia sigan hoy libres e impunes”.

Cecilia Basaldúa: el cuerpo desaparecido

Los padres y hermanos de Cecilia, junto al mural que la recuerda en el barrio de Belgrano.

Seguir leyendo

Lo más leido

Anticopyright lavaca. Todas nuestras notas pueden ser reproducidas libremente. Agradecemos la mención de la fuente. ©2025 Agencia lavaca.org. Riobamba 143, Ciudad Autónoma de Buenos Aires - Argentina - Editor responsable: Cooperativa de Trabajo Lavaca ltda. Número de propiedad intelectual: 50682265 - [email protected] | Tel.: +54 9 11 2632-0383

Vistas el día de hoy: 37.053