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Territorio del crimen: asesinan a integrante del pueblo Qom en Formosa

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El martes 23, en Formosa una comunidad del pueblo Qom fue brutalmente reprimida a la vera de la ruta 86, donde mantienen un corte hace más de cuatro meses reclamando la restitución de 5 mil hectáreas usurpadas por emprendimientos sojeros y el propio gobierno provincial. Durante la represión murió Roberto López, víctima de la balacera policial. La abogada de la comunidad, Roxana Silva, en diálogo con lavaca, contó que estuvo presente durante la autopsia que se le realizó a López y pudo comprobar que “tenía orificios de bala en la espalda”. La abogada resaltó que la mayoría de los detenidos “son mujeres y ancianos. En principio detuvieron a 35, ahora solo queda preso  Eugenio Fernández, al que le armaron una causa”.  Silva informó que es grave el estado de salud de Sanuel Garcete, otro integrante de la comunidad que recibió un golpe en la cabeza y está en estado de coma e internado en terapia intensiva. El otro hospitalizado es Sixto Gómez, que recibió un balazo en el muslo, y suman decenas los integrantes de la comunidad heridos con perdigones de balas, resumió la abogada. Por su parte, Enrique Mamani, vocero Qom en Buenos Aires, denuncia además que el cacique de la comunidad, Félix Díaz, continúa desaparecido. La abogada Silva precisó que el cacique tenía un pedido de captura porque le habían imputado los delitos de atentato a la autoridad, daño, robo y lesiones. “Estamos pensando en presentar un Habeas Corpus para protegerlo, porque si bien logramos dejar sin efecto el pedido de captura, no nos garantizaron su libertad cuando se presente ante la justicia”. Para este viernes 26, a las 18 horas, convocan a todas las organizaciones, movimientos y asambleas a marchar hasta la Casa de Formosa (Hipólito Yrigoyen al 1.400)y al Congreso Nacional para pedir juicio y castigo a los responsables de la represión y la restitución de tierras.
Territorio del crimen: asesinan a integrante del pueblo Qom en Formosa

La causa está caratulada como una investigación por “atentado a la autoridad”, es decir, que no apunta a señalar quiénes atacaron a la comunidad, sino todo lo contrario.

La organización Amnistía Internacional señala: “Hace más de 4 meses que los miembros de la Comunidad exigen al Estado acciones claras. No cortan la ruta por placer, lo hacen por desesperación ante la falta de respuestas. Están exigiendo por sus derechos y sufren un desalojo forzoso, son sometidos a la violencia institucional y los hechos relatados los inculpan como agresores“. 

Gabriela Boada, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Argentina, recuerda que el derecho de los pueblos indígenas a sus tierras está amparado no sólo por las compromisos internacionales que el Estado ha asumido, sino también por la Constitución Nacional y otras leyes nacionales, entre ellas la 26.160, que declara emergencia de las tierras y prohíbe los desalojos hasta que se haga el relevamiento de comunidades para la otorgación de los títulos de propiedad. “Los derechos humanos son claros: no se puede desalojar a las comunidades.” señala Boada, quien informa que la semana pasada, Félix Díaz, líder de la comunidad, se comunicó con Amnistía Internacional Argentina para expresar su preocupación porque estaba sufriendo amenazas. “Lo que pasa en Formosa es gravísimo. Las constantes violaciones a los derechos de los pueblos indígenas en la provincia, el manejo de la información y el doble discurso hacen que las comunidades estén desamparadas y en riesgo. Es vergonzoso: los indígenas reclaman pacíficamente por sus derechos negados históricamente, los quieren callar y castigar, se defienden y salen en los diarios como si fueran pendencieros” señaló Boada, quien exigió que el gobierno formoseño de Gildo Insfrán cumpla sus compromisos y lleve a cabo una investigación completa, pronta e imparcial del los hechosy lleve a la justicia a los responsables de lo sucedido. Al mismo tiempo, exigió que el Poder Ejecutivo Nacional cumpla con sus compromisos internacionales de derechos humanos de los pueblos indígenas en todo el país, ya que no se puede permitir que se continúe con éste nivel de discriminación, violencia e indiferencia con los pueblos indígenas.

El informe sobre esta comunidad que realizó Amnistía fue difundido hace apenas 4 meses y llevó por título “Exigimos respeto” (ver https://www.amnistiainternacional.org/Publicacion.php?Id=135 )

 

El territorio usurpado

El gobernador formoseño, Gildo Insfrán, dispuso este año construir una universidad y un parque nacional dentro del territorio de la comunidad del pueblo Qom, ocupando así casi la mitad de las hectáreas concedidas a los aborígenes décadas antes. En ese radio de 5 mil hectáreas los Qom identificaron, además, a decenas de familias “criollas” con parcelas repletas de soja. Mamani cuenta que los territorios están catalogados como comunitarios: “No tienen la posibilidad de ser vendidos, son ancestrales y por eso pertenecen a las comunidades”.
Desde hace 4 meses los Qom mantienen un corte parcial sobre la ruta 86 para pedir la restitución de las hectáreas y el cese de la usurpación. Hace algunas semanas, el cacique Félix Díaz había viajado a Buenos Aires para concretar reuniones con la Secretaría de Derechos Humanos de Nación y el INADI que, sigue Mamani, “se pronunciaron a favor, pero todo siguió igual”. Y peor: hay tres muertos.
Díaz había recibido amenazas explícitas por parte de las familias sojeras y policías armados. Mamani cuenta: “La semana pasada hubo amenazas en los cortes por parte de la policía, diciendo que si no levantábamos nos iban a reprimir o a matar”.
Territorio del crimen: asesinan a integrante del pueblo Qom en Formosa
La represión
El comunicado que los Qom subieron a su página (https://comunidadlaprimavera.blogspot.com/) relata los primeros momentos de la brutal represión: “Alrededor de las 18:30 hs., hubo otro intento de desalojo por parte de la Familia Celias, esta vez acompañados con una gran cantidad de policías de la provincia, armados y amenazantes que provocaron un violento enfrentamiento en donde Sixto Gómez, un indígena de la comunidad perdió su vida, al igual que un policía del que no se tienen datos oficiales. El enfrentamiento terminó con varios heridos, y una gran cantidad de indígenas detenidos. En la zona que lograron desalojar, las casas fueron quemadas”.
Los miembros del pueblo Qom detenidos son alrededor de 35, de los cuales 6 serían menores de edad.
Ciertos medios de comunicación comerciales hablaron de un “enfrentamiento” entre la policía y la comunidad Qom, e incluso Clarín en su edición digital dio voz al comisario Cajes, quien declara: “Jamás esperamos semejante brutalidad”.
Mamani denuncia una operación de prensa para distorsionar los hechos. Se defiende: “No fue un enfrentamiento bajo ningún punto de vista: fue una masacre. Los tobas no usamos armas, los pueblos originarios no nos armamos. La única arma que tienen los hermanos son las flechas, y las usan para cazar. Nosotros amamos la vida, la Pacha, somos parte de la naturaleza y no queremos que nadie muera”.
El ministro de Gobierno de Formosa, Jorge González, dio su versión de los hechos: dijo que el choque se produjo cuando unos cien efectivos ingresaron a un campo “usurpado por aborígenes”, los cuales comenzaron a efectuar disparos, “uno de los cuales mató al oficial Heber Falcón”.
Mamani desmiente que el policía pudiese haber sido asesinado por armas de los Qom. En cambio, afirma que a Sixto Gómez, uno de los Qom asesinados, “lo remató un policía cuando estaba tirado en el piso”.
Hoy el juez a cargo de la causa, Santos Gabriel Garzón, realizaba un peritaje en la zona para desenredar estas versiones.
Los Qom, en tanto, decidieron comunicar:
Territorio del crimen: asesinan a integrante del pueblo Qom en Formosa“Por la mañana nos vinieron a disparar e insultar los Celias junto a la policía. El abogado y Celia nos dispararon frente a la policía, pero esta nada hizo. La policía simuló que se les cayeró un arma para luego culparnos de todo, todo estaba planeado de antemano, de hace mucho. Nosotros nos comunicamos con el Ministerio Público de la Defensa para que supieran lo que estaba pasando y particularmente con nuestro defensor público Molina de Resistencia pues no sabíamos que hacer. Los diarios locales venian hablando del fin de la tolerancia. El defensor del pueblo de Formosa Gianluca también publicó en los diarios locales el martes por la mañana de la inminencia del desalojo. Hicieron hechar al delegado de INADI para poner a un asesor del gobernador de formosa. Insultaron y criticaron desde la provincia al INADI, institución que junto al Ministerio Público de la defensa vienen advirtiendo sobre el conflicto. Y a las cuales les presentamos nuestras denuncias. Hemos recurrido a la justicia todas la veces que pudimos. Con denuncias, medidas cautelares, apelaciones, recursos de amparo. Hemos recurrido a organizaciones de derechos humanos para denunciar lo que nos están haciendo, al CELS, a SERPAJ, a GAJAT, a Amnistía Internacional. Recibimos decenas de actos de violencia en el corte que hemos denunciado en los Juzgados. No obstante nuestra modalidad de corte era muy flexible, dejábamos pasar a los vehículos en los horarios de trabajo. Y siempre dejamos pasar a las ambulancias y urgencias. Porque respetamos la vida. No somos violentos, solo queremos que se cumplan las leyes indígenas, como ser respetar el Convenio 169, la Declaración de Derechos Indígenas de las Naciones Unidas, el artículo 75, la ley de emergencia territorial 26.160. Luego de años de golpear cientos de puertas de despachos y que la provincia nos provocara con la instalación de un Instituto Universitario en nuestro territorio no nos quedó otra posibilidad que tomar una medida como la de cortar la ruta. En estos cuatro meses de corte ningún funcionario provincial quizo hablar con nosotros. Ahora nos han reprimido: hay muertos, heridos, detenidos, nuestras casas quemadas. ¡Y la provincia intenta culparnos! ¿Hasta dónde llegarán?”.
 
Contacto:
Roxana Silva, abogada Comunidad La Primavera: tel 0371 815541294

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La Ronda, en la mirada de Martina Perosa

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Quinta entrega del registro colaborativo de la ronda de las Madres de Plaza de Mayo, que se propone transmitir el valor de la constancia, de los pies en el espacio público, de la gota a gota que horada la piedra, la no violencia contra la violencia, su valor social, su peso histórico, sus 40 años de coreográfico diseño: media hora, todos los jueves. Esta cobertura realizada fue por la fotógrafa y artista visual Martina Perosa.

Toda la producción será entregada a ambas organizaciones de Madres y al Archivo Histórico Nacional. Invitamos a quienes tengan registros de las rondas realizadas estos 40 años a que los envíen por mail a [email protected] para sumarlos a estos archivos. Esta iniciativa es totalmente autogestiva.

La Ronda, en la mirada de Martina Perosa

“Desde hace tiempo me interesa la relación entre fotografía y movimiento. Hay un trabajo que me parece muy interesante, que me inspiró en esta búsqueda, que es la serie fotográfica de Muybridge en el que logra documentar el rápido trote de un caballo en el aire. Mediante esta serie intentaba demostrar, frente a la teoría opuesta de algunos periodistas deportivos, en el que hay un momento de la carrera en el que los cuatro cascos del equino están en el aire. Esas series en movimiento abrieron una nueva discusión en la historia de la fotografía, que incluso dieron comienzo al cine”.

La Ronda, en la mirada de Martina Perosa

“Siempre me interesaron estos cruces interdisciplinarios entre las diferentes ramas artísticas como el cine, la fotografía y la danza. Pensando la ronda de plaza de mayo, me punzaba mucho la idea de coreografía. Una repetición constante todos los jueves, durante cuarenta años, por media hora. Una serialidad. Una duración y tiempo concreta. En un espacio determinado. Unos cuerpos, y una relación entre ellos, con una calidad de movimiento que a lo largo de los años fue mutando según el contexto: explosivo, suave, sutil. Y una música que hilvana el movimiento, los sonidos de la calle y el grito popular”.

La Ronda, en la mirada de Martina Perosa

Sobre Martina Perosa

Artista visual, nacida en la ciudad de Buenos aires. Su formación se centró en distintas disciplinas artísticas, que hoy confluyen en su obra. Estudió cine, indagó en el teatro, la performance y danza contemporánea y luego se especializó en talleres de fotografía y  clínicas de obra. Esta multiplicidad de intereses le permitió construir una mirada interdisciplinaria sobre la fotografía con un principal interés en el movimiento, y en la potencia de la imagen para construir ficción y contar historias. En 2019 editó su primer fotolibro “Shinsekai”, finalista del Premio Publicación Latinoamericano en el FELIFA 2021 y en diciembre 2023 editó su segundo fotolibro Proyecto Dallas.

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Rosario narco (1): la infiltración y la complicidad

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Reflexiones, datos de la realidad e hipótesis sobre lo que ocurre en Rosario a partir del recrudecimiento de la violencia, a través de esta entrevista con Francisco Broglia, Defensor Público del Servicio Público de la Defensa Penal de la ciudad de Rosario y especialista en Derecho Penal. Desde la desestructuración económica a la descripción y atomización del mercado narco. Las complicidades policiales. La demagogia punitiva y las lógicas de la guerra, frente a otro tipo de esquemas de seguridad. La ineficacia de la violencia y la mano dura. Y la necesidad de una reforma policial y penitenciaria para poder ir al corazón del problema.

Texto: Sergio Ciancaglini

Rosario sigue sufriendo la violencia narco por un lado, y las políticas de “saturación” policial por el otro (llenar las calles de efectivos) que no parecen encontrar soluciones. El gobierno santafesino exhibió mayores controles y restricciones en las cárceles, con presos supuestamente relacionados al negocio narco y considerados de “alto riesgo”, sin ropa, en el piso, ante personal policial armado y encapuchado. Pablo Cococcioni, ministro de Seguridad provincial, publicó las fotos en Instagram bajo este título: “Cada vez la van a pasar peor”. Se emularon así las imágenes conocidas en El Salvador presidido por Nayib Bukele.

Se acumularon otras escenas, o aparentes respuestas: un colectivo penitenciario baleado, el asesinato de dos taxistas (Héctor Figueroa y luego Diego Celentano, en ambos casos utilizando balas policiales) y un colectivero (Marcos Daloia) a los que se sumó el crimen del trabajador de una estación de servicio, Bruno Bussanich. Todo acompañado por las amenazas al gobernador Maximiliano Pullaro, y una nota dirigida al propio gobernador y a Cococcioni en la que se pronosticaba: “carguen con muertes inocentes”.    

Sobre ese panorama habló con lavaca Francisco Broglia, abogado, especialista en Derecho Penal, Magister en Ciencias Sociales, docente universitario y actualmente Defensor Público del Servicio Público de la Defensa Penal de la ciudad de Rosario.

“Hay un endurecimiento de las condiciones de detención en algunos penales y quizás esta respuesta tiene que ver también con eso porque se empieza a dar desde hace algunos meses atrás. Esto que sucedió con la foto a lo Bukele, como se le dice. No se sabe si fue la gota que rebalsó el vaso o bien ya se venía dando una situación de agravamiento de las condiciones carcelarias que derivó en estos atentados en los que, además, están demostrando que tienen armas de la Policía y material balístico provisto por las fuerzas de seguridad. Hay un mensaje bien, claro: ‘estamos infiltrado en el Estado, o el Estado es cómplice nuestro’” explicó Broglia.

La precarización y la identidad

¿Cómo describir este panorama? “Rosario era de las ciudades más seguras de Latinoamérica, con una tasa de homicidios más baja que la media nacional, y hoy la estamos cuadruplicando. Hay una conjunción de cosas. Un fuerte cambio estructural del mercado del trabajo en Argentina y en el mundo en los últimos 30 años, relacionado con la precarización laboral. La situación es muy fuerte en los territorios, con situaciones de exclusión de jóvenes de sectores populares. Los materiales disponibles para construir identidad, para esos jóvenes, son prácticamente nulos. Los tradicionales, la escuela o el trabajo, dejaron de operar para ellos”.

¿Y entonces? “Aparecen otras formas de construir identidad, respeto y reconocimiento. Por ejemplo, la violencia. Y en ese marco aparecen estas economías delictivas vinculadas con la comercialización de sustancias como forma de generar esa identidad, ese prestigio social para los jóvenes. Ser soldadito (como se llama a quienes integran las bandas narco) de algún modo es esto: construir un yo, un ser, y hacerlo de una manera que la lógica actual de precarización no permite”. 

La lógica de matar

Para Broglia la situación en los barrios empieza por algo aparentemente sencillo: “Estamos en un modelo económico salvaje, donde tirar un tiro, matar a alguien, aparece como una lógica acumulativa. Hace un tiempo el que ganaba prestigio era el que se enfrentaba al ‘poronga’ del barrio. Pero luego aparece una lógica más capitalista, donde esto se mide en términos de cuánta gente esa persona es capaz de matar. ¿Cuántos muertos te cargás? Y con ese número te enfrentás y te imponés al ‘poronga’. Por eso hablo de lógica acumulativa”.

Cómo funciona el mercado: “Otra cuestión que cambió es la atomización del mercado de comercialización de sustancias. En las décadas del 80 y 90 era mucho más chico y concentrado. Pero ahora se transformó la lógica, mucho más atomizada y descentralizada. Y también se transformó el sistema de las complicidades”.

Las internas policiales

¿Qué significa esa transformación? “Que no hay una verticalización de cómo se estructuran sobre todo las fuerzas de seguridad en el mercado. Y entonces aparecen varias internas, distintas complicidades y varias bandas policiales operando con diferentes grupos también enfrentados entre sí. Es una atomización de las burocracias penales”.

¿Qué quiere decir eso? “Estoy pensando en algo que se ha manifestado en las causas penales, investigaciones y juicios federales que hemos tenido en Rosario: la complicidad de las fuerzas de seguridad, particularmente de la policía. No digo que toda la fuerza sea cómplice en esto. Pero hay varios grupos en pugna, operando para distintas bandas, lo que permite ver que no hay una estructura centralizada, como tampoco un cartel que domine el mercado”.

El resultado: “Al no haber carteles lo que hay son bandas sueltas, atomizadas, con poder de fuego y mucho uso de la violencia con la mano de obra de los pibes, los soldaditos. Son los más intercambiables, pero a la vez son los que están dispuestos a intervenir disparando por unos mangos, o haciendo cualquier otra cosa”.

Soldaditos y financistas

¿Cuál es la respuesta estatal? Broglia lo explica como una especie de marketing: “La respuesta típica es la saturación policial. Militarizar la ciudad es muy vendible hacia afuera. Es obvio que a todos nos puede llenar de tranquilidad tener un policía más cerca, en un contexto de miedo. Pero no parece como una solución de fondo porque en realidad en estas estructuras delictivas hay manejo del dinero y distintos niveles de jerarquía. Obviamente, la intervención de la fuerza de seguridad en el territorio no va a llegar a las cúpulas que financian el negocio, donde el financista ni siquiera se conoce con el que está tirando tiros en el barrio. Son cosas mucho más anónimas, con muchas intermediaciones”.

Agregado de contexto: “Estamos inmersos en un capitalismo neoliberal financiero que funciona también con estas lógicas, y que se alimenta también del dinero que se produce por esta vía”, referencia que empalma con las industrias de lavado de dinero que contienen a todo este fenómeno.

“El otro punto es la amplificación de la violencia. La violencia fue escalando a partir de la visibilidad de grupos o bandas como Los Monos, por ejemplo. Empezó a aparecer el tema en los diarios, se lanzó la ‘guerra al narcotráfico’ y a algunos grupos en particular con nombre y apellido. Y eso está amplificando la respuesta violenta. Entonces aparece una escalada, al estilo de otros países donde se aplicaron las mismas recetas. México y Colombia por ejemplo. El Estado amplifica la violencia que va escalando en forma desmedida. Pero esos países son un ejemplo: por más escalada, el problema no se soluciona y es más: se agrava”.

El espectáculo

En estos días ha habido distintas intervenciones mediáticas del Presidente Milei y su ministra de Seguridad Patricia Bullrich (que anunció contradictoriamente en la misma oración que Milei iría a Rosario en 25 días, o en dos semanas, o en una, confirmando la proverbial dificultad o manipulación del oficialismo con los números).

Sostiene Broglia: “Todo es muy nuevo, hay mucha información cruzada. Es cierto que hubo una situación en la unidad de Piñero, pero otros dicen que no.  Hay distintas versiones del gobierno provincial, y varios hábeas corpus presentados por la Defensa Pública debido a relatos bastante tremendos de personas privadas de su libertad. Entonces no sabemos qué es lo cierto y lo que no, por lo que me parece aventurado hoy decir algo en relación a si lo ocurrido fue una respuesta a la situación en la cárcel, o no”.   

Rosario narco (1): la infiltración y la complicidad

La ministra Bullrich sonríe y saluda en Rosario. (Foto distribuida por el Ministerio de Seguridad).

Traducción: Broglia pone en tela de juicio las versiones difundidas mediáticamente. Duda, además, sobre el tema de la autoría de los crímenes y ataques de los últimos días: “Tampoco me animaría a coincidir ni a disentir en términos de quiénes son los que preparan los atentados. De lo que sí estoy seguro es de que cuanto más violencia se genera, la escalada termina siendo peor. Claramente la solución no va a ser la espectacularización de la violencia. Entiendo que el Estado tiene que ser firme y echar mano de las herramientas que le corresponden dentro del marco legal”.

Broglia no quiere cargar las tintas en los actuales gobernantes. “Son gobiernos que están hace poco, lo digo como no votante de ambos. Pero al margen de la simpatía que se les tenga, conviene pensar las cosas con coherencia. Venimos de un proceso de mucho tiempo, desde los 90, que instaló lo que suele denominarse demagogia punitiva. La alternativa al problema de la seguridad aparece como un discurso de guerra al delito, guerra al tráfico de sustancias. Se construye un enemigo que generalmente está en los barrios populares, entre personas pobres. Y se ha ido avanzando hacia un planteo en el cual prácticamente hay que exterminar a ese otro convertido en enemigo, pero sin resolver el problema de fondo, que incluye lo económico y las burocracias penales. Y eso no es privativo de ningún gobierno en especial sino que atraviesa a todos, provinciales y nacionales, durante los últimos 30 años”.

El rinde electoral

“Hubo algunos avances y muchos retrocesos en materia de seguridad, intentos de lograr una idea de seguridad más democrática, y la contrapartida de situaciones muy hacia atrás. En todos los gobiernos. A la política le cuesta mucho correrse de los discursos habituales porque los políticos interpretan que esas medidas duras, espectaculares, son lo que la población quiere. Piensan que rinde electoralmente. Hubo matices, gobiernos que atemperaron esa actitud y que intentaron algunas transformaciones, pero al final siempre fueron hacia el punitivismo, por esa idea electoral. La lógica de una guerra absurda que no existe, y que no es ninguna solución. Lo que se precisan son soluciones multi agenciales”.

¿Por ejemplo? “Un abordaje con intervención de diversos actores, no solo las fuerzas de seguridad. Encarar el problema del delito en toda su complejidad como fenómeno social, multi causal, con la intervención de otros actores sociales que pueden influir en el fenómeno, no solo la policía. Fijate que en esta misma charla estamos viendo varias aristas distintas. Entonces el tema es la operatividad de las intervenciones que tienen que ver con la política social del Estado, por ejemplo, en donde mucho tiene que ver un neolberalismo económico y financiero que funciona también con estas lógicas, que también alimenta a una economía que muchas veces funciona con ese dinero”.

Rosario narco (1): la infiltración y la complicidad

Francisco Broglia, Defensor Público del Servicio Público de la Defensa Penal de la ciudad de Rosario y especialista en Derecho Penal.

La saturación es vieja

“Otra cuestión es hacer un diagnóstico certero. Pensar que el problema de la comercialización de sustancias se va a resolver solamente poniendo más policía en la calle, evidentemente ha demostrado que no va a traer grandes resultados” plantea Broglia. Las noticias postulan que son unos 450 efectivos enviados esta vez a Rosario (se instalarían en 3 barrios) frente a intervenciones como la de Sergio Berni, que recuerda Broglia, con 4.500 efectivos que tampoco resolvieron el problema, puede verse.  

“En Rosario ya hubo varias intervenciones según el esquema de saturación policial. La verdad es que es algo bastante viejo, que no solucionó nada. Sergio Berni lo hizo en 2012, de modo mucho más amplio y potente que lo que buscan hacer ahora el gobernador Pullaro y la ministra Bullrich. Recuerdo que una antropóloga, Josefina Martínez, decía que en lugar de pensar tanto en la saturación policial, alguna vez habría que pensar en un esquema de saturación social: cómo hacer frente a las problemáticas del neoliberalismo y la exclusión, que hoy encima se manifiesta de un modo bastante intenso y compleja”.

Menciona el Defensor Público otro tema que no aparece en ninguna agenda: “Hay que pensar de una vez por todas en una reforma policial y penitenciaria integral. Parecería que la política no se anima a intervenir sobre esta autonomía policial, que es el gran tema de todo lo que estamos comentando. Se dieron en el país algunos procesos siempre en situaciones de crisis muy extrema, como en la Policía Bonaerense. Y luego retrocesos cuando se comenzó a calmar el reclamo social: ahí volvieron los avances conservadores y muchas de las reformas fueron para atrás. Sigue siendo un tema pendiente, el gran tema si se quiere encontrar una solución efectiva a lo que está pasando en Rosario, por ejemplo”.  

Teoría sobre la demagogia

Señala también Broglia el error de la demagogia punitiva: “Tengo una mirada  diferente por lo que me ha tocado ver y trabajar. No lo digo como intérprete ni nada por el estilo, pero sí por algunas cosas que humildemente uno puede escuchar de personas muy castigadas por el problema de la inseguridad, que son las personas más pobres. Son las que más lo sufren porque hay siempre una desatención del Estado de esas victimizaciones, como también desde la política se piensa que la demagogia punitiva es la alternativa, y que la gente quiere más cárcel, más policía y más violencia”.

“Pero cuando uno se acerca un poco a lo que la gente parece necesitar, la gente no pide más violencia desde el Estado para enfrentar el problema. Pide que no le pasen cosas, no ser víctima de delitos, vivir tranquila, no tener miedo. Me hace acordar una cosa que decía David Garland, un criminólogo del Reino Unido, en la década del 90, cuando se discutían las mismas cuestiones.  Él decía que la gente no quiere la violencia del Estado. Esa es la interpretación del político y de la opinión publicada en los medios, como salida para demostrar que está haciendo algo diferente. Pero la gente lo que quiere es que no le pase nada. Entonces tal vez habría que plantear otras visiones, que tal vez sean acompañadas también desde el punto de vista de los votos. Pero también hay que tener coraje como para hacer eso, ¿no?. Coraje, capital político y apoyo en general. Pero eso se va a poder lograr cuando se comprenda que lo hecho hasta ahora no soluciona el problema”.

¿Qué le diría a una persona que piensa que la solución es más policía, más mano dura? “Es complejo porque es difícil sacar a la gente de sus cuadros o sus marcos ideológicos. Entonces esa persona está convencida de que la única alternativa es esa. Es complicado que pueda entender que hay otra salida. El problema no se va a resolver con mayor violencia porque no tiene que ver solamente con una cuestión de derecho, sino con la ineficacia de esas políticas”.

Sobre la política del “cada vez la van a pasar peor” en las cárceles a lo Bukele, Broglia propone dos conceptos:

  • “Desde el punto de vista de los derechos humanos, nuestra legislación establece la finalidad resocializadora de la pena y la prohibición de la tortura y los malos tratos a las personas detenidas”.
  • “Desde el punto de vista de la eficacia del punitivismo para reducir la violencia y el delito, te diría que el endurecimiento carcelario es inútil”.
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La Ronda, en la mirada de Eduardo Longoni

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Cuarta entrega del registro colaborativo de la ronda de las Madres de Plaza de Mayo, que se propone así transmitir el valor de la constancia, de los pies en el espacio público, de la gota a gota que orada la piedra, la no violencia contra la violencia, su valor social, su peso histórico, sus 40 años de coreográfico diseño: media hora, todos los jueves, 2.392 veces al 15 de febrero, fecha a la que corresponde esta cobertura realizada por el fotógrafo Eduardo Longoni, autor de uno de los registros a lo largo de la historia de Madres más reconocidos. Toda la producción será entregada a ambas organizaciones de Madres y al Archivo Histórico Nacional. Invitamos a quienes tengan registros de las rondas realizadas estos 40 años a que los envíen por mail a [email protected] para sumarlos a estos archivos. Esta iniciativa es totalmente autogestiva.

La Ronda, en la mirada de Eduardo Longoni

Foto: Eduardo Longoni para la cobertura colaborativa de las rondas de las Madres de Plaza de Mayo.

Una ronda de casi medio siglo

Estoy parado en la Plaza, a la sombra de un árbol, con los ojos entrecerrados por la luz que refleja la blanquísima Pirámide. Es un caluroso jueves de verano, son las tres de la tarde. Y espero que lleguen las Madres a su habitual ronda. Pero mi cabeza vuelve una y otra vez a los jueves invernales de fines de los ´70, plena dictadura. Frío. Por dentro y por fuera. La Plaza llena de servicios de inteligencia, de policías de civil, de personajes oscuros. Y allí iban llegando las Madres, algunas acompañadas por familiares, otras solas con su pañuelo. Todas con desesperación, con coraje y con pequeñas fotos de sus desaparecidos. Yo era joven, como sus hijos ausentes. Ellas tenían la edad de mi madre. En medio de ese lazo tácito de amor que nos fue uniendo, nacieron mis primeras fotos.

Hoy estoy aquí, ya no soy joven. Es mi primera ronda después de la muerte de mi madre. Y ahora sólo llega Norita Cortiñas por un lado y Pina de Fiore por otro. Hay algo que me estruja el alma. Una mezcla del paso del tiempo con tristeza. Pero ellas siguen dando vueltas. Incansables.

La ronda de las Madres es el lugar dónde ahogar las flaquezas, los miedos, es un sitio dónde los obstáculos se vuelven más pequeños. Es el círculo en el que empezó a derrumbarse la dictadura más sangrienta de nuestro país. Nada menos…”

La Ronda, en la mirada de Eduardo Longoni

Foto: Eduardo Longoni para la cobertura colaborativa de las rondas de las Madres de Plaza de Mayo.

La Ronda, en la mirada de Eduardo Longoni

Foto: Eduardo Longoni para la cobertura colaborativa de las rondas de las Madres de Plaza de Mayo.

La Ronda, en la mirada de Eduardo Longoni

Foto: Eduardo Longoni para la cobertura colaborativa de las rondas de las Madres de Plaza de Mayo.

La Ronda, en la mirada de Eduardo Longoni

Foto: Eduardo Longoni para la cobertura colaborativa de las rondas de las Madres de Plaza de Mayo.

Sobre Eduardo Longoni

“Trabajo con fotos, respiro fotografía, las imágenes me asaltan a cada paso. Con la cámara como pasaporte puede viajar por todo el mundo. Expuse mis imágenes en muchas galerías y museos alrededor del mundo, pero guardo un especial orgullo de haber sido uno de los fundadores de la exposición El Periodismo Gráfico Argentino allá por 1981, cuando todo era peligroso en nuestro país. Esa muestra, la más prestigiosa del fotoperiodismo argentino, sigue vigente hasta nuestros días con más de 30 ediciones”.

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