Nota
Juez y parte
Ayer martes 7 comenzó el juicio por la violación de la adolescente que llamamos A., de Comodoro Rivadavia, abusada por su padrastro policía a fines de 2009. Su caso reflotó la necesidad de sincronizar la legislación sobre el aborto con la realidad: pese a que la ley vigente es clara en casos de violación, un primer trámite judicial negó ese derecho. Luego de concedido, la familia tuvo que peregrinar hasta Trelew para encontrar un hospital público que acatara la ley. El juicio siguió la misma lógica de violencia institucional. La querella, representada por Sandra Grilli, recusó al conjuez Jorge Amado Gutiérrez por considerarlo imparcial. El letrado había firmado un petitorio de la Asociación de Abogados Católicos de la provincia para impedir el aborto a la adolescente y calificaba a la violación como “dudosa”. Contra toda la lógica procesal, el tribunal desestimó el pedido y hoy miércoles 8 tuvieron lugar las primeras declaraciones. Gutiérrez, en tanto, admitió haber puesto su firma aunque alegó que “no se acuerda o no sabía” cuáles eran los contenidos precisos del petitorio. En este contexto de impunidad procesal es lógico que la familia de la niña tema el trato que recibirá en tribunales durante el proceso oral y dude de los resultados.
La historia

Con bigotes, Gutierrez: juez y parte en el caso de la adolescente violada
La adolescente que llamamos A. fue violada y embarazada cuando tenía 15 años por su padrastro Orlando Nahuelmir, suboficial de la Policía chubutense. Acaso fue este rango el que demoró el registro de la denuncia de la familia. El primer pedido fue que se le conceda un aborto terapéutico, en paralelo a la causa que investiga la violación. En primera instancia, la jueza Verónica Robert, del juzgado de Familia n°3 de Comodoro Rivadavia, había negado la petición. Su fallo, además, no contemplaba represalias para el abusador y acusaba a la madre de la joven de “haber podido evitar el suceso”. Y decía que el aborto empeoraría la recuperación de la salud psicológica de A.
La adolescente, mientras tanto, amenazaba con suicidarse.
Tras esa primera negativa, la familia apeló y la Cámara de Apelaciones se tomó seis días para reiterar la negativa. Se sucedieron entonces presentaciones jurídicas en calidad de Amicus firmadas por casi cincuenta organizaciones de derechos humanos y sociales. También la propia Secretaria de Derechos Humanos de la Nación advirtió al Tribunal sobre las “responsabilidades internacionales” que la negación de ese aborto terapéutico podría acarrear al Estado nacional.
En la calle también ocurrían movilizaciones y marchas en pedido de justicia por A., siempre en Comodoro. Fue el conjunto de estas medidas las que lograron, finalmente, que se haga justicia. El 8 de marzo de 2010, el Tribunal Superior de la provincia finalmente concedió el aborto terapéutico para A. El fallo, además, constituye una interpretación doctrinaria del estado actual del acceso a sus derechos de las mujeres víctimas de este tipo de violencia, ya que interpela a todas las instituciones que deben actuar en estos casos. Los jueces Daniel Luis Caneo, José Luis Pasutti y Fernando Royer señalaron:
- A los jueces: “La interpretación restrictiva del inciso en análisis (se refiere al inciso 2 del artículo 86 del Código Penal) implica atribuir a las mujeres actos heroicos que el Derecho no puede imponer”.
- A los médicos: “El cumplimiento de las normas jurídicas es un deber del profesional, y su incumplimiento es susceptible de sanción legal cuando se nieguen en forma no justificable a la constatación de alguna de las causales previstas en el art. 86 del C. P. y/o la consecuente prestación del servicio. Los casos de ‘Abortos no punibles’ son uno de los tantos componentes que integran el servicio de salud, por lo que se deben respetar los estándares de calidad, confidencialidad, competencia técnica, rango de opciones disponibles e información científica actualizada”.
- A las autoridades provinciales: Recomiendan la conveniencia de implementar una Guía de Atención de los Abortos No Punibles para que los médicos sepan cómo actuar y no se judicialicen los pedidos.
Para hacer cumplir este falla la familia se acercó al Hospital Regional de Neuquén, cuyo Comité de Bioética rechazó la intervención, que se concretó finalmente en el Centro Materno Infantil de Trelew a la 1.30 de la madrugada del viernes 12 de marzo.
El juicio
En aquellos días, todavía agitados por la turbulencia del aborto, la abogada Grilli ya ponía un ojo en el padrastro abusador, causa que corría paralela y hasta entonces sin novedades.
El policía Nahuelmir evitó su detención acusando un intento de suicidio, por el que fue internado. Grilli decía entonces: “Luego de que se intervenga el embarazo, la idea es sacar pruebas de ADN. Con eso bastaría para detenerlo”. Las pruebas se hicieron y la coincidencia con Nahuelmir fueron de un 99,99%, según explica la abogada. La causa fue elevada a juicio oral en diciembre de 2010, y desde entonces está en manos Roberto Casal, Mariano Nicosia y Jorge Amado Gutiérrez, los dos últimos sospechados por la querella de “dudosa parcialidad”. El pedido de recusación a Gutiérrez, ya dijimos, fue desestimado por el Tribunal. Mariano Nicosia, por su parte, fue elegido el pasado año con la venia del Presidente del Colegio de Abogados de Comodoro Rivadavia, que ejerce, justamente, el propio Gutiérrez.
Los niños, al calabozo
El juez Nicosia cobró notoriedad con un caso sucedido recientemente: dispuso que tres niños permanezcan alojados en el calabozo de la Comisaría 3° de Comodoro, junto a su madre detenida. La mujer, soltera, habría robado mercadería en un supermercado. Nicosia ordenó que permanezca demorada junto a sus hijos de 3, 5 y 10 años, que no tenían donde quedarse. Los propios policías del lugar cuestionaron la decisión del magistrado y varias organizaciones y sectores de Comodoro expresaron su repudio a la abusiva medida.
Ahora, Gutiérrez y Nicosia son dos de los magistrados que deben juzgar el caso de A. Tras la recusación, ayer declararon la madre de la víctima y dos peritos presentados por la parte acusadora. Hoy miércoles se sucedieron las declaraciones de dos amigas de la adolescente, un perito, la directora y maestra de la escuela a la que asiste, y su psicóloga.
El caudal de testimonios moldea un ritmo judicial de por sí favorable: el juicio está avanzando. Sobre lo que allí se dijo la doctora Grilli adelantó a lavaca que el balance fue favorable a la querella.
El programa de Decí Mu sobre el caso se puede escuchar desde la web www.decimu.com.ar
Nota
83 días después, Pablo Grillo salió de terapia intensiva

83 días.
Pasaron 83 días desde que a Pablo Grillo le dispararon a matar un cartucho de gas lacrimógeno en la cabeza que lo dejó peleando por su vida.
83 días desde que el fotógrafo de 35 años se tomó el ferrocarril Roca, de su Remedios de Escalada a Constitución, para cubrir la marcha de jubilados del 12 de marzo.
83 días desde que entró a la guardia del Hospital Ramos Mejía, con un pronóstico durísimo: muerte cerebral y de zafar la primera operación de urgencia la noche del disparo, un desenlace en estado vegetativo.
83 días y seis intervenciones quirúrgicas.
83 días de fuerza, de lucha, de garra y de muchísimo amor, en su barrio y en todo el mundo.
83 días hasta hoy.
Son las 10 y 10 de la mañana, 83 días después, y ahí está Pablito, vivito y sonriendo, arriba de una camilla, vivito y peleándola, saliendo de terapia intensiva del Hospital Ramos Mejía para iniciar su recuperación en el Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca, en el barrio porteño de Monte Castro.
Ahí está Pablo, con un gorro de lana de Independiente, escuchando como su gente lo vitorea y le canta: “Que vuelva Pablo al barrio, que vuelva Pablo al barrio, para seguir luchando, para seguir luchando”.
Su papá, Fabián, le acaricia la mejilla izquierda. Lo mima. Pablo sonríe, de punta a punta, muestra todos los dientes antes de que lo suban a la ambulancia. Cuando cierran la puerta de atrás su gente, emocionada, le sigue cantando, saltan, golpean la puerta para que sepa que no está solo (ya lo sabe) y que no lo estará (también lo sabe).
Su familia y sus amigos rebalsan de emoción. Se abrazan, lloran, cantan. Emi, su hermano, respira, con los ojos empapados. Dice: “Por fin llegó el día, ya está”, aunque sepa que falta un largo camino, sabe que lo peor ya pasó, y que lo peor no sucedió pese a haber estado tan (tan) cerca.
El subdirector del Ramos Mejía Juan Pablo Rossini confirma lo que ya sabíamos quienes estuvimos aquella noche del 12 de marzo en la puerta del hospital: “La gravedad fue mucho más allá de lo que decían los medios. Pablo estuvo cerca de la muerte”. Su viejo ya lloró demasiado estos casi tres meses y ahora le deja espacio a la tranquilidad. Y a la alegría: “Es increíble. Es un renacer, parimos de nuevo”.
La China, una amiga del barrio y de toda la vida, recoge el pasacalle que estuvo durante más de dos meses colgado en las rejas del Ramos Mejía exigiendo «Justicia por Pablo Grillo». Cuenta, con una tenacidad que le desborda: «Me lo llevo para colgarlo en el Rocca. No vamos a dejar de pedir justicia».
La ambulancia arranca y Pablo allá va, para continuar su rehabilitación después del cartucho de gas lanzado por la Gendarmería.
Pablo está vivo y hoy salió de terapia intensiva, 83 días después.
Esta es parte de la vida que no pudieron matar:
Nota
La transfiguración de Miguelito Pepe: los milagros seducen
Una obra teatral que recurre al milagro como ingrediente imprescindible para una transformación. Un niño santo en un pueblo perdido. Su primera intervención paranormal desata furor y de todas partes van a suplicarle lo imposible. La transfiguración de Miguelito Pepe es un unipersonal con la dramaturgia y dirección de Martina Ansardi en el que el actor Tuco Richat se pone en la piel de varios personajes que dialogan con lo sagrado y lo profano. Este viernes 30 de mayo a las 20.30 podés ver en MU Trinchera Boutique la primera de tres funciones.
Por María del Carmen Varela.
La transfiguración de Miguelito Pepe gira en torno a un fenómeno que sucede en un pueblo norteño. Miguelito, un niño de Famaillá, se convierte de la noche a la mañana en la gran atracción del pueblo. De todas partes van a conocerlo y a pedirle milagros. En todo el pueblo no se habla de otra cosa que del niño santo, el que escucha los pedidos de quien se le acerque y concede la gracia.
La obra tiene dramaturgia y dirección de la activista y artista travesti Martina Ansardi, directora teatral, actriz, bailarina, coreógrafa y socia de Sintonía Producciones, quien la ideó para que fuera itinerante.
Se trata de un unipersonal en el que el actor Tuco Richat se luce en varios personajes, desde una secretaria de un manosanta que entrega estampitas a quien se le cruce en el camino, una presentadora de televisiòn exaltada a un obispo un tanto resentido porque dios le concede poderes a un changuito cualquiera y no a él, tan dedicado a los menesteres eclesiásticos.
La voz de la cantante lírica Guadalupe Sanchez musicaliza las escenas: interpreta cuatro arias de repertorio internacional. A medida que avanza la trama, Richat irá transformando su aspecto, según el personaje, con ayuda de un dispositivo móvil que marca el ritmo de la obra y sostiene el deslumbrante vestuario, a cargo de Ayeln González Pita. También tiene un rol fundamental para exhibir lo que es considerado sagrado, porque cada comunidad tiene el don de sacralizar lo que le venga en ganas. Lo que hace bien, lo merece.
Martina buscó rendir homenaje con La transfiguraciòn de Miguelito Pepe a dos referentes del colectivo travesti trans latinoamericano: el escritor chileno Pedro Lemebel y Mariela Muñoz. Mariela fue una activista trans, a quien en los años `90 un juez le quiso quitar la tenencia de tres niñxs. Martina: “Es una referenta trans a la que no se recuerda mucho», cuenta la directora. «Fue una mujer transexual que crió a 23 niños y a más de 30 nietes. Es una referenta en cuanto a lo que tiene que ver con maternidad diversa. Las mujeres trans también maternamos, tenemos historia en cuanto a la crianza y hoy me parece muy importante poder recuperar la memoria de todas las activistas trans en la Argentina. Esta obra le rinde homenaje a ella y a Pedro Lemebel”.
Con el correr de la obra, los distintos personajes nos irán contando lo que sucedió con Miguelito… ¿Qué habrá sido de esa infancia? Quizás haya continuado con su raid prodigioso, o se hayan acabado sus proezas y haya perdido la condición de ser extraordinario. O quizás, con el tiempo se haya convertido, por deseo y elección, en su propio milagro.
MU Trinchera Boutique, Riobamba 143, CABA
Viernes 30 de mayo, 20.30 hs
Entradas por Alternativa Teatral

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Relato salvaje guaraní: una perla en el teatro

Una actriz que cautiva. Una historia que desgarra. Música en vivo. La obra Perla Guaraní volvió de la gira en España al Teatro Polonia (Fitz Roy 1475, CABA) y sigue por dos domingos. El recomendado de lavaca esta semana.
Por María del Carmen Varela
La sala del teatro Polonia se tiñe de colores rojizos, impregnada de un aroma salvaje, de una combustión entre vegetación y madera, y alberga una historia que está a punto de brotar: Perla es parte de una naturaleza frondosa que nos cautivará durante un cuarto de hora con los matices de una vida con espinas que rasgan el relato y afloran a través de su voz.
La tonada y la crónica minuciosa nos ubican en un paisaje de influjo guaraní. Un machete le asegura defensa, aunque no parece necesitar protección. De movimientos rápidos y precisos, ajusta su instinto y en un instante captura el peligro que acecha entre las ramas. Sin perder ese sentido del humor mordaz que a veces nace de la fatalidad, nos mira, nos habla y nos deslumbra. Pregunta: “¿quién quiere comprar zapatos? Vos, reinita, que te veo la billetera abultada”. Los zapatos no se venden. ¿Qué le queda por vender? La música alegre del litoral, abrazo para sus penas.

La actriz y bailarina Gabriela Pastor moldeó este personaje y le pone cuerpo en el escenario. Nacida en Formosa, hija de maestrxs rurales, aprendió el idioma guaraní al escuchar a su madre y a su padre hablarlo con lxs alumnxs y también a través de sus abuelxs maternxs paraguayxs. “Paraguay tiene un encanto muy particular”, afirma ella. “El pueblo guaraní es guerrero, resistente y poderoso”.
El personaje de Perla apareció después de una experiencia frustrante: Gabriela fue convocada para participar en una película que iba a ser rodada en Paraguay y el director la excluyó por mensaje de whatsapp unos días antes de viajar a filmar. “Por suerte eso ya es anécdota. Gracias a ese dolor, a esa herida, escribí la obra. Me salvó y me sigue salvando”, cuenta orgullosa, ya que la obra viene girando desde hace años, pasando por teatros como Timbre 4 e incluyendo escala europea.
Las vivencias del territorio donde nació y creció, la lectura de los libros de Augusto Roa Bastos y la participación en el Laboratorio de creación I con el director, dramaturgo y docente Ricardo Bartis en el Teatro Nacional Cervantes en 2017 fueron algunos de los resortes que impulsaron Perla guaraní.
Acerca de la experiencia en el Laboratorio, Gabriela asegura que “fue un despliegue actoral enorme, una fuerza tan poderosa convocada en ese grupo de 35 actores y actrices en escena que terminó siendo La liebre y la tortuga” (una propuesta teatral presentada en el Centro de las Artes de la UNSAM). Los momentos fundantes de Perla aparecieron en ese Laboratorio. “Bartís nos pidió que pusiéramos en juego un material propio que nos prendiera fuego. Agarré un mapa viejo de América Latina y dos bolsas de zapatos, hice una pila y me subí encima: pronto estaba en ese territorio litoraleño, bajando por la ruta 11, describiendo ciudades y cantando fragmentos de canciones en guaraní”.
La obra en la que Gabriela se luce, que viene de España y también fue presentada en Asunción, está dirigida por Fabián Díaz, director, dramaturgo, actor y docente. Esta combinación de talentos más la participación del músico Juan Zuberman, quien con su guitarra aporta la cuota musical imprescindible para conectar con el territorio que propone la puesta, hacen de Perla guaraní una de las producciones más originales y destacadas de la escena actual.
Teatro Polonia, Fitz Roy 1475, CABA
Domingos 18 y 25 de mayo, 20 hs
Más info y entradas en @perlaguarani
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