Teatro Sanitario de Operaciones: Ser parte de la escena
Publicada
hace 2 años
el
Un grupo artístico constituido hace casi tres décadas, que hace base en la primera fábrica recuperada del país (IMPA), utiliza lugares no convencionales para llevar a cabo sus obras y los transforma en espacios de atmósferas que desatan diferentes reacciones en sus asistentes. Teatro Sanitario de Operaciones (TSO) propone ahora un provocador happening teatral que invita a reflexionar sobre cuestiones de las que no solemos hablar, con diferentes estímulos, una historia silenciada y hasta una cena que incluye público y personajes.
Un día antes de la cita, una imagen enviada por whatsapp anuncia: “Ahora comencemos”. De esta manera se arranca a palpitar esta experiencia performática que propone el grupo Teatro Sanitario de Operaciones (TSO), creado en 1996 a raíz de un seminario dictado por el reconocido grupo catalán La Fura dels Baus. Allí algunxs alumnxs prepararon una performance y el dueño de Dr. Jekyll, el mítico local musical muy frecuentado en los ´90, les ofreció ser teloneros de las bandas que tocaban allí, Babasónicos, los Fabulosos Cadillacs y Divididos, entre otras. Ese fue el germen de este grupo que se autodefine no como una compañía de teatro sino como un proceso artístico, que ya lleva varias obras en su haber e hizo de IMPA, la primera fábrica recuperada del país, un lugar para habitar y experimentar, un espacio de acción e inspiración.
El día del evento recibís la dirección donde ocurrirá lo que denominan happening teatral, que incluye la cena —onmívora, vegetariana o vegana— y la bebida corre por cuenta de cada comensal: te podés llevar tu botella para tomar lo que quieras.
Prohibido comenzó en diciembre del año pasado y agota todas las funciones. ¿Cuál es el límite? ¿Dónde empieza el terreno de lo prohibido?, se preguntan e invitan a reflexionar. “A partir de una clausura que sufría IMPA —cuenta Kike López, el director— que aún estamos gestionando, por suerte la fábrica sigue funcionando, pero ese hecho desarticuló el trabajo que venía realizando el centro cultural. Encontramos este espacio en el barrio de La Paternal para poder seguir entrenando y haciendo laboratorio de nuestras propuestas. Así fue que en un momento y desde nuestra opción de intervenir espacios no convencionales para montar hechos artísticos, comenzamos Prohibido desde una propuesta de trabajo creativo colectivo”.
«Comencemos por la muerte», dice una chica mirándonos a los ojos en una sala iluminada con velas. Así, nos enfrentaremos a uno de los misterios más temidos por toda la humanidad. Y no es el único tópico, claro; habrá otros que iremos descubriendo a medida que transitemos los pisos de este espacio y sumergiéndonos en diferentes atmósferas. No hay sillas, ni escenario. Lxs espectadorxs nos convertimos en activos transeúntes, podemos movernos, acercanos, quizás hasta ser parte de la escena. Alguien se aleja, alguien se inmiscuye, alguien baila cuando la música invade nuestras orejas.
El grupo trabajó con las posibilidades que les brindaba el espacio, pegado a lo que se conoce como “la isla” en el barrio de La Paternal, y llevó el concepto de lo prohibido como protagonista, como un ovillo del cual tirar e hilar las distintas situaciones que enmarcan la obra, o happening, y van de la mano de los mandatos culturales. “Queríamos meternos con temas que están sumamente tapados —explica Kike— y que son mucho más comunes de lo que creemos: tipos de relaciones familiares que conllevan a decisiones extremas y que son sustento de años de terapias. No los puedo nombrar porque son parte de la dramaturgia de la obra, que mantiene el hermetismo hasta el final donde el público puede hilvanar todo el argumento. Pero sí nos interesaba destacar prohibiciones, mandatos que nuestras culturas llevan y que en un futuro no muy lejano, suponemos, serán puestas en duda y revisión”.
Foto: PimientaNegraph
Al bajar nuevamente a la planta baja hay mesas ya dispuestas para la cena y se puede ver al director-cocinero preparando las delicias. Las actrices y actores se acercan (sin salirse de sus roles) y mantienen efusivas y divertidas charlas con lxs espectadorxs-comensales. Kike subraya la complejidad de la obra ya que, además de la actuación, entra en juego otra logística que tiene que ver con lo gastronómico. “Entrenamos las escenas, armamos cada espacio, y después de cada encuentro nos reuníamos, cocinábamos y comíamos juntos: de ahí fuimos armando esta peculiar propuesta donde el público compromete todos sus sentidos, hasta el paladar”.
La interacción con lxs asistentes, que no son concebidxs como un grupo humano pasivo, silencioso y sólo observador, es un sello distintivo de las producciones artísticas del TSO.
Mover el avispero, empujarte de la inercia, ser un sacudón, son efectos primarios que irrumpen en cada propuesta de este movimiento artístico autogestivo. “¿De qué sirve no seguir el propio deseo?” interpela Pedro, uno de los involucrados en esta historia. “Si no encuentro las respuestas en la familia, las hallaré en los días. Necesito saber”, implora Juan. “Familia: un conjunto de desgraciados que comparten la misma sangre. Que a mí no me vengan a vender papelitos de colores”, reprocha Lourdes.
“Una bacanal sofista” imaginaron cuando concebieron Prohibido. “El espectador, a la vez de comer, comienza a compartir una lugar dentro de la obra, en un tiempo anacrónico, donde el rompecabezas que acaba de presenciar se le presenta como en un cuadro renacentista de platos llenos de sobras, pedazos de pan y copas de vino”.
Durante el tiempo en que transcurre la obra, lxs participantes suben escaleras y en cada piso sucede algo diferente: reciben estímulos sensoriales, son atravesadxs por distintos climas emocionales, comen y beben entre desconocidxs sin que así lo parezca.
Mientras esto sucede, los secretos, tabúes y pavores nos rozan con sus huellas delatoras.
Kike asegura: “Prohibido es un espectáculo para gente curiosa”.
Pablo Grillo: llaman a indagatoria al gendarme Guerrero a seis meses de un disparo criminal
Publicada
hace 18 horas
el
21/07/2025
El 2 de septiembre el gendarme que disparó una granada de gas lacrimógeno por fuera de todos los protocolos de la fuerza deberá comparecer ante la justicia. La decisión la tomó la jueza María Servini de Cubría más de cuatro meses después del hecho. Pablo Grillo luchó por su vida, perdió masa encefálica y hoy se encuentra en plena rehabilitación. Todo lo que deberá explicar Héctor Guerrero y que implica a su principal defensora y la responsable de la violencia estatal: Patricia Bullrich.
Por Francisco Pandolfi y Lucas Pedulla. Foto: Juan Valeiro para lavaca.org
Cuatro meses y una semana pasaron desde el miércoles 12 de marzo. Ese día, durante otra violenta represión a la marcha de jubilados y jubiladas, el Gendarme Héctor Guerrero le disparó fuera de toda legalidad una granada de gas lacrimógeno al reportero gráfico Pablo Grillo, cuyo impacto casi lo mata, y por el que perdió parte de la masa encefálica, estuvo casi tres meses internado en terapia intensiva en el Hospital Ramos Mejía y por el que hoy continúa en proceso de rehabilitación. Cuatro meses y una semana pasaron hasta hoy, lunes 21 de julio, en el que la jueza María Servini citó a indagatoria al gendarme, autor material de lanzamiento, para el próximo 2 de septiembre.
Es decir: entre la ejecución y la audiencia habrán pasado 131 días, casi seis meses, casi medio año.
El camino de la in-justicia
En un primer momento, la jueza había rechazado el expediente y el caso había pasado al Juzgado Federal N° 12, donde tramitaba otra denuncia por los mismos hechos. Como ese juzgado estaba vacante y subrogado por Ariel Lijo, quien también se declaró incompetente y declinó la competencia, el expediente regresó al Juzgado N° 1 el 28 de marzo y la jueza Servini lo tiene en sus manos desde el 10 de abril, a la vuelta de una licencia.
La cronología detalla el tiempo que una familia debe atravesar para exigir justicia por un hecho de violencia estatal: desde el 21 de marzo en que el papá, la mamá y el hermano de Pablo se presentaron en la causa como querellantes, solicitaron se llame a Guerrero a declarar “en calidad de imputado, por tentativa de homicidio agravado por abuso funcional, abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público”. Pero no hubo respuesta. Por eso, el 6 de junio, reiteraron el pedido con estos argumentos: “Desde el inicio de la investigación, todas y cada una de las pruebas recabadas por el Juzgado corroboran lo que planteamos en nuestra querella del 21 de marzo: el cabo primero Héctor Jesús Guerrero de la Gendarmería Nacional Argentina fue el autor del disparo de la pistola lanzagases que hirió de gravedad a Pablo Grillo el 12 de marzo a las 17.18hs”. Y agregaron: “En el pedido que presentamos ante la jueza Servini ofrecemos una descripción de los hechos y un análisis pormenorizado de los elementos de prueba existentes hasta el momento”.
Y no hubo dos sin tres: el 15 de julio se le volvió a exigir al Juzgado que lo cite a Guerrero.
Y la tercera fue la vencida: este lunes, Servini citó a prestar declaración indagatoria al cabo Guerrero como autor del disparo con cartucho de gas lacrimógeno calibre 38mm que impactó en la cabeza de Pablo Grillo. La audiencia será el 2 de septiembre a las 10.
Guerrero es el primer efectivo formalmente imputado en la causa por el operativo policial del 12 de marzo.
Desde la querella informaron: “El juzgado ordenó la realización de una pericia balística a cargo de la División Balística de la Policía de la Ciudad para reconstruir con el mayor nivel de precisión técnica posible el disparo que hirió de gravedad a Pablo. Si bien la jueza consideró que ya existen elementos de prueba contundentes respecto de la responsabilidad de Guerrero para esta instancia, sostuvo que la pericia es necesaria para afianzar la reconstrucción de la dinámica del hecho”.
La pericia tendrá como objetivos precisar:
-La trayectoria y velocidad del proyectil que impactó en la cabeza de Pablo Grillo;
-La posición del arma al momento de efectuarse el disparo y el ángulo de salida del proyectil;
-Analizar si el proyectil impactó previamente contra otra superficie, y si eso alteró su dirección o energía.
-Las ubicaciones de Grillo y de Guerrero al momento del disparo.
El juzgado también ordenó, previo a la pericia, una inspección en el lugar del hecho (la esquina de Hipólito Yrigoyen y Solís) que incluirá un relevamiento fotográfico terrestre y aéreo y la elaboración de un croquis detallado de la escena.
Además, le prohibió a Guerrero la salida del país.
Compartimos el perfil de Pablo que realizamos en la edición 203 de MU.
De la idea al audio: taller de creación de podcast
Publicada
hace 3 semanas
el
03/07/2025
Todos los jueves de agosto, presencial o virtual. Más info e inscripción en [email protected]
Taller: ¡Autogestioná tu Podcast!
De la idea al audio: taller de creación de podcast
Aprendé a crear y producir tu podcast desde cero, con herramientas concretas para llevar adelante tu proyecto de manera independiente.
¿Cómo hacer sonar una idea? Desde el concepto al formato, desde la idea al sonido. Vamos a recorrer todo el proceso: planificación, producción, grabación, edición, distribución y promoción.
Vas a poder evaluar el potencial de tu proyecto, desarrollar tu historia o propuesta, pensar el orden narrativo, trabajar la realización sonora y la gestión de contenidos en plataformas. Te compartiremos recursos y claves para que puedas diseñar tu propio podcast.
¿A quién está dirigido?
A personas que comunican, enseñan o impulsan proyectos desde el formato podcast. Tanto para quienes quieren empezar como para quienes buscan profesionalizar su práctica.
Contenidos:
El lenguaje sonoro, sus recursos narrativos y el universo del podcast. De la idea a la forma: cómo pensar contenido y formato en conjunto. Etapas y roles en la producción.
Producción periodística, guionado y realización sonora. Estrategias de publicación y difusión.
Herramientas prácticas para la creación radiofónica y sonora.
Modalidad: presencial y online por Zoom Duración: 4 encuentros de 3 horas cada uno No se requiere experiencia previa.
Docente:
Mariano Randazzo, comunicador y realizador sonoro con más de 30 años de experiencia en radio. Trabaja en medios comunitarios, públicos y privados. Participó en más de 20 proyectos de podcast, ocupando distintos roles de producción. También es docente y capacitador.
Hoy se cumplen 23 años de los asesinatos de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki que estaban movilizándose en Puente Pueyrredón, en el municipio bonaerense de Avellaneda. No eran terroristas, sino militantes sociales y barriales que reclamaban una mejor calidad de vida para los barrios arrasados por la decadencia neoliberal que estalló en 2001 en Argentina.
Aquel gobierno, con Eduardo Duhalde en la presidencia y Felipe Solá en la gobernación de la provincia de Buenos Aires, operó a través de los medios planteando que esas muertes habían sido consecuencia de un enfrentamiento entre grupos de manifestantes (en aquel momento «piqueteros»), como suele intentar hacerlo hoy el gobierno en casos de represión de sectores sociales agredidos por las medidas económicas. Con el diario Clarín a la cabeza, los medios mintieron y distorsionaron la información. Tenía las imágenes de lo ocurrido, obtenidas por sus propios fotógrafos, pero el título de Clarín fue: “La crisis causó 2 nuevas muertes”, como si los crímenes hubieran sido responsabilidad de una entidad etérea e inasible: la crisis.
Darío Santillán.
Maximiliano Kosteki
Del mismo modo suelen mentir los medios hoy.
El trabajo de los fotorreporteros fue crucial en 2002 para desenmascarar esa mentira, como también ocurre por nuestros días. Por aquel crimen fueron condenados el comisario de la bonaerense Alfredo Franchiotti y el cabo Alejandro Acosta, quien hoy goza de libertad condicional.
Siguen faltando los responsables políticos.
Toda semejanza con personajes y situaciones actuales queda a cargo del público.
Compartimos el documental La crisis causó 2 nuevas muertes, de Patricio Escobar y Damián Finvarb, de Artó Cine, que puede verse como una película de suspenso (que lo es) y resulta el mejor trabajo periodístico sobre el caso, tanto por su calidad como por el cúmulo de historias y situaciones que desnudan las metodologías represivas y mediáticas frente a los reclamos sociales.