Sigamos en contacto

Nota

#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

La Fuerza Artística de Choque Comunicativo (FACC) volvió a sembrar la pregunta #QuiénElige? esta vez frente a la gobernación en San Salvador de Jujuy, en el marco de la reunión del G20 “Alimentación sostenible del futuro”. La FACC arriesgó una respuesta: representó a un personaje enajenado y al presidente argentino -rodeado de los funcionarios de los 20 países- comiendo excrementos. Decenas de artistas dejaron así expuesta a esa reunión internacional que pretende pasar desapercibida, y a los abusos locales que esconden los medios de comunicación comerciales. El contexto, el video y las fotos de la acción de la FACC en Jujuy.

En el día en que la «Reunión de líderes científicos de Agricultura» del G20 trató el tema «Alimentación sostenible» en Jujuy, un grupo de artistas autoconvocados llamado Fuerza Artística de Choque Comunicativo (FACC) realizó una acción frente a la gobernación de la provincia. Televisores con inscripciones que denuncian violaciones y represiones en Jujuy, un espectador enajenado que mira un televisor mientras come excrementos, y los líderes de esos países que entran y abren sus maletines también llenos de soretes, fueron parte de una acción artística y política que visibilizó lo que no se ve del G-20.
Por estos días, los autodenominados “líderes científicos agrícolas”  están reunidos en dicha provincia en el marco del G-20, la reunión cumbre del grupo de 20 economías «más fuertes del planeta», de la que Argentina es sede anual. Tras la cumbre en Bariloche, en Jujuy los encuentros del G20 figuran como «Reuniones de líderes científicos de Agricultura», y el tema a tratar el martes de la acción era particular: «Alimentación sostenible».

#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy.


Frente a este encuentro, integrantes de la Fuerza Artística de Choque Comunicativo (FACC) visibilizaron la reunión que pretende pasar desapercibida, en medio de un clima político tenso, y en una provincia que tampoco sale en los medios hegemónicos por sus ajustes, abusos y violaciones. Los televisores rotos ubicados por la FACC en la plaza sintetizaban datos crudos:

  • Vaciamiento de la secretaría de Agricultura Familiar
  • Cierre de la única escuela para ciegos
  • Inflación 25% – Paritaria docente 5%
  • Salario docente $14.000
  • ¿Quién elige este vaciamiento?
  • Desalojo campesino para construir countries
  • Subsidios del Estado a la patronal agraria
  • Explotación de 17.5 toneladas de litio, veneno tóxico
  • Cierre de cinco carreras terciarias
  • ¿Quién elige este envenenamiento?
  • Pérdida y reducción irreparable de la fauna local
  • Entrega de 9.000 hectáreas a minería canadiense
  • ¿Quién elige esta persecución ideológica?
  • Balas de goma y gases en el gobierno del diálogo
  • El código contravencional está por sobre la constitución
  • Represión a docentes y estudiantes
  • Y más…

Tal fue el señalamiento que hizo la FACC en Jujuy, desde donde comenzó a trazar un mapa de artistas y medios comunitarios de todo el país y del mundo que prometen seguir accionando durante el 2018.

#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy.

El G-20 que no se ve

Existe toda una trastienda de poder y control económico alrededor del G-20, que implica fundamentalmente a Estados Unidos, la Unión Europea y a la estrella cada vez menos silenciosa: China. Y su impacto sobre países como el nuestro.
Argentina preside este año el G-20 por lo cual se están realizando a lo largo de 2018, en once ciudades del país, unos 45 encuentros internacionales que culminarán en Buenos Aires entre el 30 de noviembre y el 1º de diciembre con la cumbre de presidentes que reunirá, tal vez, a Donald Trump, Vladimir Putin, Angela Merkel y Xi Jinping, con Mauricio Macri como anfitrión.
El G-20 está integrado por Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Francia, Alemania, India, Indonesia, Italia, Japón, México, República de Corea, Rusia, Arabia Saudita, Sudáfrica, Turquía, el Reino Unido, los Estados Unidos y la Unión Europea (UE). Entre todos, estos 19 países más la Unión Europea representan el 85% del producto bruto global, el 75% del comercio internacional, el 80% de las inversiones globales, y el 66% de la población mundial.
La presencia del G20 en el país provocó entusiasmo en el gobierno y sectores relacionados con el turístico, ya que se calcula que entre delegados y comitivas gubernamentales Argentina recibirá a unas 20.000 personas durante 2018.

#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo audiovisual FACC Jujuy.


Otros datos aportados por un informe de Argentina Mejor sin TLC indican que el país invertirà “3000 millones de pesos para todo el proceso del G20, 1100 millones de pesos serán destinados a defensa y seguridad; alrededor de mil millones costarán los dos días de la Cumbre de los líderes; casi 500 millones estarán destinados a los eventos preparatorios en el país, y otros 218 millones para los viajes a las reuniones preparatorias que no tendrán lugar en la Argentina”. Un detalle: los gastos para la realización del G20 son casi iguales a lo que dispone el presupuesto argentino de 2018 para medio ambiente y ecología.
Más datos del informe: ante la presencia del G20 el gobierno compró aviones y helicópteros, un sistema de defensa misilístico y se trasladará desde Mar del Plata la artillería de defensa aérea. Se renovó el stock antidisturbios (escopetas, municiones de goma, gases lacrimógenos y chalecos policiales multiamenaza, vallas de contención, juegos de cascos, escudos, máscaras antigas y bastones para policías y gendarmes, además precintos plásticos de seguridad que se utilizan a modo de esposas para detenidos). Se calcula que habrá 14.600 integrantes de las 4 fuerzas de seguridad, con apoyo del Comando Sur de los Estados Unidos, más los equipos de seguridad propia que aportarán al menos China, Estados Unidos y Rusia.
#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo audiovisual FACC Jujuy.

Breve historia

El origen de todo esto fue el G-7 que sólo reunía a los países más poderosos. Ante las crisis financieras de los 90 el grupo se amplió para contener a los llamados “países emergentes”, que son los que suelen aportar materias primas y mano de obra barata al concierto económico global. Argentina ingresó en 1999, estalló en 2001 y no alcanzó a ser expulsada, como se preveía.
Durante este período, al presidir el grupo, el gobierno argentino planteó los temas de debate: futuro del trabajo, infraestructura para el desarrollo y futuro alimentario sostenible.
* «Futuro del trabajo» (¿cómo hay que preparar a los estudiantes de hoy para el mercado laboral del futuro?),
* «Infraestructura para el desarrollo» (necesidad de crear un activo financiero para aumentar las inversiones en infraestructura)
* «Un futuro alimentario sostenible» (discutir la seguridad alimentaria).

El último de esos temas es el que congregó en Jujuy a 60 delegados en lo que el G-20 llama “Reunión de líderes científicos de Agricultura”

El último de esos temas es el que congregó en Jujuy a 60 delegados en lo que el G-20 llama “Reunión de líderes científicos de Agricultura” (MACS-G20, Meeting of Agricultural Chief Scientists). Según la página del G-20 estos “líderes” (a los que no se nombra) “trabajan sobre el impacto del cambio climático en la producción agrícola, el adecuado manejo de los suelos y la edición génica, además de elaborar propuestas para un futuro alimentario sostenible”.
Los “líderes” se tomaron una foto con sombreros y anteojos oscuros en Salinas Grandes, zona jujeña codiciada por el turismo pero más aún por el modelo extractivo de bienes comunes, debido a sus reservas de litio. La primera jornada, dice el G20, incluyó un breve paseo por Purmamarca, y un almuerzo con platos típicos en un hotel cuyo nombre tiene resonancias con la difusión de lo que verdaderamente se discute: El Manantial del Silencio.

#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy.


Juan Balbín, presidente del INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, brindó una pista recientemente sobre la preocupación por el problema de los suelos y su estado con el actual nivel de explotación en base a deforestaciones, agrotóxicos y transgénicos: «Si estos suelos no logran de alguna manera sostener esa demanda creciente, vamos a tener que ir sobre ambientes mucho más frágiles, como son el Amazonas o zonas semidesérticas que, de lo contrario, van a tener que pasar a una agricultura muy inestable y muy poco resiliente en este aspecto». La frase plantea que la perspectiva del problema es puramente económica, de “demanda creciente”, impulsada fundamentalmente por la economía china que está liderando el modelo extractivo en Latinoamérica: por eso se amplió la frontera agropecuaria en Brasil y Argentina, tanto para los forrajes como encerrando ganado en los feed lots para producir y exportar carne.
El problema es que es tan grande el deterioro de los suelos y el agua, con los trastornos y el calentamiento climático que conllevan, que el G-20 está intentando abordar también el tema para evitar un colapso de los ecosistemas, que representaría un colapso de los negocios. Si se lo quiere medir en dólares, el Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias (IFPRI, International Food Policy Research Institute), ha calculado el costo anual por degradación de los suelos es de 300 mil millones de dólares, sin contar los gastos relacionados con el daño de los servicios de los ecosistemas.
El desastre en los suelos cultivados por el modelo de agrotóxicos hace que el IFPRI calcule que se precisan 4,6 billones de dólares durante 6 años para rehabilitar las tierras afectadas, cosa que, de no hacerse, implicará una pérdida de 14 billones de dólares.
#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy.


Todo esto sostiene un modelo de industria alimentaria concentrada en un puñado de grandes corporaciones, que venden lo que las Cátedras de Soberanía Alimentaria de Argentina han calificado como OCNIS (Objetos comestibles no identificados). Alimentos que no alimentan, hechos de químicos, edulcorantes, saborizantes, grasas, sales y otros enigmas que están provocando, a su vez, nuevos problemas de salud (obesidad, hipertensión, malnutrición) que son otro costo para los sistemas de salud.
Nuevamente: la mirada estrictamente económica, que equipara alimentos, suelos, salud y agua con mercancías, ya está dando el alerta sobre los efectos del modelo extractivo.
Pero las propuestas que aparezcan en estos encuentros (si es que aparecen) estarán inevitablemente subordinadas al modelo de negocios del G20 que se focaliza en el segundo tema de debate: «Infraestructura para el desarrollo» (necesidad de crear un activo financiero para aumentar las inversiones en infraestructura). Ese es el punto en el que se concentran los grupos de inversión, los pooles de siembra, las mineras y petroleras, los grandes contratistas de obras públicas aliados a los estados, los compradores de tierras y las grandes corporaciones que concentran la economía, incluyendo a las de la industria alimentaria. Todo lo cual augura más de lo mismo.
#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo audiovisual FACC Jujuy.

Los sonidos de otro silencio

Frente a este panorama los artistas de la FACC decidieron volver a salir a la calle con sus acciones que interpelan qué es lo que está ocurriendo en esa zona a veces irreal llamada realidad. Una combinación de arte, denuncia, expresión y comunicación.
Lo habían hecho en mayo de 2017 bajo un concepto: “Femicidio es genocidio”. Esa vez, 120 mujeres se acercaron a la Casa Rosada, se pararon frente a ella, se fueron desnudando y formaron una montaña humana, simbolizando justamente los femicidios. La acción fue acompañada por un grito desgarrador de cada una de esas mujeres. La acción se reiteró ante Tribunales, y luego ante el Congreso Nacional.

En octubre del año pasado, más de 500 artistas realizaron a lo largo de un día cuatro acciones: frente a los tanques de petróleo de Comodoro Rivadavia, frente a la mansión La Rosadita, de los Blaquier, en Ledesma (Jujuy), frente a uno de los batallones de Gendarmería que participaron en el operativo que culminó con la desaparición de Santiago Maldonado, en Esquel, y frente al Congreso de la Nación.

#QuiénElige?: Los gritos del silencio


Iban vestidos de negro con máscaras también negras, como de aves que miraban a esos lugares, y luego les daban la espalda. No hubo palabras. Sólo una suave música de chelos, violines, trompeta. Aquel día apareció el cuerpo sin vida de Santiago Maldonado, en las aguas del rio Chubut.
Fue esa pregunta, #QuiénElige?, la que la FACC decidió replicar otra vez y en Jujuy, con el marco específico del encuentro internacional de los 20 países.
Si el silencio del G20 es hermético, el de la FACC apuesta a que muchas veces las cosas son tan claras que, para explicarlas, no hacen falta tantas palabras.

#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy


#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy
#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy


#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy


#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy


#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy


#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy


#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy


#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Foto: Equipo Audiovisual FACC Jujuy


#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy#QuiénElige? en el G20: La FACC develó qué pasa en Jujuy

Nota

Más allá de tu vereda: un documental sobre personas en situación de calle en CABA

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Más allá de tu vereda.

Así, a secas, es el nombre del documental que acaba de estrenarse. 

No es un documental más. Así se llama el programa de radio de y para personas que viven o vivieron en la calle, que se realiza semanalmente en la organización Sopa de Letras. Esta cobija y aborda la problemática así como la salud mental, desde hace más de 10 años en el barrio porteño de Parque Patricios.

El documental explicita la importancia de la radio, el valor de la comunicación, la potencia de lo colectivo, la necesidad de comunicarse, y que alguien escuche del otro lado, o mejor aún: al lado. Y también refleja la historia de Víctor Rodríguez Lizama, su director, que tiene 64 años y vivió varios en situación de calle.

El Cuervo, como le dicen a Víctor por su fanatismo por San Lorenzo, visibiliza en primera persona junto a otrxs protagonistas lo que se ve a diario, pero no tanto. Lo que se sabe, pero no tanto. 

En Más allá de tu vereda, Víctor entrevista a muchos de los integrantes del programa que se emite en Radio Parque Vida (105.9) desde hace más de tres años.

Marcela dice que antes sólo escuchaba. Y que ahora se animó a decir.

Luciana dice que perdió un poco la timidez. Y que, quizá, eso la ayudó a crear la sección “la música que nos hizo”. 

Cata dice que encontró un espacio para hacer arte. Para animarse a leer sus poesías.

Alicia dice que antes hablaba “poquito”. Y que ahora “habla un poquito más”. 

Lautaro habla cuando llora, emocionado. Dice que no tenía experiencia. Y que ahora se sorprende de sí mismo.

Juan Bautista dice que es el encargado de informar las noticias. Y que ahora sí, alguien escucha su punto de vista.

Cristian dice que está más atento a su alrededor. Tanto, que ahora se anima a opinar.

Víctor dice que hasta no hace mucho, había personas que no agarraban el micrófono. Y que ahora no lo quieren soltar.

Termina el documental, con una última imagen; pantalla en blanco y una sola línea en letras negras.

«A todos los que estuvieron en situación de calle y ya no están».

Hay aplausos, hay felicidad, hay valoración. 

Hay orgullo.

Luego, se abre el micrófono para que quien quiera diga lo que quiera. 

Jorgelina: “Hagamos más radios”.

Adrián: “Podría estar en cualquier otro lado, haciendo cualquier otra cosa en este momento y gracias a ustedes estoy acá, me ayudaron un montón desde lo emocional”.

Cierra Víctor Rodríguez Lizama, con la remera puesta de su San Lorenzo querido y su pelo repleto de canas:

“La finalidad de este documental es mostrar cómo a través de la salud mental podemos llegar a la gente invisibilizada, que está ignorada. Ojalá que se reproduzca en otros lugares, que sirva de herramienta para salir adelante. Hoy hay mucha más gente viviendo en situación de calle. Además de haber vivido mucho tiempo, participé de los censos populares. Recientemente censamos en la comuna 1 (Retiro, San Nicolás, Puerto Madero, San Telmo, Monserrat y Constitución) y sólo acá contamos 1480 personas, por donde vos camines están. En la olla popular que hacemos en el Parque Lezama se ve algo similar al 2001. Más personas en calle y más hambre”.

Detrás del Cuervo hay un pizarrón donde se completa al nombre de su documental: 

“Más allá de tu vereda,

hay otra realidad,

atrás de tu puerta”.

Al costado, un mural con un puñado de palabras escritas en letra cursiva: 

“Hasta que no quede ni una sola persona en situación de calle, 

allí seguiremos estando”.

Seguir leyendo

Nota

La muerte ocurre en vida: se fue Mary, jubilada que no recibía medicamentos oncológicos

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Este domingo a la madrugada murió María Teresa López, asambleísta contra la contaminación en su ciudad natal, Caleta Olivia, luego mudada a Capital Federal y parte del grupo Jubilados Insurgentes. Mary se enfermó de cáncer producto de la contaminación que ella misma denunciaba, y luego fue abandonada por el Estado en modo motosierra: el PAMI se negaba a entregarle medicamentos, pese a amparos judiciales a su favor. Una historia que genera bronca e impotencia, pero que a través del recuerdo de sus compañeras de lucha se revela como una lección de vida, en el más profundo sentido de la palabra: lo colectivo frente a lo personal, la idea de no perder el tiempo, la movilización permanente, la generosidad, la sabiduría, y qué es la muerte.

Por Franco Ciancaglini

Algunos dirán que Mary era bajita y otros que tenía el porte enorme de Nora Cortiñas.
Desde la pandemia solía esconder su sonrisa detrás de un barbijo, aunque sus motivos de alegría eran cada vez menos:

  • su salud era cada vez más delicada;
  • los medicamentos oncológicos no llegaban;
  • y la lucha que encaró desde siempre —primero en su Caleta Olivia natal contra la contaminación, luego contra el sistema de salud público y, al final, como parte del grupo Jubilados Insurgentes— cada vez implicaba poner más el cuerpo.

Fue su cuerpo lo que, este domingo 21 de julio, dijo basta.

Mary se convierte así en algo odioso: un símbolo. Un símbolo de la muerte sistemática que genera un sistema que enferma y abandona. Pero también en un símbolo de lucha por la vida, en el sentido más profundo de la palabra.

La muerte ocurre en vida: se fue Mary, jubilada que no recibía medicamentos oncológicos
Mary junto a Nora Cortiñas.

Contaminada

María Teresa López nació en 1959 en Caleta Olivia, Santa Cruz. Falleció el domingo pasado a sus jóvenes 67 años, en un hotel de la calle La Rioja, en Once, ciudad de Buenos Aires. Sí: vivía en un hotel. Sola, producto del desarraigo que le produjo tener que trasladarse para atenderse de un cáncer de hígado.

Ese fue el diagnóstico médico: una metástasis que avanzó en el último tiempo al ritmo frenético de una motosierra.

La causa que no figura en su partida de defunción es aquella que ella misma denunció hasta el final: a Mary le negaban medicamentos oncológicos indispensables para su tratamiento.

Lo que tampoco figura en su partida es que Mary fue arrancada de su Caleta Olivia natal porque se enfermó, al igual que decenas de personas de esa localidad, producto de la contaminación del agua por actividades extractivas en la zona.

Contaminada

La vida de Mary fue la de una militante social de una estirpe rara: austera, firme, silenciosa, estudiosa, imparable.

Sus compañeros reconstruyen sus historias: que de chica le hicieron un test de inteligencia y un profesional le dijo a su madre que ella era más o menos superdotada; que seguramente podría hacer dos carreras universitarias a la vez; que terminó la secundaria antes de tiempo y luego cursó dos carreras; que se enganchó con el ambientalismo muy joven y empezó a investigar cuando las empresas petroleras negaban la contaminación de las napas de agua.

Formó parte de la Asamblea Ambiental de Caleta Olivia, desde donde luchó sin descanso contra la contaminación provocada por el fracking. Mucho antes de enfermarse, denunciaba que el agua que llegaba a las casas estaba contaminada con petróleo. Lo sabía por la evidencia científica más contundente que tiene una comunidad contaminada: que sus vecinos, familiares y amigos enfermen y mueran.

La muerte ocurre en vida: se fue Mary, jubilada que no recibía medicamentos oncológicos
En Plaza de Mayo, con una bandera contra la megaminería contaminente en Chubut.

Ante los medios Mary describía lo que vivía y veía alrededor: “La gente se muere o queda discapacitada”. En una entrevista para el programa Conciencia Solidaria, precisaba sobre su territorio:

  • “Caleta Olivia… tiene un problema grave: falta de agua potable, y encima está contaminada por la industria petrolera. Los muestreos de agua que hemos sacado y analizado han dado positivo: está contaminada el agua que estamos tomando.”
  • “La situación es muy grave, se está muriendo muchísima gente de esas 11 localidades, 9 están en terrible condición… además tuvimos un caso muy grande de gastroenteritis que afectó a 340 personas”.
    También contextualizó el vínculo entre agua contaminada y salud pública: “Los metales pesados son cancerígenos, mutagénicos, van mutando de una generación en otra… nacen chiquitos con problemas… o fallecen de cáncer».

Denunciaba en Caleta Olivia la presencia de hidrocarburos, arsénico y metales pesados en el agua, además de enfermedades poco frecuentes que, como decía ella, “no tienen cura” y crecen en esa región patagónica. Alertaba con claridad: “No es solamente cáncer, sino Enfermedades Raras o Poco Frecuentes. Muchos pacientes no están bien atendidos… La situación se agrava cuando se trata de estas patologías: solo se ofrecen tratamientos paliativos.”

Un mal día le tocó a ella, ya con la certeza profunda de que la contaminación ambiental fue parte del combustible de su cáncer de hígado.

En agosto de 2015, en un foro en defensa del agua organizado en Comodoro Rivadavia, otras asambleístas como Lidia Campos, de la asamblea contra el fracking de Allen (Río Negro), la conocieron personalmente luego de años de tramar resistencia contra el extractivismo: “En el Foro en Comodoro había gente de todos lados… Y estaba Mary, que ya tenía problemas, como un problema en la boca del estómago… No se sabía bien… Uno tapa esas cosas y habla de la lucha, la salud quedaba en segundo plano. Mary no era de hablar de lo personal; siempre se preocupaba más por lo colectivo».

La muerte ocurre en vida: se fue Mary, jubilada que no recibía medicamentos oncológicos
Lidia y Mary, durante el acampe del Malón de la Paz en Buenos Aires, hace dos años.

La describe así: “Era menuda, callada. Pasaba desapercibida. Pero cuando abría la boca, te dejaba con la boca abierta. Sabía muchísimo. Y tenía una convicción inquebrantable.”

Recuerda Lidia que, en 2019, Mary pasó de la denuncia mediática a la judicial: presentó un amparo colectivo ante la Corte Suprema contra la contaminación del agua con hidrocarburos, arsénico y metales pesados. Denunciaba así, ante el máximo tribunal argentino, el abandono del sistema cloacal, basurales a cielo abierto, y exigía la puesta en marcha de una planta de ósmosis inversa paralizada (actualidadjuridicaambiental.com). En ese expediente Mary detallaba:

  • “Frecuentes interrupciones en el suministro… agua contaminada con hidrocarburos totales y arsénico… napas freáticas contaminadas por fracking…”.
  • Solicitaba medidas cautelares urgentes: provisión gratuita de agua apta, saneamiento cloacal, cierre de basurales y puesta en funcionamiento de la planta de ósmosis inversa.

Esa presentación inédita, que firmó ella misma, reflejaba años de trabajo comunitario, denuncias y… enfermedades. Pero su denuncia fue ignorada, archivada y judicialmente ninguneada: tras seis años, la Corte se declaró “incompetente” y desestimó el recurso, sin resolver la situación de fondo.

Mary no se rindió: en 2020 fue caminando hasta Balcarce 50 para presentar a través de Mesa de Entradas de la Casa Rosada una carta firmada por una red de organizaciones en defensa del agua dirigida a Alberto Fernández, denunciando la contaminación del agua y relacionándola lúcidamente con argumentos que el ex Presidente daba como recomendaciones durante la pandemia.

Lidia Campos es la que recupera y comparte a lavaca este documento, y la que como asambleísta define su legado: “Lo que ella hizo fue histórico. Vale la pena hablarlo para las próximas generaciones… En esta época hemos perdido tanta humanidad que a nadie le importa. Pero acá hay alguien que dio su vida. Dio, literalmente, su vida.”

El último recuerdo que Lidia conserva data del 14 de julio de 2023, durante una jornada de lucha contra Mekorot, la empresa nacional de agua israelí que intentaba desembarcar en Argentina con intenciones sospechosas. Relata Lidia: “Ella estaba afuera del Anexo del Congreso con los Jubilados Insurgentes para protestar… Después fuimos a una confitería. Le pregunté si había comido al mediodía… no había comido nada. Le sugerí unos tostados o medialunas con queso. Pidió un té. Cuando llegó lo que pedimos, no lo pudo comer”. Igual, se sacaron esta hermosa foto compartiendo. Y ese mismo día, antes de despedirse, Mary le regaló una pashmina rosa a Lidia para protegerla del frío.

La muerte ocurre en vida: se fue Mary, jubilada que no recibía medicamentos oncológicos
Carlos Ponce, Mary y Lidia Campos: una amistad atravesada por la lucha ambiental del sur del país.

Abandonada

Cuando se enfermó y vio que su asamblea se desarmaba –entre otras cosas precisamente porque muchos enfermaban- Mary se trasladó a Buenos Aires. Pretendía resistir y atenderse bien, cosa que logró durante muchos años: su lucha logró que PAMI le asignara el Hospital Italiano para su tratamiento.

Tuvo un cáncer controlado que se descontroló al ritmo del deterioro del sistema de salud: primero Macri, luego Fernández, la pandemia y finalmente Milei como garrotazo final.

Desde 2023 su situación empeoró drásticamente. Su compañera Zulema, de Jubilados Insurgentes, relata: “El PAMI decía que tenían medicamentos para esa patología, pero no eran los que había indicado su médica… entonces no los aprobaban. A veces los recursos judiciales salían favorables, pero el PAMI tampoco los entregaba. La impotencia era terrible».

Sino miren este video.

María Teresa López dice claramente: “El mecanismo es simple: es eliminarnos, gastando menos… llegar al déficit cero… matándonos.”

El video la muestra junto a sus compañeros de Jubilados Insurgentes en un reclamo frente al PAMI por sus medicamentos.

Sigue: “Es más fácil eliminarnos de manera nefasta e inhumana… Para mí ustedes son asesinos, y les importa un bledo”.

Hoy, un año y mes después, Mary tenía razón.

Zulema continúa: “Ella no podía hacer la quimio porque la droga fundamental no estaba… íbamos al PAMI con compañeros, hacíamos reclamos, pero no facilitaban nada. Cuando le autorizaban un tratamiento de ocho sesiones, solo le entregaban dos dosis. Nos confesaron que no se molestaban en dar el tratamiento completo porque muchos morían antes… Pero Mary resistía, resistía… llegó un momento en que el cuerpo no resistió más».”

Una de las últimas veces de manifestación ante el PAMI, sin Mary, el personal de seguridad preguntó por ella en la puerta: “¿Cómo está Mary?”

La respuesta era obvia: mal.

Insurgente

Pese al deterioro físico, Mary se unió a los Jubilados Insurgentes. Entendió que el sistema no solo descarta a quienes enferma, sino también a los que ya no pueden “producir”.
Zulema recuerda: “¡Tenía un carácter! Ese carácter es el que la hizo resistir cuando muchos se daban por vencidos”.

Llegó a ese espacio dos años atrás, íntimamente vinculada con su enfermedad. “Se metió en todo lo legal… recursos, fiscalías, Comodoro Py… sabía de litigio ambiental”, dice Zulema.

El 12 de junio de 2024, durante la lucha contra la Ley de Bases, estuvo firme en Plaza los Dos Congresos. “Nosotros la cuidábamos porque estaba débil, pero se escapaba, quería seguir.” Conocía a todos. “Era muy luchadora. Y hablaba con energía. Siempre nos pedía que unamos las luchas».

Lo que posiblemente sea su último legado lúcido: unir las luchas del ambientalismo con las banderas de los jubilados.

Sobre su convicción, Zulema dice: “Cualquier cosita que ella hacía la asumía con total responsabilidad… vino con cartulina, se traía el cartel… Cuando asumió Milei hizo un cartel que decía ‘Toda la clase política es responsable de la debacle del país’, lo diseñó ella misma”.

La muerte ocurre en vida: se fue Mary, jubilada que no recibía medicamentos oncológicos
Un cartelito que le hicieron tras su muerte, Clarisa y Agus, que lo dice todo: «Se lo hicimos porque ella era doña cartelitos, y lo dejamos con ella».

Otra anécdota: “Una vez vino a una reunión, con anotador en mano, ya predispuesta. Algunos comenzaron a hablar de su vida personal, y se enojó. Se levantó, juntó sus notas y se fue. Dijo: ‘acá se pierde tiempo, no van a llegar a nada’. Pero volvió. Con dramas y todo, no quería perder el tiempo: estaba alerta. Era consciente de que la tarea era enorme, y le ponía ímpetu”.

Mary sabía que no le quedaba mucho tiempo y por eso nunca bajó la guardia.

Siguió yendo cada miércoles a las rondas frente al Congreso, siempre con barbijo, para cuidarse y cuidar. Participó del Malón de la Paz, llevó agua, militó con grupos ambientalistas, jubilados y religiosos. Organizó actos, escribió cartas, e insistía en que el 22 de marzo, Día Mundial del Agua, había que salir a las calles. Siempre. Aunque lloviera, aunque doliera.

Porque Mary enseló que la muerte no es algo que ocurre al final: es eso que va sucediendo en vida ante la indiferencia, el silencio de los tribunales, el apagón de las protestas, la descomposición del cuidado, la impunidad de los contaminadores y la complicidad del silencio.

La muerte es el abandono.

La muerte es el olvido.

Y en ese sentido, Mary sigue más viva que nunca.

odas las agrupaciones de jubilados que se juntan los miércoles a protestar en Congreso, preparan un homenaje a Mary y, a través de ella, “a todas las víctimas del sistema y de este plan siniestro de exterminio de los más vulnerables”.

Será mañana, después de la marcha, en un acto en Plaza de Mayo.

Mary: gracias.

Hasta mañana.

Seguir leyendo

Nota

Pablo Grillo: llaman a indagatoria al gendarme Guerrero a seis meses de un disparo criminal

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

El 2 de septiembre el gendarme que disparó una granada de gas lacrimógeno por fuera de todos los protocolos de la fuerza deberá comparecer ante la justicia. La decisión la tomó la jueza María Servini de Cubría más de cuatro meses después del hecho. Pablo Grillo luchó por su vida, perdió masa encefálica y hoy se encuentra en plena rehabilitación. Todo lo que deberá explicar Héctor Guerrero y que implica a su principal defensora y la responsable de la violencia estatal: Patricia Bullrich.

Por Francisco Pandolfi y Lucas Pedulla. Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

Cuatro meses y una semana pasaron desde el miércoles 12 de marzo. Ese día, durante otra violenta represión a la marcha de jubilados y jubiladas, el Gendarme Héctor Guerrero le disparó fuera de toda legalidad una granada de gas lacrimógeno al reportero gráfico Pablo Grillo, cuyo impacto casi lo mata, y por el que perdió parte de la masa encefálica, estuvo casi tres meses internado en terapia intensiva en el Hospital Ramos Mejía y por el que hoy continúa en proceso de rehabilitación. Cuatro meses y una semana pasaron hasta hoy, lunes 21 de julio, en el que la jueza María Servini citó a indagatoria al gendarme, autor material de lanzamiento, para el próximo 2 de septiembre.

Es decir: entre la ejecución y la audiencia habrán pasado 131 días, casi seis meses, casi medio año. 

El camino de la in-justicia

En un primer momento, la jueza había rechazado el expediente y el caso había pasado al Juzgado Federal N° 12, donde tramitaba otra denuncia por los mismos hechos. Como ese juzgado estaba vacante y subrogado por Ariel Lijo, quien también se declaró incompetente y declinó la competencia, el expediente regresó al Juzgado N° 1 el 28 de marzo y la jueza Servini lo tiene en sus manos desde el 10 de abril, a la vuelta de una licencia. 

La cronología detalla el tiempo que una familia debe atravesar para exigir justicia por un hecho de violencia estatal: desde el 21 de marzo en que el papá, la mamá y el hermano de Pablo se presentaron en la causa como querellantes, solicitaron se llame a Guerrero a declarar “en calidad de imputado, por tentativa de homicidio agravado por abuso funcional, abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público”. Pero no hubo respuesta. Por eso, el 6 de junio, reiteraron el pedido con estos argumentos: “Desde el inicio de la investigación, todas y cada una de las pruebas recabadas por el Juzgado corroboran lo que planteamos en nuestra querella del 21 de marzo: el cabo primero Héctor Jesús Guerrero de la Gendarmería Nacional Argentina fue el autor del disparo de la pistola lanzagases que hirió de gravedad a Pablo Grillo el 12 de marzo a las 17.18hs”. Y agregaron: “En el pedido que presentamos ante la jueza Servini ofrecemos una descripción de los hechos y un análisis pormenorizado de los elementos de prueba existentes hasta el momento”.

Y no hubo dos sin tres: el 15 de julio se le volvió a exigir al Juzgado que lo cite a Guerrero. 

Y la tercera fue la vencida: este lunes, Servini citó a prestar declaración indagatoria al cabo Guerrero como autor del disparo con cartucho de gas lacrimógeno calibre 38mm que impactó en la cabeza de Pablo Grillo. La audiencia será el 2 de septiembre a las 10. 

Guerrero es el primer efectivo formalmente imputado en la causa por el operativo policial del 12 de marzo. 

Desde la querella informaron: “El juzgado ordenó la realización de una pericia balística a cargo de la División Balística de la Policía de la Ciudad para reconstruir con el mayor nivel de precisión técnica posible el disparo que hirió de gravedad a Pablo. Si bien la jueza consideró que ya existen elementos de prueba contundentes respecto de la responsabilidad de Guerrero para esta instancia, sostuvo que la pericia es necesaria para afianzar la reconstrucción de la dinámica del hecho”.

 La pericia tendrá como objetivos precisar:

-La trayectoria y velocidad del proyectil que impactó en la cabeza de Pablo Grillo;

-La posición del arma al momento de efectuarse el disparo y el ángulo de salida del proyectil; 

-Analizar si el proyectil impactó previamente contra otra superficie, y si eso alteró su dirección o energía.

-Las ubicaciones de Grillo y de Guerrero al momento del disparo.

El juzgado también ordenó, previo a la pericia, una inspección en el lugar del hecho (la esquina de Hipólito Yrigoyen y Solís) que incluirá un relevamiento fotográfico terrestre y aéreo y la elaboración de un croquis detallado de la escena. 

Además, le prohibió a Guerrero la salida del país.

Compartimos el perfil de Pablo que realizamos en la edición 203 de MU.

Seguir leyendo

Lo más leido

Anticopyright lavaca. Todas nuestras notas pueden ser reproducidas libremente. Agradecemos la mención de la fuente.

Vistas el día de hoy: 37.005