Sigamos en contacto

Nota

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Pocas horas después de que la Cámara de Diputados haya dictaminado sobre la Ley Ómnibus, en todo el país hubo movilizaciones que quienes la vivieron las definen así: “Nunca vi una tan grande”. Enorme fue la marea en Mar del Plata, Rosario, Neuquén, Bariloche, Córdoba, y grandes también las de aquellas ciudades que suelen tener menos protagonismo en este tipo de protestas, como Comodoro Rivadavia, San Martín de los Andes o las playas de Mar de Ajó y Mar Azul. Mendoza también tuvo su jornada histórica (ver crónica) y hasta en el fin del mundo, allá en Ushuaia, se escuchó cantar: “la patria no se vende”. El dato: son todas localidades donde el actual Presidente obtuvo un triunfo arrollador hace menos de dos meses.Las protestas expresan un rechazo que logró un primer objetivo: la sesión que pretende la media sanción iba a ser mañana, pero se demora hasta el próximo martes. ¿Qué expresaron esas voces?

Fotos: Martina Perosa para lavaca

El Congreso Nacional fue hoy el epicentro de un grito que pretendía que allí resonara. Se trata de voces que quisieron hacerse oír por quienes deben representarlas.

Comprender lo que expresaron es un desafío para la política y para la democracia.

Algunas de esas voces las escuchó lavaca

“Hay que volver a hablar con todo el mundo, hay que volver a hablar con este pueblo, explicar todo de vuelta, volver a las prácticas asamblearias”, dice la artista Susy Shock en medio de la enorme ola que se autoconvocó al punto de cita de “la cultura”, apretadísima en la zona de Avenida de Mayo y Sáenz Peña. Lo que dice se comprueba al instante: por la calle lateral pasan los vecinos y vecinas de todas las asambleas de la ciudad. 

Sigue Susy: “Lo nuevo no va a venir con recetas viejas. No queremos que nos inviten a resistir de la misma manera. Queremos nuevas aventuras y queremos escuchar a la gente joven, a la disidencias, a los transfeminismos no burocratizados. Y también una crítica a ese sector feminista que se vendió por un asiento, se quedó cómodo y se olvidó del pueblo, y sin el pueblo nada es posible”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo
Susana Reyes, mamá de Cecilia Basaldúa, Carla Morales Ríos y Daniel Basaldúa. Foto: Martina Perosa

Susy ahora exige: ”Quiero que con la diversidad que soy, con el cuerpo trava que porto, me inviten a discutir todos los temas. Ser parte de la discusión general y no quedar en una de género y nada más. Ese es el desafío. ¿Lo próximo? El 24 de marzo. Y que al lado de Norita esté Marlene Wayar”.

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo
Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo. Foto: Martina Perosa

Norita es Nora Cortiñas, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, que está a media cuadra de Susy, diciendo. “Quiero futuro para el pueblo, para mis hijos y mis nietos: quiero una mesa digna para todos”. ¿Cómo lograrlo? Norita propone tener esperanza, creer en nosotros mismos y salir a la calle: “Tenemos que juntarnos”.  

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

La mesa y la comida también son temas que menciona una jubilada que llegó desde Ramos Mejía con 81 años a cuestas. dice que aunque tiene una jubilación y pensión que le permiten vivir, hoy marcha por “la gente que tiene que ir al supermercado y no puede comprar para comer: eso es lo que me duele”. La acompaña una amiga -misma cantidad de primaveras- que agrega: “Soy agnóstica, pero creo en nosotros. Ojalá esta humanidad mejore”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

A su alrededor hay un desfile incesante de columnas y más columnas que intentan sumarse a la marea de Avenida de Mayo. Hay tanta gente que no se avanza hacia el Congreso: lo que se convocó como una marcha se transforma entonces en una ocupación del espacio público, una inmensa ola que, gota a gota, ha inundado calles principales y laterales, avenidas y transversales, imponiendo con los pies otro protocolo: el del abrazo. Hay preocupación, hay reclamos, hay gritos, sí, pero sobre todo hay alegría por ese gigante “estamos”.

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

Sergio Maldonado, hermano de Santiago, lo nombra por su autora: “Estoy acá en primer lugar por el protocolo que quiere implementar Patricia Bullrich. Ella no fue elegida por el pueblo, entró por la ventana en un gobierno neoliberal que está haciendo estragos”. Un instante después la policía lo justifica: sin razón ni justificación -la calle está desbordada y en orden- irrumpe en malones, en una performance que incluye desfile de motos acelerando: un show para las cámaras que siguen a los uniformados. Le dirá entonces una integrante de la columna de la UOM (Unión Obrera Metalúrgica) al oficial a cargo: “Justo cuando va a hablar Moyano: mirá qué casualidad.” El escenario está a más de diez cuadras y nadie en la calle le presta atención a lo que allí se dice, pero lo que expresa la trabajadora es otra cosa: que los pies en el asfalto le alcanzan para leer la realidad y le sobran para la ironía: “Andá tomar la teta,  bebé”.

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo
Nati Cejas, de la mesa nacional de la UOM Foto Martina Perosa

Su predicción: “Esta es la primera de las grandes movilizaciones que va a haber. El cambio que necesitamos no es este, pero no supimos contarle a la gente qué era lo que nos convenía como trabajadores y como sociedad. Ahora dicen del feminismo que somos un estorbo, cuando en realidad somos las que movemos la economía, y muy especialmente en momentos de crisis. Por eso al resto de mis compañeras les digo: vengan, las esperamos en la calle”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

A su lado está  Natali Cejas –que llegó de Santa Fe y es parte del comité nacional del gremio–quien detalla: “Tenemos 250.000 afiliados, 16.000 son mujeres”. La primera fila de la columna está ocupada por ellas. Describe Natali: “Ya hay despidos, hay recesión, hay sectores en donde, por ejemplo, ya se está trabajando menos horas o se adelantaron vacaciones. Estamos acá como trabajadoras y como mujeres:  sabemos que cuando viene el recorte se empieza por nosotras, y sabemos que la lucha es en las calles. Hay que hacernos sentir, que sepan que no nos representan”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

Con ambo y delantal moviliza la Asamblea de Residentes de Ciudad de Buenos Aires. “Yo estoy en el Hospital Elizalde y ahora no hay medicación para les niñes –sí: dice “les niñes”– que se van de alta. A partir de ahí, imagine el resto”, dice Virginia, una de las médicas. Alerta, además, que como consecuencia del desfinanciamiento de la salud pública, “es muy probable que no se empiecen a abrir los cargos” y que por efecto de los discursos de odio presidenciales “esa violencia se expande: la gente llega al hospital muy rota, es muy difícil contener lo emocional si además recortan recursos”. ¿Qué hacer? “Hay que estar en la calle: Hay que apoyarnos como colectivo de trabajadores”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

Con delantal también está Claudia, 58 años, docente de Soldati. “El presidente Milei habla de achicar el Estado, pero el Estado somos también las docentes: yo doy un servicio que es la educación, el Estado me paga. Cuando él dijo que iba a achicar el Estado, me está achicando a mí, y a tus derechos”, sintetiza. Trabaja en un programa que recibe infancias y adolescentes, entre 9 y 14 años, que han dejado la escolaridad por diferentes motivos. Se supone que los grados pueden tener hasta 12 alumnos, pero en 2023 Claudia tuvo a su cargo 18. “Efecto pandemia”, arriesga. “Estamos rodeados por 10 barrios populares, la mayoría de los pibes están ahora cartoneando con sus padres”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

¿Cómo afecta la ley Ómnibus a la docencia? “Ya hay despidos. En la ciudad más rica del país se cuelgan de lo que dice el gobierno: que no hay plata. Empiezan a despedir a docentes contratados. Yo hace 15 años que trabajo en el grado de nivelación y todavía no soy titular: podría ser la próxima afectada”. En la escuela los pibes no solo estudian, también comen: Claudia advierte sobre los recortes a los comedores. “Nuestra escuela es de jornada simple, pero tiene comedor, y te repito: tenemos 10 barrios populares alrededor. Si recortan en comedores, nos recortan en la alimentación de los pibes. Sin la alimentación, no estudian. Si no tienen para comer, el sistema cognitivo no funciona”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo
Soledad Barruti Foto: Martina Perosa

La periodista y escritora Soledad Barruti lleva un cartel reclamando por los bosques, y otro por los glaciares. Puede sostener uno en cada mano, pero quisiera llevar muchos más: “Esto arrasa con todo, con derechos absolutamente necesarios y conquistados durante mucho tiempo. Nos quita de plano lo que nos queda de lugar vivo, de lugar de resistencia”. La imagen que ofrece es de tierra arrasada. “Este gobierno pretende entregar lo último y para entregarlo tiene que destrozar todos los derechos conquistados hasta ahora, tiene que pasarle una topadora a todas las luchas que hace tanto tiempo tantas personas venimos encarnando. Hay que poner un límite ya, porque si esto avanza, barre con todo”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo
La escritora Dolores Reyes Foto: Martina Perosa

Junto a Soledad está la escritora Dolores Reyes, quien llegó desde Pablo Podestá, donde también trabajaba como docente. Desde ahí, escribe: sus libros tienen al barrio y a sus jóvenes como protagonistas. “El proyecto deroga la Ley del Libro, que no le molesta absolutamente a nadie, entre muchas otras leyes: no va a quedar nada de Argentina. La industria del libro en nuestro país es muy particular: hay una ecosistema que está medianamente protegido por la Ley del Libro. Esto implica que hay un precio único y entonces, por ejemplo, los supermercados no pueden intervenir tirando el precio para abajo para fundir al resto de las librerías independientes. Si se toca la Ley del Libro este hermoso ecosistema no va a existir más. Y algo que me duele muchísimo en particular es que con esta devaluación y con el papel –que está dolarizado–, los precios de los libros ya se han vuelto absolutamente privativos: Cometierra pasó de 4.800 a 14.000 pesos. Es delirante”. 

Tus libros están muy atravesados por la realidad de los barrios. ¿Cómo se ve esta realidad desde allí? 

-Se empieza se empieza a ver un ataque infernal a las condiciones de vida de las clases populares. Los elementos de las canastas más básicas, en un mes se han duplicado o triplicado, y los ingresos claramente no. Entonces en los barrios, la gente está decidiendo qué come y qué deja de comer. Y ni hablar el tema de medicamentos: desregularon para que todo también se triplicara. Estoy viendo vecinos que salen de la farmacia o que están en la cola del supermercado y hablan de todo lo que no pueden comprar”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

El dirigente Eduardo Vasco Murúa, referente del sector de fábricas recuperadas, dice que en el sector “al igual que a todos los sectores, lo afecta el plan económico desatado”, pero en particular lo que se siente es la baja de la demanda y el aumento de los costos. Todavía, aclara, falta que lleguen los tarifazos. Otra alerta: “El salario de los trabajadores, que con la inflación no pudimos acompañar”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

¿Qué papel pueden jugar las fábricas recuperadas en este escenario? 

-Estamos preparados para jugar dos papeles: centralmente, estar acompañando a los trabajadores que sufran un cierre de fábrica, acompañarlos en su recuperación, ordenar las fábricas en unidad y con la organización que tenemos para que no se nos caigan. Y por otro lado, pelear con todas las fuerzas para que se vayan lo más pronto posible. Pero con la idea y la convicción de que no va alcanzar con que se vayan, sino que hay superar el fracaso anterior y la catástrofe actual, con una organización política de los trabajadores y trabajadoras y para el pueblo. No lo vamos a lograr mientras la representación que tenemos sea tan flaca. Todo el sector progresista parece que está esperando que el hambre y la sangre la ponga el pueblo y preparar la curita para después. Les decimos entonces que vamos a tener con ellos la misma actitud que tenemos con Milei y con el poder económico nacional: no hay tiempo para que vengan ellos nuevamente con curitas. Lo que queremos es un modelo que asegure el trabajo para todos. Y creemos que lo podemos hacer: lo único que falta es la organización política”. 

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

La calle le habló así hoy a la política. 

La hizo.

Lo que sigue es Historia y está aún por escribirse.

Mendoza contra el DNU

Mendoza, la provincia donde Milei sacó el mayor porcentaje de votos, también se movilizó masivamente contra el DNU. Para gambetear el protocolo, las citas se dieron en distintos puntos de la capital provincial. Uno de ellos, como es costumbre, arrancó en el Kilómetro 0: organizaciones sociales, asamblearias y políticas, organizaron un breve acto para luego marchar hacia la Legislatura, donde confluyeron con el resto de los grupos políticos y sindicales.

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

Lucas tiene 30 años y estaciona su bici en la esquina. Lleva calzas y una remera que dice: “Son 30 mil y uno es mi abuelo”. Forma parte de HIJOS Mendoza, y es trabajador de la secretaría de Cultura; dos frentes que, asume, están en tensión desde la asunción del nuevo gobierno. Parece observar las banderas del Polo Obrero, el PTS y otras de partidos de izquierda que intentan colmar la escena, y dice: “Yo creo que más que una manifestación política partidaria es momento de hablar a favor de la Argentina y del pueblo, del bienestar general. Lo de hoy nace de una convocatoria de CGT, pero esto lo excede; ya nos venimos movilizando aquí en Mendoza, organizando en asambleas”.

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

¿Qué te preocupa del DNU? 

-Todo. Me preocupa la liberación para que los extranjeros puedan comprar tierras, la reforma penal, la baja de imputabilidad, la liberación de precios. A todo el mundo le baja la calidad de vida. Y ahora lo último es la cantidad de gente que va a pagar impuesto a las ganancias, contradiciéndose con su propio discurso político. También me preocupa lo que es ambiental: no reconocer la crisis ambiental mundial es inhumano.

¿Por qué la misma Mendoza que salió a las calles por el agua, votó 4 años después masivamente a Milei?

 -Creo que el cansancio social fue por la falta de respuestas, eso hizo que la gente emitiera un voto castigo. El tema es que ese voto castigo nos castigó a todos: vemos las repercusiones ahora.

¿Conocés gente que votó a Milei? 

-Lamentablemente tengo familiares que lo han votado. Es una discusión constante: tenemos a mi abuelo desaparecido y tener que hablar del curro de los derechos humanos, de que no fueron 30 mil… es duro.

¿Lo siguen bancando? 

-No. Porque más allá del voto castigo mi familia tiene conciencia social, conciencia ambiental. Es un voto arrepentido.

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

La policía mantiene un carril libre mientras la gente continúa agrupándose en el otro y en la peatonal. El micrófono avisa que en unos minutos será el turno de distintos oradores de las organizaciones, y que luego comienza la marcha.

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo


Entre otra de las columnas que nutren al Kilómetro 0 está la cultural. Mariela es teatrera y lleva una nariz de payasa, pero habla en serio: “Ha habido toda una discusión de si nos sumábamos porque convoca la CGT, pero ante el panorama que estamos viviendo yo creo que podemos hacer un frente común porque los perjudicados somos las mayorías”.

¿Cómo se organizan desde la cultura?

 -En el ámbito cultural se ha armado una asamblea multisectorial mendocina hace casi un mes y ya ha activado dos movilizaciones. Es multisectorial porque hay banderas políticas de todos los colores y distintos sectores del arte: música, teatro, audiovisual, literatura, artesanos, etc.

Llevás un cartel que dice “Sin cultura no hay libertad”. ¿Por qué creés que el DNU se mete puntualmente con organismos culturales? 

-La cultura abre cabezas, te pone a pensar y a cuestionarte y a cuestionar lo que las autoridades y tus propios representantes definen. Entonces, es peligrosa la cultura, por eso nos quieren borrar, porque les molesta. La cultura nos da identidad, lo contrario a lo que ellos quieren imponernos: una cultura extranjera que no tiene nada que ver con nosotros. Lo nuestro, nuestra verdadera identidad, lo que somos, lo que queremos ser, eso plantea el arte. El arte no solamente sana y salva: abre cabezas, y eso es jodido.

Más atrás de las columnas partidarias están Nelly y Claudina, dos jóvenes jubiladas que llevan un cartel que dice: “Jubiladxs en lucha – No al DNU”. Son parte de un colectivo más grande que se reunió en otros puntos de la capital, para confluir en la Legislatura. Ellas eligieron el Kilómetro 0 porque “nos queda más cerquita, las piernas no nos dan ya para tanto”, bromean, aunque luego se las verá también frente al edificio que queda a más de diez cuadras de este lugar. Allí estarán descansando en un banco de plaza, fumando un cigarrillo como quien ha culminado su tarea: luchar.

Movilizaciones en todo el país contra la Ley ómnibus y el DNU: las fuerzas de abajo

Dicen: “Recién estábamos recordando : nosotras tenemos historias de lucha desde los 80. Siempre luchando por nuestros bienes comunes, nuestros derechos”. 

¿Qué recordaban? 

-Todos los momentos que hemos tenido que salir para luchar por nuestros derechos, incluso en la terrible dictadura. 

¿Esto les recuerda a aquello? 

“Es una dictadura neofascista” arriesga Nelly. Claudina agrega: “Pero peor, porque fue elegida por el pueblo”. Sigue Nelly: “A veces este punto de tensión es para ver si podemos reaccionar, sobre todo las generaciones nuevas. 

¿Salieron durante el gobierno anterior?

-Salimos con cada gobierno… con el anterior también: con todos….

¿Cómo ven esta marcha, en comparación con aquellas? 

-Es la más masiva a la que fuimos. Mirá que Mendoza es una provincia muy conservadora, eh, cuesta movilizar- dice Claudina. 

¿Qué les preocupa del DNU?

 -La situación de todo el país, estamos en un abismo, no solamente la movilidad jubilatoria: es la pérdida del poder adquisitivo, los bienes naturales- enumera Nelly.

¿Sus jubilaciones, les preocupan? 

-Lo que nos preocupa es el Fondo de Garantía y Sustentabilidad, que es dinero que nadie se animó a tocar hasta ahora. Macri lo intentó y no pudo. 

¿Podrán?

 -Esperemos que no salga la ley, pero hay tantos traidores…. 

Nelly confía en algo: que entre la movilización local y el apoyo internacional, los sectores llamados dialoguistas “entren en razón, o por lo menos, que tengan un poquito de miedo”.

Comienza el acto en el que distintos oradores de las organizaciones dirán unas palabras. Por ejemplo, Sergio Onofrio, de la Asamblea Popular por el Agua: “Nos necesitamos entre todos para poner un freno. En el 2019 lo logramos, algo que parecía imposible. Desde la asamblea hacemos hincapié en el ambiente porque es de todos. Y está en peligro”.

Onofrio culmina gritando «El agua de Mendoza, no se negocia” y la consigna se transforma en el grito que continuará sonando durante la marcha rumbo a la Legislatura.

La movilización comenzará pasadas las 13 y la policía la acompañará durante las diez cuadras. Un hombre al megáfono dice: “Este operativo es una ridiculez total, si ya saben cómo son las marchas de Mendoza. Es un circo para seguir las órdenes de Bullrich. Los mismos policías saben lo que cuesta que estén ellos acá”.

A dos cuadras de la Legislatura, las calles se angostan y las personas no alcanzan a amucharse en un solo carril. Se toma la decisión, entonces, de tomar toda la calle. La forma de romper el protocolo oficial es simple: las personas pasan por al lado de la policía, por el costado, por donde no llegan a cubrir. De repente, ya están del otro lado, y los efectivos no llegan a detener a cada manifestante.

Roto el protocolo, la marcha llega finalmente a la plaza frente a la Legislatura, donde se reúne con la columna de los sindicatos.

Allí, dos mujeres que se mantienen al margen de la movilización, charlan entre ellas. “¿Vos estás a favor o en contra?”, “¿De qué?”, “De esto” dice señalando a la marcha. “A favor” responde tímida la otra. “¡¡¡Yo también!!!” se entusiasma la entrevistadora.

Ambas superan los 60. Una lleva un carrito de compras: dice que le mintió a su hijo que iba al súper y vino acá, “para hacer bulto”. La otra, si bien parece vestida de gala, vino para manifestarse. Y revela: “Yo empecé siendo fanática de Milei”. Confiesa que lo seguía en las redes sociales cuando ella vivía en Nueva York. “Me gustaba por cómo hablaba, lo prepotente, el empuje”.

¿Cuándo cambió?

-Me dejó de gustar porque le vi la verdadera personalidad. No es un político, es un economista. Cuando se empezó a pelear con los chinos, dije no; como yo he vivido en el exterior, conozco a todas las razas, eso no se hace.

María Teresa Guni Cañas, integrante de la Asamblea Popular por el Agua protagonista de la gran movilización que hubo en esa provincia durante el gobierno de Alberto Fernández, asegura con experiencia que hoy hubo “muchísima gente en la calle en un clima de resistencia y de alegría”.

¿Qué significa?  

-Que hay que seguir estando en la calle a pesar de todas las traiciones. Es fuerte la cantidad de legisladores que han votado en las comisiones a favor del DNU, pero también hay mucha resistencia. Esperamos que no siga avanzando esta depredación, y que haya una percepción de que lo importante no era solo que perdiera el kirchnerismo.

¿Qué busca este gobierno? 

El gobierno de MIlei busca dejar en manos de las empresas nuestros bienes comunes, la cultura, la educación y que todo sea mercantilizable: a eso nos estamos oponiendo.

¿Cómo se explica que aquí haya tenido tanto apoyo? 

-Lamento que Mendoza haya sido de las más votantes de Milei. Pero también hay mucha resistencia, así que vamos a seguir apostando a sembrar conciencia y a seguir estando y defendiendo los valores de la comunidad. Al odio y a la destrucción se los enfrenta así: con comunidad.

Córdoba contra el DNU

Copleras, músicos, actrices, circenses, brigadistas forestales de las sierras, trabajadores del CONICET, estatales, docentes, ferroviarios, trabajadores de la economía popular, de la salud… mucha gente bajo el sol. Se escucha repetidas veces el comentario sobre la gran convocatoria, tal vez la mayor pos pandemia en la ciudad de Córdoba. El cálculo es entre 50 y 60 mil personas.

A Córdoba le pesa ser el distrito donde porcentualmente más votos obtuvo el presidente Javier Milei, más le pesa sobre todo a quienes hoy estaban en la calle: laburantes. A medida que avanzan los días entre los trabajadores se va silenciando el mandato “hay que esperar”, los dirigentes gremiales y de sindicatos que hoy hablaron sobre un escenario improvisado arriba de un camión frente a Patio Olmos ahora apelan a expresiones dignas de una letra de cuarteto “nos engañó feo” “Que venga a dar la cara después del verso de la casta”. Pero también hubo mensajes para el gobernador Llaryora, pero lo más contundente por parte del movimiento por el ambiente y el territorio que, por ejemplo, señala la reciente creación de la Agencia CórdobaAgro, un organismo que estará exento del control del Tribunal de Cuentas, y según asambleístas se trata “ de una privatización del campo y del monte,  fondos públicos provenientes de impuestos que estarán administrados por privados del agronegocio. Y serán quienes resuelvan sobre recursos comunes”. Con la nuestra.

Transferencia de recursos y riquezas.

Nota

Orgullo

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Texto de Claudia Acuña. Fotos de Juan Valeiro.

Es cortita y tiene el pelo petiso, al ras en la sien. La bandera se la anudó al cuello, le cubre la espalda y le sobra como para ir barriendo la vereda, salvo cuando el viento la agita. Se bajó del tren Sarmiento, ahí en Once. Viene desde Moreno, sola. Un hombre le grita algo y eso provoca que me ponga a caminar a su lado. Vamos juntas, le digo, pero se tiene que sacar los auriculares de las orejas para escucharme. Entiendo entonces que la cumbia fue lo que la protegió en todo el trayecto, que no fue fácil. Hace once años que trabaja en una fábrica de zapatillas. Este mes le suspendieron un día de producción, así que ahora es de lunes a jueves, de 6 de la mañana a cuatro de la tarde. Tiene suerte, dirá, de mantener ese empleo porque en su barrio todos cartonean y hasta la basura sufre la pobreza. Por suerte, también, juega al fútbol y eso le da la fuerza de encarar cada semana con torneos, encuentros y desafíos. Ella es buena jugando y buena organizando, así que se mantiene activa. La pelota la salvó de la tristeza, dirá, y con esa palabra define todo lo que la rodea en el cotidiano: chicos sin futuro, mujeres violentadas, persianas cerradas, madres agotadas, hombres quebrados. Ella, que se define lesbiana, tuvo un amor del cual abrazarse cuando comenzó a oscurecerse su barrio, pero la dejó hace apenas unas semanas. Tampoco ese trayecto fue fácil. Lloró mucho, dirá, porque los prejuicios lastiman y destrozan lazos. Hoy sus hermanas la animaron a que venga al centro, a alegrarse. Se calzó la bandera, la del arco iris, y con esa armadura más la cumbia, se atrevió a buscar lo difícil: la sonrisa.

Eso es Orgullo.

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org

Al llegar al Congreso se pierde entre una multitud que vende bebidas, banderas, tangas, choripán, fernet, imanes, aros, lo que sea. Entre los puestos y las lonas que cubren el asfalto en tres filas por toda Avenida de Mayo hasta la Plaza, pasea otra multitud, mucho más escasa que la de otros años, pero igualmente colorida, montada y maquillada. El gobierno de las selfies domina la fiesta mientras del escenario se anuncian los hashtag de la jornada. Hay micros convertidos en carrozas a fuerza de globos y música estridente. Y hay jóvenes muy jóvenes que, como la chica de Moreno, buscan sonreír sin miedo.

Eso es Orgullo.

Orgullo

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org

Sobre diagonal norte, casi rozando la esquina de Florida, desde el camión se agita un pañuelazo blanco, en honor a las Madres, con Taty Almeyda como abanderada. Frente a la embajada de Israel un grupo agita banderas palestinas mientras en las remeras negras proclaman “Nuestro orgullo no banca genocidios”. Son quizá las únicas manifestaciones políticas explícitas, a excepción de la foto de Cristina que decora banderas que se ofrecen por mil pesos y tampoco se compran, como todo lo mucho que se ofrece: se ve que no hay un mango, dirá la vendedora, resignada. Lo escaso, entonces, es lo que sobra porque falta.

Y no es Orgullo.

Orgullo

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org

Orgullo

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org

Seguir leyendo

Nota

Cómo como 2: Cuando las marcas nos compran a nosotros

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

(Escuchá el podcast completo: 7 minutos) Coca Cola, Nestlé, Danone & afines nos hacen confiar en ellas como confiaríamos en nuestra abuela, nos cuenta Soledad Barruti. autora de los  libros Malcomidos y Mala leche. En esta edición del podcast de lavaca, Soledad nos lleva a un paseíto por el infierno de cómo se produce, la cuestión de la comida de verdad, y la gran pregunta: ¿quiénes son los que realmente nos alimentan?

El podcast completo:

Cómo como 2: Cuando las marcas nos compran a nosotros

Con Sergio Ciancaglini y la edición de Mariano Randazzo.

Seguir leyendo

Nota

Elecciones: lo que ven y sienten los jubilados para el domingo y después

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Otro miércoles de marcha al Congreso, y una encuesta: ¿cuál es el pronóstico para el domingo? Una pregunta que no solo apunta a lo electoral, sino a todo lo que rodea la política hoy, en medio de una economía que ahoga: la que come en el merendero; el que no puede comprar medicamentos; el que señala a Trump como responsable; la que lo lee en clave histórica; y los que aseguran que morirán luchando, aunque sean 4 gatos locos. Crónica y fotos al ritmo del marchódromo.

Francisco Pandolfi y Lucas Pedulla

Fotos Juan Valeiro

El domingo son las elecciones legislativas nacionales pero también es fin de mes, y Sara marchó con un cartel que no necesitaba preguntas ni explicación: “Soy jubilada y como en un merendero”.

Tiene 63 años, es del barrio Esperanza –Merlo, oeste bonaerense–, y para changuear algo más junta botellas y cartón, porque algunos meses no le alcanza para medicamentos: “El domingo espero que el país mejore, porque todos estamos iguales: que la cosa cambie”.

Elecciones: lo que ven y sienten los jubilados para el domingo y después
Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

El miércoles de jubilados y jubiladas previo a las elecciones nacionales de medio término –se renuevan 127 diputados y 24 senadores– tuvo, al menos, tres rondas distintas, en una Plaza de los Dos Congresos cerrada exclusivamente para manifestantes. Nuevamente el vallado cruzó de punta a punta la plazoleta, y los alrededores estuvieron custodiados por policías de la Ciudad para que la movilización no se desparramara ni tampoco avanzara por Avenida de Mayo, sino que se quedara en el perímetro denominado “marchódromo”. Un grupo encaró, de todas formas, por Solís, sobrepasó un cordón policial y dobló por Alsina, y se metió de nuevo a la plaza por Virrey Cevallos, como una forma de mostrar rebeldía.

Unos minutos antes, un jubilado resultaba herido. Se trata de Ramón Contreras, uno de los rostros icónicos de los miércoles que llegó al Congreso cuando aún no estaba vallado después de la marcha por el recorte en discapacidad, y mientras estaba dando la ronda alrededor del Palacio un oficial lo empujó con tanta fuerza que cayó al suelo. “Me tiraron como un misil –contó a los medios–. Me tienen que operar. Tengo una fractura. Me duele mucho”. La Comisión Provincial por la Memoria (CPM) presentó una denuncia penal por la agresión: “Contreras fue atacado sin razón y de manera imprevista”.

Elecciones: lo que ven y sienten los jubilados para el domingo y después
Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

La violencia desmedida, otra vez, sobre los cuerpos más débiles y más ajustados por un Gobierno que medirá esa política nuevamente en las urnas. Jorge, de 69 años, dice que llega con la “billetera muerta”. Y Julio, a su lado, resume: “Necesito tener dos trabajos”.

Juan Manuel es uno de esos jubilados con presencia perfecta cada miércoles. Una presencia que ninguna semana pasa desapercibida. Por su humor y su creatividad. Tiene 61 años y cada movilización trae mínimo un cartel original, de esos que hacen reír para no llorar. Esta vez no sólo trae un cartel con una inscripción; viene acompañado de unas fotocopias donde se leen una debajo de la otra las 114 frases que creó como contraofensiva a la gestión oficialista.

La frase 115 es la de hoy: “Milei es el orificio por el que nos defeca Trump”. 

Elecciones: lo que ven y sienten los jubilados para el domingo y después
Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

Muestra la lista que arrancó previo a las elecciones de octubre de 2023. Sus primeras dos creaciones:

  1. “Que no te vendan gato por león”.
  2. “¿Salir de la grieta para tirarse al abismo?”. 

Y elige sus dos favoritas de una nómina que seguirá creciendo:

Sobre el veto al aumento de las jubilaciones: “Milei, paparulo, metete el veto en el culo”.

Sobre el desfinanciamiento de las universidades: “Milei: la UBA también tiene las facultades alteradas”.  

Juan Manuel le cuenta a lavaca lo que presagia para él después de las elecciones: “Se profundizará el desastre, sea porque pierda el gobierno o porque gane, de cualquier forma tienen la orden de hacer todo tipo de reformas. Como respuesta en la calle estamos siendo 4 gatos locos, algo que no me entra en la cabeza porque este es el peor gobierno de la historia”.

Elecciones: lo que ven y sienten los jubilados para el domingo y después

Sobre el cierre de la marcha, en uno de los varios actos que se armaron en esta plaza, Virginia, de Jubilados Insurgentes y megáfono en mano, describió que la crisis que el país está atravesando no es nueva: “Estuvo Krieger Vassena con Onganía, Martínez de Hoz con la última dictadura, Cavallo con Menem, Macri con Caputo y Sturzenegger, que son los mismos que ahora están con este energúmeno”. La línea de tiempo que hiló Virginia ubica ministros de economía con dictaduras y gobiernos constitucionales en épocas distintas, con un detalle que a su criterio sigue permaneciendo impune: “La economía neoliberal”.

Allí radica la lucha de estos miércoles, dice. Su sostenibilidad. Porque el miércoles que viene, pase lo que pase, seguirán viniendo a la plaza para continuar marchando. “Estar presente es estar activo, lo que significa estar lúcido”, define.

Elecciones: lo que ven y sienten los jubilados para el domingo y después
Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

Carlos Dawlowfki tiene 75 años y se convirtió en un emblema de esa lucidez luego de ser reprimido por la Policía a principio de marzo. Llevaba una camiseta del club Chacarita y en solidaridad con él, una semana después la mayoría de las hinchadas del fútbol argentino organizaron un masivo acompañamiento. Ese 12 de marzo fue, justamente, la tarde en que el gendarme Héctor Guerrero hirió con una granada de gas lacrimógeno lanzada con total ilegalidad al fotógrafo Pablo Grillo (todavía en rehabilitación) y el prefecto Sebastián Martínez le disparó y le sacó un ojo a Jonathan Navarro, quien al igual que Carlos también llevaba la remera de Chaca.

Carlos es parte de la organización de jubilados autoconvocados “Los 12 Apóstoles” y habla con lavaca: “Hoy fui a acompañar a las personas con discapacidad y me di cuenta el dolor que hay internamente. Una tristeza total. Y entendí por qué estamos acá, cada miércoles. Y sentí un orgullo grande por la constancia que llevamos”.

La gente lo reconoce y le pide sacarse fotos con él. “Estás muy solicitado hoy”, lo jode un amigo. Carlos se ríe, antes de ponerse serio: “Hay que aceptarlo, hoy somos una colonia. Pasé el 76 y el 2001, y nunca vi una cosa igual en cuanto a pérdida de soberanía”. De repente, le brota la esperanza: “Pero después del 26, volveremos a ser patria. Esperemos que el pueblo argentino tenga un poquito de memoria y recapacite. Lo único que pido es el bienestar para los pibes del Garrahan y con discapacidad. A mí me quedarán 3, 4, 5 años; tengo un infarto, un stent, así que lucho por mis nietos, por mis hijos, por ustedes”.

Elecciones: lo que ven y sienten los jubilados para el domingo y después
Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

Carlos hace crítica y también autocrítica. “Nosotros tenemos un país espectacular, pero nos equivocamos. Los mayores tenemos un poco de culpa sobre lo que ocurrió en las últimas elecciones: no asesoramos a nuestros nietos e hijos sobre lo que podía venir y finalmente llegó. Y en eso también tiene que ver la realidad económica. Antes nos juntábamos para comer los domingos, ahora ya no se puede. No le llegamos a la juventud, que votó a la derecha, a una persona que no está en sus cabales”.

Remata Carlos, antes de que le pidan una selfie: “Nosotros ya estamos jugados pero no rendidos. Estos viejos meados -como nos dicen- vamos a luchar hasta nuestra última gota. Y cuando pasen las elecciones, acá seguiremos estando: soñando lo mejor para nuestro país”.

Elecciones: lo que ven y sienten los jubilados para el domingo y después
Foto: Juan Valeiro para lavaca.org
Seguir leyendo

Lo más leido

Anticopyright lavaca. Todas nuestras notas pueden ser reproducidas libremente. Agradecemos la mención de la fuente. ©2025 Agencia lavaca.org. Riobamba 143, Ciudad Autónoma de Buenos Aires - Argentina - Editor responsable: Cooperativa de Trabajo Lavaca ltda. Número de propiedad intelectual: 50682265 - [email protected] | Tel.: +54 9 11 2632-0383

Vistas el día de hoy: 37.050