Nota
Una app para conectar con la economía social
El Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos, en sociedad con la Universidad Nacional de Quilmes y cooperativas de comunicación y de programación, lanzó una app que ya cuenta con un mapeo de 4 mil organizaciones cooperativas y de economía social de todo el país. De esta manera se intentan acercar los productos, servicios y perfiles de cada emprendimiento a los posibles cómplices que quieran apoyar al sector. También hay una agenda con actividades y una sección de noticias a cargo de medios independientes. Cómo bajarla y ser parte de un circuito que crece.
Una verdulería agroecológica podría estar cerca de tu casa. O una fábrica recuperada. O la cooperativa de comunicación MU, desde donde se escribe esta nota.
Más de 4 mil emprendimientos de la economía social –entre ellos, muchas cooperativas- están mapeados en una app que lanzó este año el Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos, según un proyecto presentado junto a la Unidad de Vinculación Tecnológica de la Universidad de Quilmes que resultó ganador en el Ministerio de Ciencia y Técnica. Así nació la ESSApp (de las siglas Economía Social Solidaria) para conectar los distintos emprendimientos productivos y de servicios con posibles usuarios y consumidores.
Un fondo sin fondo
Todo empezó cerca del centro de Buenos Aires con un termómetro concreto: el Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos es un ente que, entre otras cosas, brinda créditos blandos a empresas del sector cooperativo desde hace más de 10 años. De esta manera, lograron asociarse a distintos emprendimientos cooperativos y de la economía solidaria, con quienes entablaron un vínculo que fue más allá del préstamo económico. A partir de esa base pensaron cómo continuar la relación y, sobre todo, cruzar las experiencias de cada organización en particular.
“Nosotros tenemos una red de microcréditos en Buenos aires y en otras partes del país”, relata Patricia Arpe, una de las fundadoras del proyecto. “Pensamos que estaría bueno conectar a las cooperativas que accedían a los créditos y otras, así se podían conocer, comprar entre sí, fortalecer la integración cooperativa”.
La integración del sector es uno de los pilares del modelo cooperativo, que no funciona de manera aislada: productores y consumidores, además de entre ellos, afianzan lazos entre sí.
El departamento de proyectos había encargado un tríptico para promocionar la opción de los microcréditos. En el volante figuraba un mapa con 25 emprendimientos con los que se estaba trabajando. Pero la demora en la impresión o el vértigo de la realidad terminaron por arrojar otras conclusiones o promociones: “Cuando nos llegó el tríptico ya eran el doble de las cooperativas. Nos dimos cuenta que la parte gráfica se desactualiza enseguida, teníamos que pensar en otro medio: uno viaja todos los días en subte y te das cuenta que estamos todos con el celular”, dice Patricia, la gestora de esta idea. “Lo mejor era estar ahí, hacer ese mapa en forma virtual, y que se pudiera actualizar”.
La idea empezó a tomar forma gracias, justamente, a otras cooperativas: en particular la cooperativa de comunicación Huvaiti, con quienes maduraron los alcances y sentidos del proyecto; y la cooperativa de programadores G-Coop, que estuvo a cargo del desarrollo tecnológico.
Faltaba lo central: la carga de datos e información que le diera vida a la idea encaminada de la App. Así, a través de otras redes como Cooperar (Confederación Cooperativa de la República Argentina), la RUESS (Red Universitaria de Economía Social Solidaria), red de medios comunitarios como la Red Colmena y otras federaciones cooperativas se comenzaron a cargar los perfiles de organizaciones.
Hoy ya son 4.000.
La app
Juan Manuel Pico es otro de los jóvenes motores del proyecto que cuenta que, además de la primera gran carga de datos, sobrevino otra etapa y propuesta que tiene que ver con que cada organización cargue los suyos propios. Así, por ejemplo, se pueden utilizar campos que van desde el perfil del emprendimiento hasta los bienes y servicios que ofrece; hasta el lugar geográfico y las actividades que realiza, que a su vez son mostradas en una agenda específica de la ESSApp.
“Ya son 600 organizaciones que se cargaron por su cuenta”, cuenta Pico. “La potencialidad es que se incorporen todas las de la economía social. Cada una tiene un perfil donde carga su descripción, sus actividades, un perfil, dónde está, los servicios que se ofrecen. Eso se va actualizando. Después si la cooperativa hace un evento, cargan la actividad que aparece en una agenda”.
También la App contiene un apartado específico de Noticias. “De distintos portales de la economía social. Hay un Facebok, Instagram, Twitter: todas las herramientas que nos alcancen para difundir la economía social, el compre cooperativo, el desarrollo del sector. Nos encantaría que en un futuro funcione como una suerte de mercado libre”, resume Pico.
En la variedad de proyectos desde el IMFC se inspiraron en las distribuidoras de productos cooperativos que ya existen desde hace años en el país. El propio Instituto trabaja con muchas de ellas en una federación que comprende casi 160 cooperativas asociadas. Pico: “Trabajamos con cooperativas de comercialización en productos cooperativos: cuando armamos esto pensamos bastante en ellas, ya tienen redes. Era un buen canal una app para que ellos puedan articular. Algo que nos pareció importante era que cada cooperativa escribiera qué insumos necesita, qué provedoores; entonces, a través del buscador, uno identifica que necesita una y qué le falta a la otra. Si vos pones ´miel´ figuran todas las cooperativas que producen miel”.
Patricia suma: “Esto es la inversa de las multinacionales, las empresas concentradas. En los supermercados no sabemos qué productos estoy comprando, a quién estoy favoreciendo. La mayor parte de los artículos de limpieza son empresas transacionales. En cambio voy a una feria, conozco al productor, me explica de dónde viene… Por eso el componente de la cultura, el vínculo y la forma de producción. Y desmitificar el hecho de decir que porque es cooperativo es malo: al contrario. Generalmente uno va a comer a un restorán cooperativo y es distinto a como te atendían antes”.
Basta acudir al restorán Los Chanchitos, Alé Alé, La Mangiata y tantos otros recuperados y cooperativos para comprobar la certeza de esta afirmación. Basta buscar en la App “restaurantes” o “gastronomía”.
Patricia: “Hay un componente cultural muy fuerte que es cambiar pautas de consumo. Nosotros, que somos activistas cooperativistas, nos gusta lo de las compras en las ferias de la economía social”.
Pico: “Esto no tiene techo. Recién empieza”.
Podes acceder a ESSApp desde la aplicación móvil disponible en el Play Store y el App Store, así como también a través de la página web www.essapp.coop.
Nota
83 días después, Pablo Grillo salió de terapia intensiva

83 días.
Pasaron 83 días desde que a Pablo Grillo le dispararon a matar un cartucho de gas lacrimógeno en la cabeza que lo dejó peleando por su vida.
83 días desde que el fotógrafo de 35 años se tomó el ferrocarril Roca, de su Remedios de Escalada a Constitución, para cubrir la marcha de jubilados del 12 de marzo.
83 días desde que entró a la guardia del Hospital Ramos Mejía, con un pronóstico durísimo: muerte cerebral y de zafar la primera operación de urgencia la noche del disparo, un desenlace en estado vegetativo.
83 días y seis intervenciones quirúrgicas.
83 días de fuerza, de lucha, de garra y de muchísimo amor, en su barrio y en todo el mundo.
83 días hasta hoy.
Son las 10 y 10 de la mañana, 83 días después, y ahí está Pablito, vivito y sonriendo, arriba de una camilla, vivito y peleándola, saliendo de terapia intensiva del Hospital Ramos Mejía para iniciar su recuperación en el Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca, en el barrio porteño de Monte Castro.
Ahí está Pablo, con un gorro de lana de Independiente, escuchando como su gente lo vitorea y le canta: “Que vuelva Pablo al barrio, que vuelva Pablo al barrio, para seguir luchando, para seguir luchando”.
Su papá, Fabián, le acaricia la mejilla izquierda. Lo mima. Pablo sonríe, de punta a punta, muestra todos los dientes antes de que lo suban a la ambulancia. Cuando cierran la puerta de atrás su gente, emocionada, le sigue cantando, saltan, golpean la puerta para que sepa que no está solo (ya lo sabe) y que no lo estará (también lo sabe).
Su familia y sus amigos rebalsan de emoción. Se abrazan, lloran, cantan. Emi, su hermano, respira, con los ojos empapados. Dice: “Por fin llegó el día, ya está”, aunque sepa que falta un largo camino, sabe que lo peor ya pasó, y que lo peor no sucedió pese a haber estado tan (tan) cerca.
El subdirector del Ramos Mejía Juan Pablo Rossini confirma lo que ya sabíamos quienes estuvimos aquella noche del 12 de marzo en la puerta del hospital: “La gravedad fue mucho más allá de lo que decían los medios. Pablo estuvo cerca de la muerte”. Su viejo ya lloró demasiado estos casi tres meses y ahora le deja espacio a la tranquilidad. Y a la alegría: “Es increíble. Es un renacer, parimos de nuevo”.
La China, una amiga del barrio y de toda la vida, recoge el pasacalle que estuvo durante más de dos meses colgado en las rejas del Ramos Mejía exigiendo «Justicia por Pablo Grillo». Cuenta, con una tenacidad que le desborda: «Me lo llevo para colgarlo en el Rocca. No vamos a dejar de pedir justicia».
La ambulancia arranca y Pablo allá va, para continuar su rehabilitación después del cartucho de gas lanzado por la Gendarmería.
Pablo está vivo y hoy salió de terapia intensiva, 83 días después.
Esta es parte de la vida que no pudieron matar:
Nota
La transfiguración de Miguelito Pepe: los milagros seducen
Una obra teatral que recurre al milagro como ingrediente imprescindible para una transformación. Un niño santo en un pueblo perdido. Su primera intervención paranormal desata furor y de todas partes van a suplicarle lo imposible. La transfiguración de Miguelito Pepe es un unipersonal con la dramaturgia y dirección de Martina Ansardi en el que el actor Tuco Richat se pone en la piel de varios personajes que dialogan con lo sagrado y lo profano. Este viernes 30 de mayo a las 20.30 podés ver en MU Trinchera Boutique la primera de tres funciones.
Por María del Carmen Varela.
La transfiguración de Miguelito Pepe gira en torno a un fenómeno que sucede en un pueblo norteño. Miguelito, un niño de Famaillá, se convierte de la noche a la mañana en la gran atracción del pueblo. De todas partes van a conocerlo y a pedirle milagros. En todo el pueblo no se habla de otra cosa que del niño santo, el que escucha los pedidos de quien se le acerque y concede la gracia.
La obra tiene dramaturgia y dirección de la activista y artista travesti Martina Ansardi, directora teatral, actriz, bailarina, coreógrafa y socia de Sintonía Producciones, quien la ideó para que fuera itinerante.
Se trata de un unipersonal en el que el actor Tuco Richat se luce en varios personajes, desde una secretaria de un manosanta que entrega estampitas a quien se le cruce en el camino, una presentadora de televisiòn exaltada a un obispo un tanto resentido porque dios le concede poderes a un changuito cualquiera y no a él, tan dedicado a los menesteres eclesiásticos.
La voz de la cantante lírica Guadalupe Sanchez musicaliza las escenas: interpreta cuatro arias de repertorio internacional. A medida que avanza la trama, Richat irá transformando su aspecto, según el personaje, con ayuda de un dispositivo móvil que marca el ritmo de la obra y sostiene el deslumbrante vestuario, a cargo de Ayeln González Pita. También tiene un rol fundamental para exhibir lo que es considerado sagrado, porque cada comunidad tiene el don de sacralizar lo que le venga en ganas. Lo que hace bien, lo merece.
Martina buscó rendir homenaje con La transfiguraciòn de Miguelito Pepe a dos referentes del colectivo travesti trans latinoamericano: el escritor chileno Pedro Lemebel y Mariela Muñoz. Mariela fue una activista trans, a quien en los años `90 un juez le quiso quitar la tenencia de tres niñxs. Martina: “Es una referenta trans a la que no se recuerda mucho», cuenta la directora. «Fue una mujer transexual que crió a 23 niños y a más de 30 nietes. Es una referenta en cuanto a lo que tiene que ver con maternidad diversa. Las mujeres trans también maternamos, tenemos historia en cuanto a la crianza y hoy me parece muy importante poder recuperar la memoria de todas las activistas trans en la Argentina. Esta obra le rinde homenaje a ella y a Pedro Lemebel”.
Con el correr de la obra, los distintos personajes nos irán contando lo que sucedió con Miguelito… ¿Qué habrá sido de esa infancia? Quizás haya continuado con su raid prodigioso, o se hayan acabado sus proezas y haya perdido la condición de ser extraordinario. O quizás, con el tiempo se haya convertido, por deseo y elección, en su propio milagro.
MU Trinchera Boutique, Riobamba 143, CABA
Viernes 30 de mayo, 20.30 hs
Entradas por Alternativa Teatral

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Relato salvaje guaraní: una perla en el teatro

Una actriz que cautiva. Una historia que desgarra. Música en vivo. La obra Perla Guaraní volvió de la gira en España al Teatro Polonia (Fitz Roy 1475, CABA) y sigue por dos domingos. El recomendado de lavaca esta semana.
Por María del Carmen Varela
La sala del teatro Polonia se tiñe de colores rojizos, impregnada de un aroma salvaje, de una combustión entre vegetación y madera, y alberga una historia que está a punto de brotar: Perla es parte de una naturaleza frondosa que nos cautivará durante un cuarto de hora con los matices de una vida con espinas que rasgan el relato y afloran a través de su voz.
La tonada y la crónica minuciosa nos ubican en un paisaje de influjo guaraní. Un machete le asegura defensa, aunque no parece necesitar protección. De movimientos rápidos y precisos, ajusta su instinto y en un instante captura el peligro que acecha entre las ramas. Sin perder ese sentido del humor mordaz que a veces nace de la fatalidad, nos mira, nos habla y nos deslumbra. Pregunta: “¿quién quiere comprar zapatos? Vos, reinita, que te veo la billetera abultada”. Los zapatos no se venden. ¿Qué le queda por vender? La música alegre del litoral, abrazo para sus penas.

La actriz y bailarina Gabriela Pastor moldeó este personaje y le pone cuerpo en el escenario. Nacida en Formosa, hija de maestrxs rurales, aprendió el idioma guaraní al escuchar a su madre y a su padre hablarlo con lxs alumnxs y también a través de sus abuelxs maternxs paraguayxs. “Paraguay tiene un encanto muy particular”, afirma ella. “El pueblo guaraní es guerrero, resistente y poderoso”.
El personaje de Perla apareció después de una experiencia frustrante: Gabriela fue convocada para participar en una película que iba a ser rodada en Paraguay y el director la excluyó por mensaje de whatsapp unos días antes de viajar a filmar. “Por suerte eso ya es anécdota. Gracias a ese dolor, a esa herida, escribí la obra. Me salvó y me sigue salvando”, cuenta orgullosa, ya que la obra viene girando desde hace años, pasando por teatros como Timbre 4 e incluyendo escala europea.
Las vivencias del territorio donde nació y creció, la lectura de los libros de Augusto Roa Bastos y la participación en el Laboratorio de creación I con el director, dramaturgo y docente Ricardo Bartis en el Teatro Nacional Cervantes en 2017 fueron algunos de los resortes que impulsaron Perla guaraní.
Acerca de la experiencia en el Laboratorio, Gabriela asegura que “fue un despliegue actoral enorme, una fuerza tan poderosa convocada en ese grupo de 35 actores y actrices en escena que terminó siendo La liebre y la tortuga” (una propuesta teatral presentada en el Centro de las Artes de la UNSAM). Los momentos fundantes de Perla aparecieron en ese Laboratorio. “Bartís nos pidió que pusiéramos en juego un material propio que nos prendiera fuego. Agarré un mapa viejo de América Latina y dos bolsas de zapatos, hice una pila y me subí encima: pronto estaba en ese territorio litoraleño, bajando por la ruta 11, describiendo ciudades y cantando fragmentos de canciones en guaraní”.
La obra en la que Gabriela se luce, que viene de España y también fue presentada en Asunción, está dirigida por Fabián Díaz, director, dramaturgo, actor y docente. Esta combinación de talentos más la participación del músico Juan Zuberman, quien con su guitarra aporta la cuota musical imprescindible para conectar con el territorio que propone la puesta, hacen de Perla guaraní una de las producciones más originales y destacadas de la escena actual.
Teatro Polonia, Fitz Roy 1475, CABA
Domingos 18 y 25 de mayo, 20 hs
Más info y entradas en @perlaguarani
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