Sigamos en contacto

Nota

El Bauen, hoy: problemas y desafíos a 12 años del 2001

Los trabajadores del hotel recuperado coordinan reuniones, actividades y jugadas políticas para frenar, una vez más, la nueva amenaza de una vieja orden desalojo

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Sobre una mesa de Utopía, el bar que tiene el hotel BAUEN, Federico Tonarelli apoya dos celulares que hace una semana –y durante la entrevista– no paran de sonar. Como ex presidente de la cooperativa que gestiona el hotel y actual titular de FACTA (Federación Argentina de Cooperativas de Trabajadores Autogestionados), coordina reuniones, actividades y jugadas políticas para frenar, una vez más, la nueva amenaza de una vieja orden desalojo. ¿Cómo? Como siempre: “Con una gran campaña pública para visibilizar nuevamente el conflicto, volviendo a tirar un puente con el Estado nacional, que es el actor principal en todo esto porque los antiguos dueños tienen créditos impagos. Y cerraremos con un recital con grandes artistas”, anuncia. La idea de rodearse de otras agrupaciones, fábricas recuperadas y demás amigos y compañeros no es exclusiva del BAUEN, sino que responde a una receta de muchas recuperadas para enfrentar al desalojo: somos más.
El Bauen, hoy: problemas y desafíos a 12 años del 2001
Promesas incumplidas
La orden de desalojo vigente que los apura para la primera semana de mayo viene acompañada de una campaña mediática de la antigua gerenciadora del hotel, Mercoteles S.A., para limpiar su imagen (que los trabajadores del BAUEN se han encargado de denunciar desde el 2001 en que los dejaron en la calle) y mostrarse como una empresa responsable y potente. Por ejemplo, sacaron una solicitada en el diario PERFIL en la que prometían cuidar todos los puestos de trabajo de la cooperativa y poner el hotel 0km. Responde Tonarelli: “No pueden mostrarse de otra forma, sobre todo para generar un contrapeso mediático. Pero están prometiendo algo que ellos mismos no cumplieron durante añares. Acá nadie les cree nada, salvo algún compañero joven que tiene la mínima esperanza, pero que después los más antiguos se encargan de contarles quiénes son”. El ejemplo más concreto se encuentra a la vuelta del edificio de Callao, en un edificio que los Iurcovich han conservado como hotel bajo el mote de BAUEN Suite: “No está pasando por su mejor momento”.
Qué se defiende
La cooperativa actualmente tiene 130 trabajadores (casi el doble de cuando los Iurcovich cerraron el hotel) y no sólo es un hotel de pasajeros: es un bar, un restorán, una biblioteca, y sede de innumerables actividades sociales, culturales y políticas para la que prestan sus auditorios. “Se convirtió en un lugar donde muchas actividades se piensan para realizarlas acá y no en otro lado – dice Tonarelli-. Desde los congresos de la LGBT hasta una convención internacional de tatuajes…  La defensa del BAUEN no es solo la defensa de los puestos de trabajo”.
La defensa del BAUEN, entonces, significan todas estas cosas:

  • “La cooperativa definitivamente puede gestionar el hotel”.
  • “Nosotros somos la única garantía de que el Estado pueda cobrar los créditos que los antiguos dueños no pagaron, porque si nos sacan el inmueble y se lo dan a ellos probablemente lo vendan, o hagan una operación con una cadena hotelera. La única garantía de que puedan cobrar eso es si nosotros estamos adentro, y esa plata es patrimonio nacional. Por eso decimos ‘el BAUEN es de todos’”.
  • “No queremos ser empleados de una persona de la que ya varios conocemos qué tipo de patronal representa: en su momento nos han cambiado de razón social 3 ó 4 veces, no han pagado indemnizaciones y han cerrado el hotel”.

El Bauen, hoy: problemas y desafíos a 12 años del 2001
La investigación pendiente
Hablar de la orden de desalojo que pesa sobre la cooperativa quizá esté a riesgo – por la urgencia- de no recordar que la antigua gerenciadora del hotel, MERCOTELES S.A., cometió maniobras de fraude e incumplimiento que hoy están impunes.
La investigación penal que presentaron los trabajadores en contra de los Iurcovich no prosperó, y de hecho esa causa ,que era la que mantenía suspendido el desalojo desde 2012, ahora fue archivada.
La cooperativa busca otras alternativas que desentrañen la maniobra, según la cual Marcelo Iurcovich recibe un préstamo del ex Banco Nacional de Desarrollo por iniciativa del gobierno militar para la construcción del hotel, del cual pagó solamente 4 de los 12 millones. Tonarelli: “Ayer (por lunes 7 de abril) se hizo la presentación en el Congreso de una comisión bicameral para investigar la complicidad económica de empresarios y civiles. Hablamos con el diputado  Recalde, quien la presentó, y con el presidente del Cels, Horacio Vertkisky; ambos nos dijeron que entreguemos toda la información que tengamos a la comisión para que se investigue”. Qué importancia merece esta jugada: “Si la comisión genera una señal política en relación a la investigación de este fraude, probablemente se pueda activar un efecto suspensivo de la orden”, especula Tonarelli. Los otros puentes políticos apuntan al Ministerio de Economía, el responsable de reclamar aquellos créditos aun impagos.
¿Y la Ley de expropiación? “No estamos a fondo con el tema. Hemos hecho un laburo infernal durante años en ese sentido, y hemos probado que no depende del ímpetu nuestro de caminar todos los despachos, si no hay voluntad política. Entonces someter a ese esfuerzo a la cooperativa… preferimos dosificarlo y ponerlo en campañas públicas y actividades de otro tipo”. Hay otra alternativa para que el Estado haga algo: “que intervengan en el expediente diciendo: señora jueza, no devuelva el edificio porque acá hay algo por cobrar…”.
El Bauen, hoy: problemas y desafíos a 12 años del 2001
La mirada larga y lo que está en juego
Con el pulso que le permite ser presidente de FACTA, Tonarelli hace un lado la urgencia del caso, o en realidad lo encuadra en contexto, poniendo en perspectiva a las recuperadas: “Todos los cambios sociales llevan un tiempo que muchas veces excede ampliamente la propia paciencia del sujeto que lo protagoniza. Nosotros estamos con esto hace 11 años. Supongamos que  todo el proceso de recuperación de empresas lleve 15 años. Es una barbaridad de tiempo para cualquiera de nosotros, pero socialmente es nada. Entonces, recién se están empezando a producir cambios, recién se está empezando a tomar al proceso autogestivo como algo serio y que está realmente asentado y que llegó para quedarse. Al principio parecía un parche, cuando la situación mejorara parecía que íbamos a desaparecer, pero después fueron apareciendo una segunda tanda de cooperativas autogestiones, que no tiene que ver con la recuperación de una empresa que quebraba, sino con la voluntad de un grupo de trabajadores que arma una cooperativa de trabajo y no una SRL para emplear gente. Entonces la arquitectura legal de ese proceso viene a posteriori de todo esto. Ok, vos que la estás peleando no podes más, pero visto en perspectiva ocurren así las cosas; la pelea por la igualdad de derecho, en cualquier ámbito, es así: años de lucha que después se traducen en una arquitectura legal producto de que hay algunos que se quedaron ene l camino y no llegaron a verlo. En nuestro caso sería una empresa que han desalojado y dejado de existir, pero que contribuyeron a la pelea para que este proceso se afiance”.
¿Y cuáles son los problemas de hoy?
No solo la regularización por la tenencia de inmuebles y máquinas, sino toda una serie de medidas , de políticas públicas para el sector. El acceso a crédito en condiciones más ventajosas: si no tenés la propiedad ni del edificio ni de las máquinas, no lo podés hipotecar para un crédito, entonces se le hace muy difícil a la cooperativa. También las condiciones de la seguridad social en la que estamos inmersos como monotributistas, que es un disparate; en realidad somos colectivos de trabajadores para el que debería crearse un régimen propio con nuestras particularidades. No somos ni autónomos ni trabajadores en relación de dependencia. Parece que ahora, después de todo este tiempo, empieza a instalarse la idea de que hace faltan política públicas para el sector y eso está bueno. Con el apremio y la urgencia de todo esto no terminamos nunca de pulir del todo. Hay que termina de pulirlas  y presentarlos como propuestas y reivindicaciones para el sector. Son peleas que te agarran viejo y canoso, pero por suerte te agarran. Termina recayendo en los emprendimientos más emblemáticos, más grandes en porte y tamaño, porque es donde más claramente se ve el problema. Lo simbólico de la caída del BAUEN implicaría un golpe a todo el sector muy grande.
Para agendar: El 15 y 16 de este mes habrá en el BAUEN una feria del libro social y política y estrenarán la película del hotel, que narra su proceso de recuperación y estos años sostenidos.

Nota

83 días después, Pablo Grillo salió de terapia intensiva

Publicada

el

Pablo Grillo
Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

83 días.

Pasaron 83 días desde que a Pablo Grillo le dispararon a matar un cartucho de gas lacrimógeno en la cabeza que lo dejó peleando por su vida.

83 días desde que el fotógrafo de 35 años se tomó el ferrocarril Roca, de su Remedios de Escalada a Constitución, para cubrir la marcha de jubilados del 12 de marzo.

83 días desde que entró a la guardia del Hospital Ramos Mejía, con un pronóstico durísimo: muerte cerebral y de zafar la primera operación de urgencia la noche del disparo, un desenlace en estado vegetativo.

83 días y seis intervenciones quirúrgicas.

83 días de fuerza, de lucha, de garra y de muchísimo amor, en su barrio y en todo el mundo. 

83 días hasta hoy. 

Son las 10 y 10 de la mañana, 83 días después, y ahí está Pablito, vivito y sonriendo, arriba de una camilla, vivito y peleándola, saliendo de terapia intensiva del Hospital Ramos Mejía para iniciar su recuperación en el Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca, en el barrio porteño de Monte Castro. 

Ahí está Pablo, con un gorro de lana de Independiente, escuchando como su gente lo vitorea y le canta: “Que vuelva Pablo al barrio, que vuelva Pablo al barrio, para seguir luchando, para seguir luchando”. 

Su papá, Fabián, le acaricia la mejilla izquierda. Lo mima. Pablo sonríe, de punta a punta, muestra todos los dientes antes de que lo suban a la ambulancia. Cuando cierran la puerta de atrás su gente, emocionada, le sigue cantando, saltan, golpean la puerta para que sepa que no está solo (ya lo sabe) y que no lo estará (también lo sabe).

Su familia y sus amigos rebalsan de emoción. Se abrazan, lloran, cantan. Emi, su hermano, respira, con los ojos empapados. Dice: “Por fin llegó el día, ya está”, aunque sepa que falta un largo camino, sabe que lo peor ya pasó, y que lo peor no sucedió pese a haber estado tan (tan) cerca. 

El subdirector del Ramos Mejía Juan Pablo Rossini confirma lo que ya sabíamos quienes estuvimos aquella noche del 12 de marzo en la puerta del hospital: “La gravedad fue mucho más allá de lo que decían los medios. Pablo estuvo cerca de la muerte”. Su viejo ya lloró demasiado estos casi tres meses y ahora le deja espacio a la tranquilidad. Y a la alegría: “Es increíble. Es un renacer, parimos de nuevo”. 

La China, una amiga del barrio y de toda la vida, recoge el pasacalle que estuvo durante más de dos meses colgado en las rejas del Ramos Mejía exigiendo «Justicia por Pablo Grillo». Cuenta, con una tenacidad que le desborda: «Me lo llevo para colgarlo en el Rocca. No vamos a dejar de pedir justicia».

La ambulancia arranca y Pablo allá va, para continuar su rehabilitación después del cartucho de gas lanzado por la Gendarmería. 

Pablo está vivo y hoy salió de terapia intensiva, 83 días después.

Esta es parte de la vida que no pudieron matar:

Seguir leyendo

Nota

La transfiguración de Miguelito Pepe: los milagros seducen

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Una obra teatral que recurre al milagro como ingrediente imprescindible para una transformación. Un niño santo en un pueblo perdido. Su primera intervención paranormal desata furor y de todas partes van a suplicarle lo imposible. La transfiguración de Miguelito Pepe es un unipersonal con la dramaturgia y dirección de Martina Ansardi en el que el actor Tuco Richat se pone en la piel de varios personajes que dialogan con lo sagrado y lo profano. Este viernes 30 de mayo a las 20.30 podés ver en MU Trinchera Boutique la primera de tres funciones.

Por María del Carmen Varela.

La transfiguración de Miguelito Pepe: los milagros seducen

La transfiguración de Miguelito Pepe gira en torno a un fenómeno que sucede en un pueblo norteño. Miguelito, un niño de Famaillá, se convierte de la noche a la mañana en la gran atracción del pueblo. De todas partes van a conocerlo y a pedirle milagros. En todo el pueblo no se habla de otra cosa que del niño santo, el que escucha los pedidos de quien se le acerque y concede la gracia. 

La obra tiene dramaturgia y dirección de la activista y artista travesti Martina Ansardi, directora teatral, actriz, bailarina, coreógrafa y socia de Sintonía Producciones, quien la ideó para que fuera itinerante.

Se trata de un unipersonal en el que el actor Tuco Richat se luce en varios personajes, desde una secretaria de un manosanta que entrega estampitas a quien se le cruce en el camino, una presentadora de televisiòn exaltada a un obispo un tanto resentido porque dios le concede poderes a un changuito cualquiera y no a él, tan dedicado a los menesteres eclesiásticos.

La voz de la cantante lírica Guadalupe Sanchez musicaliza las escenas: interpreta cuatro arias de repertorio internacional.  A medida que avanza la trama, Richat irá transformando su aspecto, según el personaje, con ayuda de un dispositivo móvil que marca el ritmo de la obra y sostiene el deslumbrante vestuario, a cargo de Ayeln González Pita. También tiene un rol fundamental para exhibir lo que es considerado sagrado, porque cada comunidad tiene el don de sacralizar lo que le venga en ganas. Lo que hace bien, lo merece.

Martina buscó rendir homenaje con La transfiguraciòn de Miguelito Pepe a dos referentes del colectivo travesti trans latinoamericano: el escritor chileno Pedro Lemebel y Mariela Muñoz. Mariela fue una activista trans, a quien en los años `90 un juez le quiso quitar la tenencia de tres niñxs. Martina: “Es una referenta trans a la que no se recuerda mucho», cuenta la directora. «Fue una mujer transexual que crió a 23 niños y a más de 30 nietes. Es una referenta en cuanto a lo que tiene que ver con maternidad diversa. Las mujeres trans también maternamos, tenemos historia en cuanto a la crianza y hoy me parece muy importante poder recuperar la memoria de todas las activistas trans en la Argentina. Esta obra le rinde homenaje a ella y a Pedro Lemebel”.

Con el correr de la obra, los distintos personajes nos irán contando lo que sucedió con Miguelito… ¿Qué habrá sido de esa infancia? Quizás haya continuado con su raid prodigioso, o se hayan acabado sus proezas y haya perdido la condición de ser extraordinario. O quizás, con el tiempo se haya convertido, por deseo y elección, en su propio milagro. 

MU Trinchera Boutique, Riobamba 143, CABA

Viernes 30 de mayo, 20.30 hs

Entradas por Alternativa Teatral

La transfiguración de Miguelito Pepe: los milagros seducen
Seguir leyendo

Nota

Relato salvaje guaraní: una perla en el teatro

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Una actriz que cautiva. Una historia que desgarra. Música en vivo. La obra Perla Guaraní volvió de la gira en España al Teatro Polonia (Fitz Roy 1475, CABA) y sigue por dos domingos. El recomendado de lavaca esta semana.

Por María del Carmen Varela

La sala del teatro Polonia se tiñe de colores rojizos, impregnada de un aroma salvaje, de una combustión entre vegetación y madera, y alberga una historia que está a punto de brotar: Perla es parte de una naturaleza frondosa que nos cautivará durante un cuarto de hora con los matices de una vida con espinas que rasgan el relato y afloran a través de su voz.

La tonada y la crónica minuciosa nos ubican en un paisaje de influjo guaraní. Un machete le asegura defensa, aunque no parece necesitar protección. De movimientos rápidos y precisos, ajusta su instinto y en un instante captura el peligro que acecha entre las ramas. Sin perder ese sentido del humor mordaz que a veces nace de la fatalidad, nos mira, nos habla y nos deslumbra. Pregunta: “¿quién quiere comprar zapatos? Vos, reinita, que te veo la billetera abultada”. Los zapatos no se venden. ¿Qué le queda por vender? La música alegre del litoral, abrazo para sus penas.

Relato salvaje guaraní: una perla en el teatro
Gabriela Pastor en escena. Detrás, Juan Zuberman interpreta a un ciego que toca la guitarra.

La actriz y bailarina Gabriela Pastor moldeó este personaje y le pone cuerpo en el escenario.  Nacida en Formosa, hija de maestrxs rurales, aprendió el idioma guaraní al escuchar a su madre y a su padre hablarlo con lxs alumnxs y también a través de sus abuelxs maternxs paraguayxs. “Paraguay tiene un encanto muy particular”, afirma ella. “El pueblo guaraní es guerrero, resistente y poderoso”.

El personaje de Perla apareció después de una experiencia frustrante: Gabriela fue convocada para participar en una película que iba a ser rodada en Paraguay y el director la excluyó por mensaje de whatsapp unos días antes de viajar a filmar. “Por suerte eso ya es anécdota. Gracias a ese dolor, a esa herida, escribí la obra. Me salvó y me sigue salvando”, cuenta orgullosa, ya que la obra viene girando desde hace años, pasando por teatros como Timbre 4 e incluyendo escala europea.

Las vivencias del territorio donde nació y creció, la lectura de los libros de Augusto Roa Bastos y la participación en el Laboratorio de creación I con el director, dramaturgo y docente Ricardo Bartis en el Teatro Nacional Cervantes en 2017 fueron algunos de los resortes que impulsaron Perla guaraní.

Acerca de la experiencia en el Laboratorio, Gabriela asegura que “fue un despliegue actoral enorme, una fuerza tan poderosa convocada en ese grupo de 35 actores y actrices en escena que terminó siendo La liebre y la tortuga” (una propuesta teatral presentada en el Centro de las Artes de la UNSAM). Los momentos fundantes de Perla aparecieron en ese Laboratorio. “Bartís nos pidió que pusiéramos en juego un material propio que nos prendiera fuego. Agarré un mapa viejo de América Latina y dos bolsas de zapatos, hice una pila y me subí encima: pronto estaba en ese territorio litoraleño, bajando por la ruta 11, describiendo ciudades y cantando fragmentos de canciones en guaraní”.

La obra en la que Gabriela se luce, que viene de España y también fue presentada en Asunción, está dirigida por Fabián Díaz, director, dramaturgo, actor y docente. Esta combinación de talentos más la participación del músico Juan Zuberman, quien con su guitarra aporta la cuota musical imprescindible para conectar con el territorio que propone la puesta, hacen de Perla guaraní una de las producciones más originales y destacadas de la escena actual.

Teatro Polonia, Fitz Roy 1475, CABA

Domingos 18 y 25 de mayo, 20  hs

Más info y entradas en @perlaguarani

Seguir leyendo

Lo más leido

Anticopyright lavaca. Todas nuestras notas pueden ser reproducidas libremente. Agradecemos la mención de la fuente.