Sigamos en contacto

Actualidad

Foro de Madrid: las batallas de los malos y los buenos

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Buenos Aires fue sede del Foro Madrid, que reúne a las derechas y ultraderechas de distintos países. Inauguró Javier Milei. Ocurrió el jueves 5 y viernes 6. Pantallazos y miradas sobre la izquierda, el aborto, el liderazgo, el ajuste, la no izquierda, lo woke, el neocomunismo, las guerras, las batallas culturales y otros enigmas.

Por Sergio Ciancaglini Fotos: Juan Valeiro

El mail para poder ingresar al III Encuentro Regional de Foro de Madrid-Rio de la Plata 2024, planteaba tres advertencias.  

“No se permitirá el ingreso de:

  • Bebidas, alimentos o sustancias ilegales.
  • Armas de ningún tipo (armas de fuego, munición, cuchillos de cualquier tamaño, tasers, spray de pimienta, etc.).
  • Artículos que puedan ser considerados un peligro para la seguridad o una molestia para los participantes o los invitados”.

Confirmada la ausencia de esos accesorios policiales, se podía partir hacia la sede del evento: el “Palacio Libertad”, en referencia al CCK y ex edificio del Correo, que en su frontispicio sigue teniendo tallado en piedra “Centro Cultural Kirchner”.

En la explanada de entrada se ven tres obras. La estatua El Cartero, que certifica que existió una época epistolar en el mundo. Otra dedicada a Samuel Morse, el inventor del telégrafo y del código para utilizarlo que incluye el cada vez más necesario S.O.S. Y el monumento donado por el Estado Plurinacional de Bolivia en homenaje a una mujer, Juana Azurduy, heroína de la independencia frente a España, todo lo cual podría ser considerado una molestia para los participantes o los invitados.

Se  armó una prolija hilera para entrar desde las 7.30 de la mañana, 6º centígrados. Había un joven con el logo de su campera curiosamente impreso no en el frontispicio sino en la espalda, con una marca a tono: The North Face.

Foro de Madrid: las batallas de los malos y los buenos

Javier Milei en el escenario. Foto: Juan Valeiro para lavaca

La serpiente vs. la no-izquierda

Una vez dentro del CCK la larga cola se hizo sinuosa para que la gente pudiese entrar, cual la serpiente de cascabel que ilustra la bandera de Gadsden, símbolo de la derecha internacional. La comparación no es abusiva ya que el Foro Madrid que organizó este encuentro es justamente un intento de reunir a la derecha de distintos países. Sin embargo hay derechistas que consideran que el Foro y su inspirador –el partido Vox español a través de la Fundación Disenso, todo inspirado por Santiago Abascal– son la ultra-derecha. Es una diversificación de los matices que pululan desde el centro derecha hasta el neofascismo que se percibe en cantidad de lugares.

El Foro Madrid se plantea como objetivo: “Generar conciencia a nivel internacional sobre las consecuencias del avance de la extrema izquierda, su agenda ideológica y su fracasado sistema de gobierno”.

Otro: “Contrarrestar las estrategias de influencia geopolítica del Foro de Sao Paulo y el Grupo de Puebla, construyendo una red de aliados a favor de la libertad en todos los países de la Iberosfera”.

En la convocatoria se asegura que “en Argentina se libra una batalla por la libertad que va a definir el futuro de las naciones de Iberoamérica” y se propone “recuperar los espacios de libertad arrebatados por la izquierda criminal y la no-izquierda en el mundo occidental”. No hubo definiciones sobre qué es la no-izquierda.

Foro de Madrid: las batallas de los malos y los buenos

Santiago Abascal, de Vox. Foto: Juan Valeiro para lavaca

El conquistador y el capitán

Se abrió la entrada a la sala. Al finalizar la hilera serpenteante, la mayoría del público se dirigió a la derecha, pese a que entrando por izquierda era mucho más sencillo conseguir mejores ubicaciones. Tal vez no haya sido ideológico, sino masificación, imitación (o, peor aún, colectivismo).

La plataforma Evenbrite, con la que se accedía a un lugar gratuito, anunció bastante antes que las entradas estaban agotadas. Sin embargo, de las poco más de 550 butacas habilitadas se ocuparon apenas las dos terceras partes: no más de 400 personas durante el discurso del presidente Javier Milei, aunque algunos medios hablaron de 900 en un posible error de tipeo o exceso inflacionario. (Pronto se vería que, tras el discurso de Milei, el Foro se reducía a unas 150-200 personas).

Milei llegó al salón acompañado por Santiago Abascal, quien en 2019 se hizo fotografiar con un casco de conquistador español, tipo Hernán Cortés. El español quedó reducido a la nada frente al argentino que se disfrazaba de capitán Ancap (a-narco capitalista) o imitaba cantantes del siglo pasado. Milei lo acompañó este año a otro encuentro de la ultraderecha española como apoyo a las elecciones al Parlamento Europeo, en las que Vox fue prolijamente derrotado consiguiendo menos de la mitad de los votos que anunciaban las encuestas.

Por la Fundación Disenso, el español Jorge Frías elogió a Milei como “un faro de libertad” y presentó a Abascal como líder mundial del movimiento conservador y patriótico”. 

Abascal pasó al escenario para abrir el evento con Milei aplaudiéndolo en primera fila: “El Foro de Madrid significa que los buenos estamos organizados y unidos” dijo en una oración con extraños ecos argentinos. “Somos los que defendemos todos los órdenes de la libertad, el derecho a la vida desde el vientre materno, la democracia de verdad. Estamos contra el neocomunismo, el kirchnerismo, el sanchismo, el crimen organizado que representa el socialismo en el mundo”. Agregó al narcotráfico, los que suben impuestos, los que prohíben la libertad de educación, de las empresas, la agenda globalista “woke” (progresista), la Agenda 2030, la dictadura climática. Elogió a Milei por su “victoria apabullante”, como un líder global, y el único del grupo de organizados y unidos que llegó a la presidencia.

Foro de Madrid: las batallas de los malos y los buenos

Bolsonaristas reclamando por los golpistas presos. Foto: Juan Valeiro para lavaca

Ratas inmundas

Cuando le tocó hablar, en referencia a lo dicho por Abascal y para aliviar sus habituales arengas sobre ficción económica, leyó Milei: “Es interesante porque Santiago,  con  mucha generosidad,  describía el impacto internacional, que se está generando, a partir de lo que hacemos en Argentina. Obviamente  como líder de este movimiento,  me toca estar en la primera fila y tener un nivel importante de exposición y, obviamente, que a las ratas inmundas, fracasadas y liliputienses domésticas les molesta profundamente”. Esas palabras enfáticas encendieron al auditorio iluminado de azul.

Otro párrafo: «No solo estoy poniendo a la Argentina al tope mundial, siendo uno de los dos políticos más conocidos del mundo junto a Donald Trump, sino que además estoy haciendo el mejor gobierno de la historia Argentina». Planteó algo de lo que le llega de la orilla contraria: «Días atrás quien fuera el ministro de Economía del autócrata golpeador, Alberto Fernández, confesó que como la pandemia les levantaba la imagen, la usaron y nos encerraron por rédito político».

Salió Milei de la sala y llegaba el turno de su vocero Manuel Adorni a quien se presentó como autor de una “ponencia magistral”. Más de la mitad de la sala prefirió la libertad de no padecerlo, y concretó velozmente lo que podría considerarse un clásico mutis por el Foro.

Foro de Madrid: las batallas de los malos y los buenos

Mientras hablaba Adorni, selfies de jóvenes libertarios con la señora Lemoine. Foto: Juan Valeiro para lavaca

Narrativa delirante

En el hall de entrada pululaba alguna gente categoría senior aunque varios se quedaron estoicamente a seguir escuchando. Gente adusta, muy en modo-Foro. Y además una mayoría de sub-30 que no suelen trajinar estos eventos. Una juventud excitada, sonriente, dividida en grupos que llegaron juntos a ver a Milei, con trajes de ocasión y mochila, cabelleras revueltas o jopos rígidos según el caso: la nueva camada de funcionarios, asesores & afines que aspira a integrar los futuros cenáculos y/o farándulas del poder y sabían que ya no tenían mucho que hacer allí. Uno de los jóvenes se fugaba con un abrigo negro seguido por cuatro personas, clonando el estilo del asesor Santiago Caputo quien a su vez lo clonó de Cillian Murphy y la serie Peaky Blinders.

Un grupo de brasileñas y brasileños bolsonaristas estaba con banderas reclamando la libertad de los supuestos presos políticos que tomaron la sede del gobierno, del parlamento y del Tribunal Supremo en Brasilia (2023) contra el triunfo de Lula. “Tenemos 2.000 presos políticos en Brasil y 400 en Argentina” decía una señora junto a Fernando Cerimedo, director de La Derecha Diario y dueño de varias redes y plataformas que trabajaron también para Bolsonaro e incitaron con fakes aquel levantamiento. En 2023 Bolsonaro fue inhabilitado por el Tribunal Supremo Electoral de Brasil para ejercer cargos públicos hasta el año 2030, por alentar una “narrativa delirante con efectos nefastos para la democracia”.

Foro de Madrid: las batallas de los malos y los buenos

Foto: Juan Valeiro para lavaca

Pandemia, verticalismo y patria

Por el hall del CCK se movía otra señora, de apellido Lemoine, también adusta y atenta siempre a los micrófonos. Entre los jóvenes, en cambio, Leonardo Repetto lucía descontracturado: “Soy presidente de la juventud de La Libertad Avanza en Ituzaingó” se presentó ante la consulta. “Tengo 20 años, y estoy contento de que se arme algo a nivel internacional, con Europa, Norteamérica, Sudamérica, porque ellos están todos juntos, el bloque colectivista que va contra la libertad y con un Estado omnipresente, autoritario, casi paternal”.

Sobre el Estado: “Al principio se decía voy a destruir al Estado’, pero no. Cómo te diría, es una metáfora. No va a destruir al Estado. Eso del topo. En realidad lo que va a hacer es achicarlo para reducir el déficit fiscal. O sea: no se puede destruir al Estado siendo presidente, claramente. Es un oxímoron, si se le puede decir”.

Define a LLA como un grupo verticalista, y cree que la pandemia fue el quiebre que lo llevó al poder: “Muchos jóvenes estaban con el kirchnerismo pero se hartaron por la pandemia. Ese fue el punto de inflexión cultural que hizo que muchos jóvenes miraran hacia otro lado, y aparecieron las ideas de la libertad, Milei, y todo lo demás». Otra percepción: “Para los jóvenes te reconozco que está muy difícil, no hay trabajo, no se llega a fin de mes, los alquileres, pero viene desde hace rato esto. Te diría que 10 o 20 años. ¿Y sabés cuál es el problema? El déficit fiscal. Entonces financiás el gasto, y tenés inflación, pérdida del poder adquisitivo y todos los problemas que tenemos”.

Sin embargo ahora el gobierno dice que no hay déficit pero crece la pobreza, el desempleo, y el ajuste no lo paga la casta sino los jubilados. “Pero fíjate que hasta Cristina vetó el 82% móvil para los jubilados porque le rompía el equilibrio fiscal. Así que eso es algo que hay que hacer” replica impermeable.   

Le planteo las referencias a lo patriótico en el Foro, en tiempos de globalización gobernada por las multinacionales. ¿Cómo ensamblan esas dos cosas? “Eso de la patria es un tema que bueno, tiene connotaciones con el peronismo. ¿Qué es la patria? Es una terminología. Nuestro trabajo es cuidar la cultura, seguir comiéndonos el asado los domingos, cantar el Himno, no solo la marcha peronista. Hay muchos nacionalistas que no son liberales, pero tampoco son peronistas. Se confunde mucho. Lo que hay que ver es cómo puede avanzar el Estado con un rol no interventor y que cuide la propiedad privada y la vida”.

Responde que está a favor del aborto. “Pero que se pague. La clase media y la clase alta lo pueden pagar”. También está en favor de la legalización de las drogas: “Claro, que puedan venir empresas como la de Mike Tyson a producir cannabis. Esas cosas recuperan la economía. Con la cocaína es más complicado, pero hay que despenalizar el consumo personal. Además, la marihuana no mata a nadie, el alcohol y el cigarrillo sí, y son re legales. El asunto es que nadie va contra el narco” dice, y se va con el grupo trajeado de posadolescentes que lo acompaña.

Foro de Madrid: las batallas de los malos y los buenos

Vocero Manuel Adorni durante su ponencia magistral. Foto: Juan Valeiro para lavaca

Alquileres y trolls

Mariano Pérez, 23 años, quería ser periodista deportivo, estudió para eso en River, es youtuber y tiene el canal BreakPoint. “Ahí tengo un millón y pico de suscriptores, en Twitter 90.000. Con Milei se dieron todas las cosas juntas, ese carisma, las ideas correctas, todo fue una ecuación que se expresa mucho en redes sociales. Al periodismo tradicional eso le molesta mucho pero todo lo que se generó con las redes es impresionante”. La gente pasa, lo saluda: “Es muy loco todo, el cariño, ser conocido”.

Se plantea que todos estos ex influencers están ahora trabajando para el gobierno, por sumas bastante mayores que las de la inmovilidad jubilatoria. “No, para nada. Yo no. Me está yendo muy bien de antes, cuando empecé a hacer dos o tres programas diarios por youtube”.

Dice que está contra el aborto, de la legalización de las drogas, y elabora un discurso clásico de combate contra el flagelo del narcotráfico. Sobre la crisis económica actual: “Los precios están bajando, y venimos de una crisis absoluta. Yo creo que hay esperanza. Yo pude alquilar”. Le recuerdo que puede hacerlo por estar en una situación privilegiada: “Pero antes no había departamentos. Ahora aparecieron”. Nuevamente lo impermeable.

¿Y los ataques sistemáticos de trolls contra quienes cuestionan cualquier cosa del gobierno? “Para mí buscan conspiraciones”. Los ataques son sistemáticos y elaborados. “Bueno, a mí me putean miles de veces en las redes, y entiendo que es gente enojada, no digo que sea un ejército de trolls. Eso era en la época de Macri y Marcos Peña. Ahora es gente que yo conozco y que opina lo que quiere. No hay que buscar fantasmas. Gracias”.

Buscando la salida

Lucía Montenegro acepta hablar. “¿Pero dónde está la salida?” me pregunta mirando desconcertada los enormes espacios vacíos del CCK. Se detiene para responder: “Soy legisladora porteña. Es cierto que este es un espacio donde hay un solo líder. Un líder mundial. Lo acompaño desde el minuto uno y ahora estamos con el armado nacional así que haciendo muchas cosas”. Sobre las internas: “Acá no estamos fragmentados. Es muy fácil porque hay que hacer solo lo que él dice. Todavía pasó poco tiempo para armar y conocernos, pero es algo normal. El tiempo acomoda las cosas, pero va a seguir todo adelante”.

Cree que lo crucial para haber llegado hasta aquí es lo siguiente: “La elocuencia. Cien por cien la elocuencia. Pero además de todo Javier es fuego, es incendio, es emoción, es amor, es pasión. Y es fundamentalmente inteligente. Además es sincero, honesto, convencido. Me tengo que ir. ¿Será por allá? ¿Quién sabe por dónde es la salida?”

Érica es otra veinteañera que llegó con un grupo aunque dice que no trabaja para el Estado. Está en favor del aborto libre seguro y gratuito. “Es que eso es personal. Macri estaba por las dos vidas, y bueno. Cada uno piensa lo suyo. Soy cajera. Trabajo en el sector privado. Vine con un grupo de chicos de LLA. Antes era del PRO, estaba con Bullrich fiscalizando incluso, pasó todo lo que pasó, y ella ahora está en el gobierno, y yo empecé a entender que este era un camino. La libertad, las ideas, no es que comparta la totalidad, pero Juntos por el Cambio no existe más. Hubo quiebres, internas que se ventilaban, de todo. Entonces nos seguíamos hundiendo, o veíamos este camino”. Sobre la crisis, que no paga la casta sino la sociedad: “Yo entiendo. Es como tantas cosas que están mal, senadores que tienen asesores, los jubilados siempre salen perdiendo, y quiero pensar que en algún momento lo van a arreglar”.

Foro de Madrid: las batallas de los malos y los buenos

Selfies de jóvenes libertarios . Foto: Juan Valeiro para lavaca

Armas para los recursos naturales

En el salón en penumbras seguían las ponencias del Foro, no demasiado magistrales. Como tantos otros foros (de izquierda e incluso de no-izquierda) el detalle es que todos los expositores muchas veces parecen decir lo mismo. El número de asistentes seguía evaporándose. Uno de los puntos del documento final planteó: Reafirmamos la voluntad de seguir dando la batalla cultural sin cuartel por la defensa de Occidente frente al marxismo cultural destructivo y la ingeniería social totalitaria en todas sus manifestaciones, llámese wokismo, progresismo o socialismo de cualquier tipo”.

Hubo intervenciones de Andy Olivastro, de la Fundación Heritage: “Saben que la izquierda es un veneno. Estamos aquí para aplastar a la izquierda, para sofocar al Estado y para restaurar el autogobierno”.

«La izquierda está divorciada de la realidad; y debemos romper el control que tienen sobre la gente. Su visión del mundo es la antítesis de la buena vida y socava los principios de libertad y prosperidad que valoramos». Hernán Cadavid: “Lo único que ha hecho la izquierda es demeritar la justicia, derrotarla, y haberla sometido. No podemos perder la batalla de la opinión pública, como instrumento de guerra política”.

Hubo intervenciones contra Venezuela, Cuba y Nicaragua.

El ministro de Defensa Luis Petri dijo: «Comprar un sistema de armas, es comprar paz. Es tener el poder disuasivo para evitar que te agredan y eventualmente evitar que se apropien de nuestros recursos naturales», como si la apropiación de tales recursos fuese un problema militar, y no lo que está facilitando el RIGI lanzado por el gobierno y votado en el Congreso. Nahuel Sotelo: Le vamos a dar batalla al globalismo, a la Agenda 2030 y nos vamos a parar contra los organismos internacionales para defender la soberanía argentina”.

Saliendo de la sala de luz azulada podían contarse al menos a tres asistentes que se habían rendido. Descansaban plácida y profundamente en sus butacas, bocas levemente abiertas, ajenos a tantos alborotos y palabras sinuosas. Un posible signo de sabiduría: ante ciertos sueños, algunas personas pueden considerar que lo que más les conviene hacer es quedarse irremediablemente dormidas.

Foro de Madrid: las batallas de los malos y los buenos

Foto: Juan Valeiro para lavaca

Actualidad

Represión y reacción

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

(Por Claudia Acuña)

Con las cámaras en alto y sentados en el asfalto (imagen de portada), más de cuarenta reporteros y reporteras gráficas lograron que liberen al fotógrafo Tomás Cuesta y se desestimen varios de los cargos que querían atribuirle a Javier Iglesias, otro de los fotógrafos arbitrariamente detenido al finalizar la ronda de los miércoles de las y los jubilados en el Congreso. También fueron apresados Pablo Luna, jubilado ex trabajador de YPF y Leandro Cruzado, integrante del Club Antifascista, quienes según la fiscalía Este –a cargo de iniciar la causa judicial– podrían recuperar la libertad mañana al mediodía.

Como todos los miércoles la prensa fue blanco de gases y palos por parte de las fuerzas de seguridad, que en esta oportunidad intentaron dar un paso más: el video que muestra la detención de Tomás Cuesta (al final de este artículo) es la evidencia de la brutalidad de su accionar. Cuesta, quien habitualmente trabaja para medios internacionales, estaba cubriendo la ronda para la organización Amnistía Internacional, que en estos días está elaborando un informe sobre  la represión estatal a la protesta de jubilados enviando a Buenos Aires a una especialista de la oficina central de esa oenegé, desde Inglaterra.

Represión y reacción

Uno de los detenidos del miércoles: jubilados y la prensa en la mira.

Javier Iglesias es un fotógrafo independiente que cubría la protesta para medios especializados en temas de represión estatal. Ambos fueron derribados al piso, ambos soportaron la rodilla de un gendarme en la mejilla para aplastarles así la cabeza contra las baldosas, ambos fueron esposados y trasladados al estacionamiento situado exactamente enfrente del ingreso al Senado de la Nación. El contraste se hizo aún más evidente cuando los dos fotógrafos fueron obligados a pararse en el paredón de la playa de estacionamiento mirando hacia el frente: lo que veían desde esa posición era el Palacio, símbolo de la representación democrática. Quizá porque el oficio es exactamente ese –saber mirar– los y las fotógrafas que llegaron hasta allí para conocer la situación de sus colegas decidieron hacer entonces un camarazo con sentada: no iban a naturalizar  otro miércoles de impunidad. El momento, además, era muy sensible: acababan de llegar las noticias del resultado de la nueva operación al reportero Pablo Grillo, a quien una descarga de Gendarmería lo hiriera de gravedad y le dejara como secuela una hidrocefalia que hoy obligó a colocarle una válvula para drenar el líquido del cerebro al abdomen.  

Represión y reacción

Otro de los detenidos. Foto publicada en Tiempo Argentino.

El primero en sumarse a la plantada fue el secretario general de Sipreba, Agustín Lecchi. “Todos los miércoles jubilados y periodistas somos el blanco de la represión. No nos vamos a mover de acá hasta que tengamos una respuesta”. También personal de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad se presentó tanto en el estacionamiento como en la fiscalía para conocer la situación y los argumentos que, supuestamente, justificaban las detenciones. Finalmente llegaron los representantes políticos: el diputado Germán Martínez –presidente del bloque de diputados de Unión por la Patria- la senadora Silvina García Larraburu y el senador Mariano Recalde: en ese orden. En tanto, la fiscalía aceptó revisar “pruebas”: comprobó así que no había ningún video ni declaración policial que justificaran la detención de Tomás Cuesta y ordenó su liberación. Los tres restantes debían esperar la decisión del juzgado, por que la fiscalía ya había validado las detenciones en un trámite más rápido que el pedido de explicaciones.

Represión y reacción

“La clave fue la reacción”, sintetiza uno de los colegas de Tomás, que comunicó inmediatamente la noticia a su mamá que en estos días está trabajando en el Festival de Cannes: es la jefa regional de la agencia internacional de noticias Associated Press.

Represión y reacción

Un signo de los tiempos: Detenidos sin explicación, contra la pared, en un estacionamiento usado por la policía ubicado exactamente frente al así llamado Honorable Senado de la Nación Argentina.

Seguir leyendo

Actualidad

Marcha de jubilados: el día de “la coreo”

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Las jubiladas y jubilados hicieron este miércoles algo tan interesante como disruptivo: moverse. Fueron eludiendo a las fuerzas federales buscando otros lugares donde hacer sus semaforazos. De pronto gendarmes y policías se quedaban en posición de combate contra la nada, porque la movilización se había movido a otro lado. Eso no logró evitar escenas absurdas de represión y gases de esos grupos antimotines pertrechados (los cascarudos, les dicen por su aspecto desde el estreno de El Eternauta). Grupos que cumplen un rol cada vez más vergonzoso y patético. Hubo además tres detenidos, y la sesión que en Diputados debía tratar un aumento para las jubilaciones no pudo hacerse por falta de quórum de la casta oficialista de LLA sumada al PRO y la UCR. Tampoco hubo entonces declaración de emergencia para los municipios afectados por las inundaciones ni para definir la investigación del caso de corrupción a través de la criptomoneda Libra. La otra noticia: Pablo Grillo, el fotógrafo herido el 12 de marzo por Gendarmería, fue intervenido quirúrgicamente este miércoles por sexta vez, con un resultado esperanzador, mientras la calle presentaba la nueva coreografía antirrepresiva.

Por Francisco Pandolfi y Lucas Pedulla

La Coreografía es el arte de organizar y estructurar movimientos corporales sucesivos, formando una secuencia planificada y diseñada para un rendimiento artístico o una rutina de ejercicio. Una “escritura de la danza” con tres dimensiones cruciales: estructura, organización y propósito.

Este miércoles el Congreso se convirtió en una pista que lo tuvo todo. Los cuerpos –con arrugas y bastones, con canas y máscaras de gas– llevaron una composición sobre el espacio público planificada y diseñada para un rendimiento que ya es una rutina: protestar, reclamar, pedir justicia. Fue una secuencia distinta a la de cada miércoles, días que ya convirtieron en una ceremonia de creatividad social.

Al mediodía, el palacio legislativo, cuya sesión ya había caído por falta de quórum, estaba vallado con un dispositivo de guerra. La oposición iba a llevar una serie de proyectos clave para el sector más perjudicado del gobierno de Milei: el aumento en las jubilaciones, la suba del bono congelado de quienes perciben el haber mínimo y la continuidad de la moratoria previsional –que venció el último 23 de marzo, y que ofrecía la posibilidad de acceder a una jubilación a personas que no cumplen con los años de aportes necesarios. La sesión –caída por obra y (des)gracia de los diputados que responden al gobierno nacional (La Libertad Avanza) y sus aliados (PRO y UCR)–también incluía la declaración de emergencia para los municipios bonaerenses afectados por las últimas inundaciones y definir la presidencia de la Comisión Investigadora por el escándalo de la criptomoneda Libra.

Nada ocurrió.

Salvo lo habitual: el Ministerio de Seguridad, como cada miércoles, valló el afuera del Congreso con cuatro fuerzas, la Policía Federal, Gendarmería, Prefectura y la Policía de Seguridad Aeroportuaria, y un muro de vallas que rompió el protocolo antipiquetes y cortó la libre circulación por Avenida Rivadavia y por Entre Ríos hacia Callao, igual que el miércoles pasado.

Pero los jubinautas hicieron algo tan interesante como disruptivo: moverse, acompañados de algunos gremios, y organizaciones sociales como la UTEP (Unión de Trabajadores de la Economía Popular). Cuando el cordón de prefectos evitaba que la gente bajara a la calle, la marcha los sobrepasaba y bajaban a la avenida Rivadavia.

Marcha de jubilados: el día de “la coreo”

Los manifestanes se alejan de la valla formada por fuerzas de seguridad, y hacen el semaforazo más adelante.

Entonces aparecía la Federal, y el movimiento era el mismo: la gente subía, los efectivos acordonaban, la gente se alejaba hasta sobrepasar el último efectivo, y volvía a la calle a repetir la secuencia. Luego de varias veces, quienes manifestaban decidieron abandonar Rivadavia, cruzaron la plaza, y cortaron Hipólito Yrigoyen. A la altura de Entre Ríos apareció la motorizada de la Federal, y otros policías de la misma fuerza acordonaron esa punta de la plaza. Entonces los y las jubinautas cruzaron de nuevo la plaza y volvieron a Avenida Rivadavia, donde repitieron la secuencia varias veces más. En medio de un gobierno que los gasea y golpea todos los miércoles, hicieron algo distinto y con una rebeldía particular acompañada por cantos como: “Andá a Malvinas, la puta que te parió” (especialmente dedicado a Gendarmería) y el clásico “qué feo debe ser pegarle a un jubilado para poder comer”. 

Marcha de jubilados: el día de “la coreo”

Policías vs la nada: la gente se había ido del otro lado de la plaza para cortar la calle donde no había fuerzas de seguridad.

Hoy la coreografía sumó otra definición al movimiento en el espacio, aunque el día no estuvo exento de los gases, heridos y detenidos a los que nadie quiere acostumbrarse: Javier Iglesias, Leandro Cruzado y Pablo Luna fueron trasladados a las cárceles de Madariaga y General Paz. 

Hubo un cuarto detenido, el fotógrafo Tomás Cuesta, que fue liberado.

Marcha de jubilados: el día de “la coreo”

Los momentos en que sí hubo represión. Fotos Juan Valeiro para lavaca.

Quórum, y para quién juega el árbitro

¿Por qué no hubo sesión? Faltaron cuatro diputados para lograr el quórum. Hubo 124 presentes –la mayoría de los de Unión por la Patria, la izquierda, 11 legisladores de Encuentro Federal, la Coalición Cívica, 10 de Democracia para Siempre, el radical Julio Cobos y Sergio Acevedo de Por Santa Cruz– y 133 ausentes –entre ellos los diputados de Córdoba Carlos Gutiérrez, Ignacio García Aresca y Alejandra Torres, que responden al gobernador Martín Llaryora; el chubutense Jorge Ávila, dos diputados de Democracia para Siempre (escindidos del radicalismo “peluca”), y 6 legisladores de Unión por la Patria que no llegaron a tiempo.

Christian Castillo es diputado del Frente de Izquierda por la provincia de Buenos Aires y habla con lavaca en medio de la Plaza de los Dos Congresos: “Cada miércoles presentamos nuestro reclamo por tener al Parlamento sitiado, es insólito, pero no podemos lograr que no se hagan estos operativos represivos delirantes, que lamentablemente siempre se cobran heridos. Es un gobierno de represores, es un desastre, pero no hay que amedrentarse ni dejar de venir. Esa es la señal: aunque monten todo el aparato represivo, la movilización no se va a frenar”.

Marcha de jubilados: el día de “la coreo”

Jubiladas y jubilados gaseados por las llamadas «fuerzas del orden». Su delito, reclamar por la destrucción de los haberes que les pertenecen por ley y por haber trabajado toda la vida. Fotos Juan Valeiro para lavaca.

Lo que sí se frenó fue la sesión de Diputados. Opina: “Faltaron 4 diputados para dar quórum, estuvimos al borde. En un vuelo que salía hoy temprano desde Santiago del Estero venían tres diputados y el vuelo lo retrasó el gobierno como tres horas y llegaron 20 minutos tarde. Con ellos quedábamos a uno y seguro alguien más se hubiese sentado de los que estaba dando vuelta y especulando. Además hubo otros que estaban enfermos”.

¿La maniobra del avión pertenecerá a lo que se llama “la casta”? Ahora habrá sesión en Diputados el 29 –si finalmente no hay paro de aviones– o el 4 de junio.

Nelly, 71 años, opina: “Están todos en convivencia con el mandato de Milei, que es el presidente de la crueldad, del achique”. Néstor, 74 años, amplía: “Nuestros representantes en realidad son pseudos representantes, porque no nos representan. Hacen lo que quieren los de arriba, son esclavos del poder”.

El presidente del bloque de diputados de UxP Germán Martínez, está en la esquina de Callao y Rivadavia, intercambiando opiniones, consejos y reclamos con un puñado de quince jubiladas y jubilados. Uno de ellos le hace una propuesta:

–Tienen que convocar a una movilización masiva, de un millón de jubilados. No de 400 como somos cada miércoles. Vas a ver cómo no hay Gendarmería ni Policía que nos cague a palos.

Martínez le dice a lavaca: “El quórum que no fue es lamentable. Todavía hay diputados y diputadas que no se dan cuenta de la importancia que tiene la agenda que estamos impulsando, con eje en los jubilados, la emergencia hídrica en vastos lugares de Buenos Aires y la estafa cripto. Yo creo que como están hasta las manos con la estafa cripto hacen lo imposible para evitar que haya sesión”. 

Sobre el Congreso vallado: “Todas las semana denunciamos la militarización del recinto y hoy lo volvimos a hacer junto a los diputados de la izquierda”.

–¿Cuál fue la respuesta? 

–Nada. Menem (Martín, presidente de la Cámara de Diputados) está como William Boo, el árbitro de Titanes en el Ring. Juega para ellos.

Organizaciones y estafadores

La estrategia de las Fuerzas de (in)Seguridad fue igual que la del miércoles pasado: aislaron el Congreso de la Nación. Las vallas circundaron el palacio legislativo para que las y los jubilados no pudieran hacer el acto ni la movilización de cada semana para denunciar las paupérrimas condiciones en las que viven o sobreviven. No hubo, tampoco, ni tránsito ni transeúntes pudiendo circular por Rivadavia entre Callao y Riobamba. Y también paralizaron la estación de subte Congreso de la línea A. Una vez más, Patricia Bullrich rompió su leitmotiv antipiquete.

Marcha de jubilados: el día de “la coreo”

Fotos Juan Valeiro para lavaca.

Mientras el gas cubre el aire, mientras la gente corre, mientras cantidad de personas están tiradas en el piso gaseadas, escupiendo, vomitando, intoxicadas, alguien grita: “¿dónde están las organizaciones?”

Nadie puede responder. O lo que responde es la imagen de la ausencia. Y una certeza que cae de madura: las únicas veces que no hubo represión es cuando las organizaciones sociales, sindicales, partidarias, se hicieron presentes con un músculo significativo y no sólo con un puñado de sus dirigentes para (in)cumplir o con más cartelería que personas.

Quienes vienen semana a semana son distintos curas. El Padre Pancho integra el grupo de Curas de Opción por los Pobres y ejerce su religiosidad en Merlo Gómez, oeste del conurbano bonaerense. Le cuenta a lavaca lo que vio: “Reprimen de manera injustificada. Solo generan un clima de violencia. No responden a un estímulo de quienes protestan, no. Al contrario. No controlan, provocan”. 

Marcha de jubilados: el día de “la coreo”

Fotos Juan Valeiro para lavaca.

¿Qué está viendo en su barrio? “Desazón, una búsqueda de salvar las papas. Crecen las ferias de venta, crecen los comedores, crece la cantidad de cartoneros, crecen los que venden tortillas en las esquinas, crecen quienes se la rebuscan de cualquier manera y como pueden. Y crece el clima de violencia, de inseguridad, de robos. Todo eso está alarmantemente creciendo”.

Se escuchan cacerolas golpearse, y canciones que apuntan a los hombres (y mujeres) de bastones largos: “No son obreros, no son trabajadores, son policías cuidando estafadores”.

Mientras en el Congreso de la Nación pasa todo esto, Pablo Grillo, el fotógrafo herido el 12 de marzo por Gendarmería, es intervenido quirúrgicamente por sexta vez desde la marcha de jubilados en la que fue herido. Llega un mensaje tranquilizador de su familia: “La operación salió bien. Pudieron colocarle la válvula y un catéter para desviar el exceso de líquido cefalorraquídeo al abdomen”.

Marcha de jubilados: el día de “la coreo”

La gente continuó movilizándose: un jubilado con camiseta de Independiente llevaba un cartón escrito a mano: ”Nadie se salva solo”, frase popularizada por la emisión de la serie basada en la historieta El Eternauta. Una jubilada llevaba un gran cartel con un texto basado en otro libro que tal vez alguien aplique en algún momento:

“Constitución Nacional, Artículo 29: “El Congreso no puede conceder al Ejecutivo nacional, ni las Legislaturas provinciales a los gobernadores de provincia, facultades extraordinarias, ni la suma del poder público, ni otorgarles sumisiones o supremacías por las que la vida, el honor o las fortunas de los argentinos queden a merced de gobiernos o persona alguna. Actos de esta naturaleza llevan consigo una nulidad insanable, y sujetarán a los que los formulen, consientan o firmen, a la responsabilidad y pena de los infames traidores a la patria”.

El próximo miércoles seguirá escribiéndose esta historia.

Seguir leyendo

Actualidad

Elecciones porteñas 1: “Hay que sufrir”

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

El bunker libertario volvió a ser el hotel del megamillonario Eduardo Elsztain. La motosierra y la anunciada presencia del perro Conan. El Zorro libertario, la fuerza del cielo, y un peloteo con un jubilado que de algún modo explica el presente. Alfredo Casero una feliz víctima de todos. Esta crónica se complementa con los otros escenarios que muestra lavaca este domingo de elecciones legislativas en las que el candidato del gobierno Manuel Adorni tuvo poco más del 30% de los votos, el opositor Leandro Santoro superó el 27, el PRO algo menos del 16%, y en el que el 47% de la gente no fue a votar. Las reflexiones y los hits libertarios.

Por Franco Ciancaglini

Cae la tarde y cae el frío frente al Hotel Libertador: el búnker de la Libertad Avanza deja a periodistas y público afuera. Y adentro, solo la casta, compuesta por una rara mezcla de pocos políticos y muchas celebridades tuiteras de cuarta y quinta categoría. Mientras cae la noche los únicos que serán reconocidos al entrar serán Lilia Lemoine, El Gordo Dan, Espert, y el actor Alfredo Casero, que tuvo una exclusiva con lavaca.

Afuera, ocupando desde temprano el vértice del vallado para estar lo más cerca posible de la puerta (a unos 15 metros) el núcleo duro de la militancia despliega su color:

  • Llegan el Zorro Libertario,
  • Jaqui y su hija Isabela con una careta de Adorni primero y de Conan después;
  • está Santiago, el de la pala gigante;
  • aquel que tiene un cartel escrito a mano sobre la fuerza del cielo que dice Virrey del Pino;
  • y un joven con un parlante gigante que pasa en loop la marcha militar Avenida de las Camelias.

Estas personas están siempre en todas las manifestaciones. Son los seguidores geeks que avivan las cámaras y hacen disparar flashes; detrás, jóvenes vestidos de negro y de traje los acompañan más o menos silenciosamente; los más organizados son aquellos que llevan remeras y banderas que los lectores de lavaca han sabido describir como de estética Harry Potter con el lema “las fuerzas del cielo”.

Uno de los primeros que descubrió a esta especie fue Damián, vendedor de merchandasing desde hace casi diez años.

Elecciones porteñas 1: “Hay que sufrir”

Damián y el merchandising libertario (fotos Juan Valeiro).

Cuenta que en la pandemia salió a vender banderas argentinas y escarapelas en las marchas anticuarentena. “Ahí me di cuenta de que había un grupito de jóvenes que tenían su propia marca” dice señalando a la Bandera de Gadsden que muestra una víbora y la leyenda “Don´t tread on me” (no me pisotees o, más libremente, no te cagues en mí)  que paradójicamente fue símbolo de un grupo de autodefensa LGTBQ en la década de los 90. “Empecé a seguirlos y cuando salió Milei, yo ya estaba ahí”.

Con visión de negocios, Damián es entonces uno de los que aplicó la marca Milei a variedad de pines con algunas frases tristemente célebres (“No la ven”, “Esto es exactamente lo que voté”) o que encarnan memes: por ejemplo el de la cara del Ministro de Economía y la leyenda “Caputo masterclass”. Los pines que más salen: el que dice “Las fuerzas del cielo” y el de la cara de Milei. Sobre las gorras: “Antes me las sacaban de las manos a 15 lucas. Hoy las puse a 6 y no vendí nada”. ¿La calle está así? “En los recitales hay más plata, la gente compra. Aquí ni se acercan”.

Fernando confirma la teoría. Vino para el recital de Eugenia Quevedo al Movistar Arena acompañando a su mujer, que eligió también hospedaje: el Hotel Libertador. “La verdad está buenísimo”, cuenta. 600 mil pesos el finde. Jamás se imaginó que su paseo coincidiría con el bunker libertario, propiedad del megamillonario Eduardo Elsztain que se lo cedió a Milei durante la campaña electoral de 2023 no se sabe a cambio de qué.  

Fernando tiene una carnicería en Coronel Suárez (a 600 km de CABA) con cinco empleados, aclara que trabaja mucho y sugiere que no apoya a este gobierno. Post recital, cuenta, se fue a comer una pizza y quedó espantado con los precios: “Una grande de muzza, una levité y un agua, 40 lucas”. A su lado, un compañero ocasional lo escucha y suma: “¿El Fernandito sabés cuánto está? ¡3.500 pesos!”.

Ambos están chusmeando cerca de las vallas, observando la situación. Antes de irse para adentro, el carnicero anuncia un invierno duro en Suárez. Él tiene su negocio bien ubicado en el centro, pero ya siente una baja en los bolsillos golpeados. “La verdad, no sé qué va a pasar” dice y apaga su cigarrillo para entrar al hotel donde, asegura, está un piso abajo del 21 donde se hospeda Santiago Caputo. “Eso me dijo mi señora; yo solo lo conozco a Milei”.

Elecciones porteñas 1: “Hay que sufrir”

Eduardo es un veterano de 78 años, vive cerca, sobre Avenida Libertador, lo abriga una campera uniqlo, una banderita argentina y, también, mira por curiosidad. ¿Le gusta Adorni, o Milei, los dos? “El conjunto me gusta. Mientras no vuelvan los que estuvieron antes…”.

¿Pero qué le gusta más, este gobierno o que no esté el kirchnerismo?

-Primero, es eso. Son antripatria, anti todo. El peronismo nunca acepta a nadie que no sea peronista.

¿No se parece esa descripción a lo que pregona Milei?

-Hay que darle una oportunidad, nada más.

¿La economía?

-Muy bien.

¿Usted está mejor que antes?

-Hay que sufrir, soy jubilado, pero bueno, hay que sufrir. No queda otra.

¿Piensa que en adelante será mejor?

Pienso que sí, se va a ir sintiendo la mejoría. Brillante la idea de ir cerrando ministerios, empezando por el de la Mujer.

¿Pero los jubilados no fueron los principales recortados?

-Pero, ¿por qué? Porque llevaron millones para el ministerio de la Mujer, porque eran todos parásitos. Ahora este hombre va a empezar de a poquito con la anticorrupción.

¿El caso de la criptomoneda Libra, cómo lo ve?

La gente siempre le va a buscar algún motivo para criticarlo. Yo mientras combata la corrupción lo veo bien. Y lo otro que siga su curso, para eso está la justicia, entre comillas. Acá no hay justicia, acá la justicia la manejan los oficialismos.

¿O sea, ahora, este gobierno?

-Bueno, por eso.

¿Por eso…?

-Por eso.

¿Macri le gusta?

-Mirá, yo lo voté a Macri. Pero cuando él ganó, dejó en manos no sé si era Sturzenegger… y si yo pagaba 100 de gas, pasé a pagar mil. Entonces la gente votó con el bolsillo; yo voté con el bolsillo, y le voté en contra.

¿Y ahora con qué votó?

Acompañándolo a este hombre.

De repente sale alguien desde adentro del hotel y desde unos 10 metros grita 4 números y vuelve corriendo hacia adentro: ¡31 a 27! Algunos escucharon, la mayoría pregunta qué dijo: “Que vamos ganando”, aclara el del cartel de Virrey del Pino a la tropa. Entonces se desata el primer hit de la jornada, la famosa canción arrítmica compuesta por Inteligencia artificial con melodía de Dragon Ball llamada “Me chupa la pija la opinión de los kukas”.

En pleno entone, que no superará el pogo de una canción melódica de Euge Quevedo, sale Lilia Lemoine y se pliega a los cánticos. Dura unos pocos segundos esa euforia: la diputada agarra el cartel de Virrey del Pino y lo sacude para lograr así algunas fotos y videos, y vuelve a meterse al hotel de Elsztain.

Elecciones porteñas 1: “Hay que sufrir”

Con los números se disparan las primeras interpretaciones: una mujer dice que está aliviada porque “estaba toda cagada” con que ganara Santoro; el hombre de la uniqlo de la calle Libertador dice que todavía hay que esperar el escrutinio final; otra mujer calcula que lo positivo es “la cantidad de votos que tienen en contra” en clara referencia al kirchnerismo; un joven se acerca y sentencia: “Murió el PRO”.

Otra de las estrellas del no-bunker libertario es una niña llamada Isabella. Su madre la lleva a todas las marchas y le da una motosierra hecha con cartón y le hace poner distintas caretas de personas, y también de un perro: Conan. Su madre es Jaqui.

¿Por qué las caretas a tu hija?

-Lo hago por apoyo al Presidente desde siempre.

¿Desde cuándo?

-Las marchas de las 2 vidas. Él estaba, yo estaba ahí también, una persona común, yo le dije que el aborto tiene que dejar de existir, y también le pedí por los animales. Soy activista por los animales. Tengo la careta de Adorni, de Milei, y también la de Conan.

¿Qué te representa el perro Conan?

-Tengo algo personal con Conan. De haberlo visto en mi casa. Ella (señala a la hija) lo vio en mi casa. Ojalá se lo pueda contar al Presidente.

¿Cómo fue ese momento?

Isabella me dijo que estaba Conan en el comedor. Yo me quedé. Mi perro ladraba. Y ahí me quedé asustada y dije: no puede ser. Por eso para nosotros Conan nos acompaña todo el tiempo.

¿Todo el tiempo?

-Exactamente. Es un mensaje. Cada vez que yo voy a buscarlo al presidente, Conan aparece.

Jaqui, esta vez, no contó con la llegada del perro fallecido en 2017. Su hija sonríe.

Llegan números cada vez más definitivos: sigue arriba Adorni, debajo Santoro, detrás lejos Lospennato, mucho más allá Larreta y el resto. Las interpretaciones: “Liquidamos a dos, al kirchnerismo y al PRO”, “ahora hay que ir por Buenos Aires que es el último bastión de los kukas”; “con una mano en el corazón quisiera que vuelva Marra”; “en provincia, Espert”; “no, Bullrich”.

Desfilan nombres pensando en elecciones futuras: Laje, Santilli, el Gordo Dan, que luego pasará saludando del otro lado de las vallas.

De este lado sigue el Zorro, que hoy fiscalizó en una escuela en Balvanera, siendo él de Almirante Brown. “Cero pesitos, de onda, para toda la gilada que fueron a pudrirla a Palermo”, arranca picante, nada a tono con el aristócrata Diego de la Vega.

¿Te enojó que haya salido que a les pagaron a algunas personas por ir al cierre de campaña? “Sí, pero se notaba a la legua que eran altos orcos”.

¿Fue una operación? “Obvio. Yo lo sigo a MIlei desde que éramos 40. Nuestra cabeza es otra, no nos metemos en política para estar rapiñando”. El Zorro se llama Juan Pablo y es jardinero. ¿Sería candidato? “¡Yo le gano a Moreno!”.

Con los números puestos, la euforia aumenta y antes justo de que hable Milei, llega el ex actor Alfredo Casero:

¿A qué viniste al bunker? ¿Te invitaron?

Sí, vine a verlo.

¿Estás contento?

Claro que estoy contento.

¿Qué te gusta, que haya ganado Adorni o que el PRO haya perdido?

Me importa un pedo la derrota del Pro, me importa la victoria de Adorni.

¿Y cómo la ves para la elección nacional?

Me parece que tendría que haber sido más. Fijate, son los tres tercios de Cristina. Adorni tendría que haber ganado por muchísimo más. Lo que pasa es que se separan, lo mismo pasó la otra vez: mientras tengamos a Macri y todo eso…

¿Por qué pensás que votó tan poca gente?

No tienen idea lo que se juega. Son unos pelotudos, porque se podrían haber quedado un moco muy grande. Es una verdadera pena que la gente no entienda que tiene que votar. Son culo pesado. Mucha gente no fue, gente amiga mía no fue. No tienen idea lo que se pierden.

¿No es al revés, la baja participación tal vez favoreció al gobierno?

Vos sos muy joven, a mí me cagaron muchas veces. Es única la posibilidad. Me voy a jugar. Y en realidad me juego porque lo creo. Porque ya me cagaron todos.

Si te invitan a ser candidato, ¿te gustaría?

¡Voy a ser candidato para presidente! ¡Chau!

Después de la ironía Casero sortea la valla.

Detrás suyo una joven morocha con trenzas dice “soy candidata” pero no la dejan pasar.

Una nenita grita Milei Milei.

Se sigue escuchando el hit arrítmico que dice: “Para hablar hay que ganar”.

Se avecina una larga y fría noche de memes.

Fin.

Seguir leyendo

Lo más leido

Anticopyright lavaca. Todas nuestras notas pueden ser reproducidas libremente. Agradecemos la mención de la fuente.