Nota
¿Dónde está Iara Nardelli? Entrevista a su madre, a 2 semanas de su desaparición

Iara Nardelli fue vista por última vez el 30 de junio en Mar del Plata: se encontraba en una institución de la ONG Aldeas Infantiles bajo la tutela de una jueza. Ni la funcionaria, ni la titular del lugar avisaron a la familia, que se enteró de la ausencia de Iara gracias a uno de sus compañeros. “La búsqueda la hacemos con mis amigas” dice su madre en esta entrevista, mientras cuenta que el acompañamiento clave lo encontró en Marta Montero, mamá de Lucía Pérez. La fiscal dio aviso de haber encontrado restos óseos y pertenencias de Iara en un descampado, pero la familia desconfía. “Quieren cerrar la causa, decir que es suicidio, pero tienen que seguir buscándola”. La burocracia de la justicia, la pérdida de tiempo clave y el reclamo para que Iara aparezca ya.
Iara Nardelli tiene 16 años y fue vista por última vez el 30 de junio en la ciudad de Mar del Plata. La última imagen que se ve de ella es a las 2 de la tarde en la calle Luro al 10.200, en el hogar Aldeas Infantiles donde estaba internada desde 2021 por orden de una jueza que intervino tras un cuadro depresivo, y quien ejercía su tutela.

Su familia vive en Miramar. Mariela, su mamá, hizo la denuncia de su desaparición cuando fue advertida por un compañero del colegio que Iara estaba faltando. Aldeas Infantiles ni la jueza a cargo de su tutela le habían avisado.
La búsqueda recayó en el Juzgado de Familia N°2 de Mar del Plata, a cargo de la fiscal Romina Díaz. Después de hacer la denuncia, Mariela salió a buscarla, contactó a la mamá de Lucía Pérez, Marta Montero, que la acompañó a marchar en Miramar junto a Laura Calampuca, mamá de Natalia Melmann, vecinos y organizaciones.
Doce días después la llamaron para decirle que habían encontrado restos óseos en un descampado en las afueras de Mar del Plata. La fiscal a cargo de la investigación, Florencia Salas, dijo a la prensa que se había encontrado una mandíbula diseccionada, parte de una cabeza y posiblemente una tibia. También una campera, lentes y un cuaderno. Además, dio cuenta de que la muerte podría haber ocurrido aproximadamente solo 3 o 4 días antes del hallazgo, aunque podrían ser más los días debido a las bajas temperaturas y las condiciones climáticas. Aún no están los resultados que confirman que esos huesos pertenezcan a Iara, por eso su mamá pide a gritos que la sigan buscando.
¿Qué fue lo último que sabes de Iara?
Que ella me manda un mensaje a las 4.30 de la tarde. Era un mensaje de audio diciendo mami te quiero mucho, me hubiera gustado estar con vos en el campo, te amo mucho. Yo le llego a contestar, ella alcanza a leer mi mensaje y después apaga el teléfono.
¿Ella ya se había ido de Aldeas Infantiles cuando te mandó el mensaje?
Se había retirado a la mañana porque hacía un curso de peluquería, iba a comer al hogar y a la una se iba para la escuela.
¿Después de ese mensaje no sabés nada más?
No. Lo que llama la atención es que en ese mismo horario me manda mensaje a mí, le manda mensaje a una amiga, a su cuidadora, y a un chico que era su novio.
¿Pudieron acceder al peritaje del celular?
No porque en las pertenencias que se encontraron no se pudo encontrar el celular. Ella se va con un celular, una SUBE, tenía cuenta DNI con dinero, se va con una mochila con varias mudas de ropa y con un equipo de mate que llevaba a todos lados.
Doce días después encontraron algunas pertenencias y restos óseos, ¿recién en ese momento se comunicó con vos la fiscalía?
Sí, se comunica inmediatamente la fiscal Romina Díaz. Me dice que en ese descampado -que tampoco es tan descampado porque hay frecuencia de gente- se encontraron algunas de las pertenencias de Iara, un cráneo y una tibia.
¿Pudieron confirmarte que esos huesos son de Iara?
No porque están secos, no hay restos blandos.
¿Entonces cómo se va a continuar?
Pedimos prueba de ADN, el próximo martes me toman muestras de saliva y sangre. Si se hace en Junín va a tardar un mes, pero estamos pidiendo que se aceleren los procesos del ADN. Estamos buscando en forma privada, y Marta Montero se comunicó con la Secretaría de Derechos Humanos y al parecer se designó al Equipo de Antropología Forense para que identifique el cráneo.
¿Qué pensás que pasó?
Yo pienso que todo eso está plantado, no apareció su ropa, no apareció su jean, solo algunas pertenencias como para despistar.
¿Se pudo chequear el recorrido de la SUBE?
Si, hay una conexión con la SUBE. Estamos pidiendo las cámaras, eso está tardando, con el resultado de las cámaras podríamos saber dónde salió, cuál fue el recorrido. Es todo burocracia, hay que presentar todo por escrito.
¿Recibiste apoyo del Estado durante la búsqueda?
El Estado estuvo presente después de que realizamos una marcha. Marta Montero vino con toda su gente, contactó medios, y a partir de ahí el Estado me ayudó. Días anteriores, nada, nadie se acercó a mí.
¿Qué te dijeron en Aldeas Infantiles?
La directora, un desastre; la tuve que llamar yo 24hs después de la desaparición de Iara. Nunca me comunicó a mí, yo la fui a ver y me dijo que había perdido el número de teléfono mio. Se perdieron 24 horas de búsqueda que eran muy importantes.
¿Con la escuela te comunicaste?
El trabajo investigativo lo estamos haciendo yo con mis amigas, recorriendo escuelas, lugares. Con la escuela me comuniqué ayer y resulta que me entero que hacía tres días que no iba a la escuela, y la directora me decía que solamente faltó el viernes. No había ido, yo quiero saber qué pasó esos días, con quién estuvo, qué estaba planeando, qué pensaba, con quién se juntaba.
¿Cómo sigue?
Para mi los resultados van a dar negativos, estoy segura. La fiscalía tiene que seguir buscándola, quieren cerrar la causa, decir que es suicidio. Mientras, yo la sigo buscando.
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Proyecto Litio: un ojo de la cara (video)

En un video de 3,50 minutos filmado en Jujuy habla Joel Paredes, a quien las fuerzas de seguridad le arrancaron un ojo de un balazo mientras se manifestaba con miles de jujeños, en 2023. Aquella represión traza un hilo conductor entre la reforma (in) constitucional de Jujuy votada a espaldas del pueblo en 2023, y lo que pasó un año después a nivel nacional con la aprobación de la Ley Bases y la instauración del RIGI (Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones).
Pero Joel habla de otras cuestiones: su pasión por la música como sostén. El ensayo artístico que no se concretó aquella vez. Lo que le pasa cada día al mirarse al espejo. La búsqueda de derechos por los hijos, y por quienes están siendo raleados de las tierras. Y la idea de seguir adelante, explicada en pocas palabas: “El miedo para mí no existe”.
Proyecto Litio es una plataforma (litio.lavaca.org) que incluye un teaser de 22 minutos, un documental de casi una hora de duración que amplía el registro sobre las comunidades de la cuenca de las Salinas Grandes y Laguna Guayatayoc, una de las siete maravillas naturales de Argentina, que a la par es zona de sequía y uno de los mayores reservorios de litio del mundo.
Además hay piezas audiovisuales como la que presentamos aquí. La semana pasada fue Proyecto Litio: el paisaje territorial, animal y humano cuando el agua empieza a desaparecer.
Esos eslabones se enfocan en la vida en las comunidades, la economía, la represión y la escasez del agua en la zona.
Litio está compuesto también por las noticias, crónicas y reportajes que venimos realizando desde lavaca.org y que reunimos en esta plataforma.
Un proyecto del que podés formar parte, apoyando y compartiendo.
El video de 3,50 minutos
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Orgullo

Texto de Claudia Acuña. Fotos de Juan Valeiro.
Es cortita y tiene el pelo petiso, al ras en la sien. La bandera se la anudó al cuello, le cubre la espalda y le sobra como para ir barriendo la vereda, salvo cuando el viento la agita. Se bajó del tren Sarmiento, ahí en Once. Viene desde Moreno, sola. Un hombre le grita algo y eso provoca que me ponga a caminar a su lado. Vamos juntas, le digo, pero se tiene que sacar los auriculares de las orejas para escucharme. Entiendo entonces que la cumbia fue lo que la protegió en todo el trayecto, que no fue fácil. Hace once años que trabaja en una fábrica de zapatillas. Este mes le suspendieron un día de producción, así que ahora es de lunes a jueves, de 6 de la mañana a cuatro de la tarde. Tiene suerte, dirá, de mantener ese empleo porque en su barrio todos cartonean y hasta la basura sufre la pobreza. Por suerte, también, juega al fútbol y eso le da la fuerza de encarar cada semana con torneos, encuentros y desafíos. Ella es buena jugando y buena organizando, así que se mantiene activa. La pelota la salvó de la tristeza, dirá, y con esa palabra define todo lo que la rodea en el cotidiano: chicos sin futuro, mujeres violentadas, persianas cerradas, madres agotadas, hombres quebrados. Ella, que se define lesbiana, tuvo un amor del cual abrazarse cuando comenzó a oscurecerse su barrio, pero la dejó hace apenas unas semanas. Tampoco ese trayecto fue fácil. Lloró mucho, dirá, porque los prejuicios lastiman y destrozan lazos. Hoy sus hermanas la animaron a que venga al centro, a alegrarse. Se calzó la bandera, la del arco iris, y con esa armadura más la cumbia, se atrevió a buscar lo difícil: la sonrisa.
Eso es Orgullo.

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org
Al llegar al Congreso se pierde entre una multitud que vende bebidas, banderas, tangas, choripán, fernet, imanes, aros, lo que sea. Entre los puestos y las lonas que cubren el asfalto en tres filas por toda Avenida de Mayo hasta la Plaza, pasea otra multitud, mucho más escasa que la de otros años, pero igualmente colorida, montada y maquillada. El gobierno de las selfies domina la fiesta mientras del escenario se anuncian los hashtag de la jornada. Hay micros convertidos en carrozas a fuerza de globos y música estridente. Y hay jóvenes muy jóvenes que, como la chica de Moreno, buscan sonreír sin miedo.
Eso es Orgullo.

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org
Sobre diagonal norte, casi rozando la esquina de Florida, desde el camión se agita un pañuelazo blanco, en honor a las Madres, con Taty Almeyda como abanderada. Frente a la embajada de Israel un grupo agita banderas palestinas mientras en las remeras negras proclaman “Nuestro orgullo no banca genocidios”. Son quizá las únicas manifestaciones políticas explícitas, a excepción de la foto de Cristina que decora banderas que se ofrecen por mil pesos y tampoco se compran, como todo lo mucho que se ofrece: se ve que no hay un mango, dirá la vendedora, resignada. Lo escaso, entonces, es lo que sobra porque falta.
Y no es Orgullo.

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org


Foto: Juan Valeiro/lavaca.org


Foto: Juan Valeiro/lavaca.org


Foto: Juan Valeiro/lavaca.org


Foto: Juan Valeiro/lavaca.org

Foto: Juan Valeiro/lavaca.org
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Cómo como 2: Cuando las marcas nos compran a nosotros

(Escuchá el podcast completo: 7 minutos) Coca Cola, Nestlé, Danone & afines nos hacen confiar en ellas como confiaríamos en nuestra abuela, nos cuenta Soledad Barruti. autora de los libros Malcomidos y Mala leche. En esta edición del podcast de lavaca, Soledad nos lleva a un paseíto por el infierno de cómo se produce, la cuestión de la comida de verdad, y la gran pregunta: ¿quiénes son los que realmente nos alimentan?
El podcast completo:
Con Sergio Ciancaglini y la edición de Mariano Randazzo.

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