CABA
Te quiero verde: trabajadoras estatales por #AbortoLegalYA
183 trabajadoras de ATE Capital firmaron hoy en MU su Carta Abierta en apoyo al proyecto de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Cómo impacta la lucha en las organizaciones. Lecciones sobre por qué hay que pensar la resistencia al neoliberalismo en clave feminista. Nuestra crónica, video y reportaje fotográfico.
La trabajadora estatal del Ministerio de Educación, Mónica Feuer, lleva una remera verde que, junto al logo y al pañuelo también verde con el signo de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), afina con el verde color ley de aborto que pinta este país. La remera dice: «Yo movilizo, toco el bombo y hago huelga». A su lado, Gladis Villanueva, compañera en el Ministerio de Seguridad, lleva otra: «Yo soy así, voy militando en el Estado, doy guerra al patriarcado».Mónica y Gladis son dos de las 183 trabajadoras de ATE Capital que este martes pasaron por MU para firmar su Carta Abierta a diputadas y diputados en favor del proyecto de ley de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
Ambas sintetizan, también, qué significa este momento para ellas. “Hay muchas compañeras que se sienten identificadas con la lucha en general, y que por ahí no participan en otras actividades, pero sí se sienten parte en esa lucha. Y eso explica porqué estamos acá: nos queremos vivas y queremos decidir sobre nuestros propios cuerpos. Además, dentro del Estado, somos mucho más vapuleadas que los compañeros. Ahora existe el presentismo, y la mayoría están impedidas de cobrarlo porque tienen a sus hijos en colegios, porque se enferman, quedan embarazas, porque tienen que dar de mamar”.
Un tono verde
Isadora Fiesta, de la Junta Interna del Ministerio de Educación y una de las organizadoras de esta Carta Abierta, dice que a pesar de la tradición de lucha que tiene el gremio estatal en todo el país, esta firma colectiva tiene otro peso. ¿Por qué? “Tiene otro tono porque muchas veces pensamos que el tema de los despidos es lo que nos lleva la agenda, pero también tenemos que ver qué lugar ocupamos las mujeres. Y eso nos permite apropiarnos de sectores del sindicato que siempre han sido masculinos y tomar visibilidad de cuáles son los problemas. Vamos avanzando. Hoy somos un montón. Y crece. Es una cuesiton de militar el dia a dia. De poner en discusión todo el armado gremial, qué lugares ocupamos y cómo enfrentamos a diferentes espacios. Cómo disputamos y cómo nos formamos. Eso es lo que no para”.
La organización efectiva
Viviana Norman es socióloga, trabaja en el Instituto Nacional de la Juventud del Ministerio de Desarrollo Social y es activista de la Campaña Nacional. “Estamos ante un proceso de organización y lucha de las mujeres que viene hace muchos años, y este ritual que estamos transitando es el de hacer visible un modo más fuerte para que en Diputados tomen noción del alto nivel de despenalizacion social que hay en este pais respecto a la Interrupción Voluntaria del Embarazo. Es interesante que se diversifique ese acto y que quede claro que no es un reclamo de un grupo de mujeres sino del conjunto de la sociedad”.
Y agrega: “Tenemos una relación muy directa en cuestiones sociales. Estamos en contacto con personas que transitan situaciones de inequidad, de violencia permanente de sus condiciones de vida. Y sabemos de qué hablamos: las políticas públicas tienen que estar presentes. Por eso los diputados tienen que tomar registro de lo que estamos pidiendo”.
Daniela Novik, Lucía Kaplún y Rocío Lamperti –trabajadoras del Ministerio de Educación- fueron las tres primeras en llegar. “Cuanto más se suman, más nos vamos animando y apoyando en este proceso que es fundamental y necesario. Y se tiene que mostrar que la lucha es colectiva, que no son distintas personas apoyando de forma individual, sino que hay una organización colectiva detrás. Son debates ocultos que se activan”.
Julia, delegada de la Biblioteca Nacional, suma: “En este contexto adverso, nuestros derechos están tan amenazados que la organización es mucho más rápida y efectiva”.
Oxígeno verde
Laura Sotelo integra el Consejo Directivo de ATE Capital, es la secretaria de Género del sindicato y otra de las organizadoras de esta Carta Abierta. Habla en medio de llamados telefónicos: hoy la Policía de la Ciudad reprimió y detuvo a 16 trabajadores del subte en medio de una protesta en la Línea H por el acuerdo paritario entre el Gobierno y la UTA (https://www.lavaca.org/notas/el-delito-de-protestar-12-detenidos-de-metrodelegados-y-paro-total-de-subtes/), y Sotelo esta coordinando una movilización en apoyo luego de esta firma
«La historia nos trae acá», dice a lavaca. «La democracia tiene una deuda con nosotras, que es la despenalización y la legalización del aborto. Y todo, a su vez, tiene una trama con cuestiones estructurales que tampoco cambian en torno al trabajo, como que no haya un sistema de cuidados que garantice que nosotras podamos estar también en el mercado laboral de igual manera. Por un lado, nuestro Código Penal y toda la legislación nos obliga a ser madres por mandato histórico, pero no nos garantiza, por otro lado, la conciliacion entre trabajo y familia. Hay nudos muy fuertes que necesitamos que se desaten, y que en este momento en que estamos las mujeres, en una clara alianza entre el movimiento de mujeres con el sindicalismo, necesitamos poner sobre la mesa. Somos agenda ineludible e inevitable y, además, podemos vertebrar una verdadera resistencia y volver a ganar conquistas. No nace de un repoillo y, por eso, hoy se puede tratar el aborto. Pero hay grandes deudas que todavía hacen que estemos anquilosadas en una division sexual del trabajo estructural, que genera pobreza».
Más allá de su historia de lucha, ¿tiene otro significado organizarse hoy como mujeres en torno a la legalización del aborto en medio de un contexto de ajuste en el Estado?
-Si no hay generacion de trabajo no hay juisticia social con igualdad de género. Ninguna brecha laboral puede ser saldada si no hay generacion de trabajo digno. En el Estado, la partitaria anterior no solo fue baja, sino que nos metieron una cláusula por presentismoq que atentó contra todas las licencias de cuidado, de maternidad, con lo cual las mujeres trabajadoras somos realmente las que hoy estamos cobrando menos hoy. El movimiento vino a oxigenar nuestras estructuras anquilosadas. Es una parada más de eso que ya venimos levantando que es nuestra visibilziacion, potencia y garantía de participación en nuestras organizaciones.
¿Cómo evalúa el presente de esta historia que las trajo hasta acá?
-Nos hemos incorporado al trabajo. La democracia argentina tuvo una etapa de mucha recuperación de la política, de mucha participación, pero por ahí, del 2001 al 2015, no había tenido un correlato ni en sindicatos ni en el movimiento de mujeres, que por supuesto en Argentina hace mucho que es emblema, pero no tenia este grado de masividad. Y en el momento en que el neoliberalismo vuelve a arremeter somos nosotras las primeras en salir tiradas de la ventana del sistema porque venimos de los peldaños más bajos. Y en la hermosa herencia de esta participación política era inevitable que estuviéramos en cuerpo colectivo porque, ademas, vertebramos la unidad, la resistencia y cuestionamos los modos de hacer el trabajo. Cuestionamos lo individual y nos ponemos en colectivo, y por eso cuestionamos el neoliberalismo. Esta es nuestra potencia. Nos falta que el mundo se haga cargo que desde la ideologìa feminista podemos conducir los destinos del conjunto.
Portada
Sin pan y a puro circo: la represión a jubilados para tapar otra derrota en el Congreso
La marcha pacífica de jubilados y jubiladas volvió a ser reprimida por la Policía de la Ciudad para impedir que llegara hasta la avenida Corrientes. La Comisión Provincial por la Memoria confirmó cuatro detenciones (entre ellas, un jubilado) que la justicia convalidó y cuatro personas heridas. Una fue una jubilada a quien los propios manifestantes […]

La marcha pacífica de jubilados y jubiladas volvió a ser reprimida por la Policía de la Ciudad para impedir que llegara hasta la avenida Corrientes. La Comisión Provincial por la Memoria confirmó cuatro detenciones (entre ellas, un jubilado) que la justicia convalidó y cuatro personas heridas. Una fue una jubilada a quien los propios manifestantes salvaron de que los uniformados la pasaran por arriba. En medio del narcogate de Espert, quien pidió licencia en Diputados por “motivos personales”, las imágenes volvieron a exhibir la debilidad del Gobierno, golpeando a personas con la mínima que no llegan a fin de mes, mientras sufría otra derrota en la Cámara baja, que aprobó con 140 votos afirmativos la ley que limita el uso de los DNU por parte de Milei.
Por Francisco Pandolfi y Lucas Pedulla.
Fotos: Juan Valeiro.
Un jubilado de setenta y tantos eleva un cartel bien alto con sus dos manos.
“Pan y circo”, dice.
Pero el “pan” y la “y” están tachados, porque en este miércoles, como en esta época, lo que falta de pan sobra de circo. El triste espectáculo lo ofrece una vez más la policía, hoy particularmente la de la Ciudad, que desplegó un cordón sobre Callao, casi a la altura de Sarmiento, para evitar que la pacífica movilización de jubilados y jubiladas llegara hasta la avenida Corrientes. Detrás de los escudos, aparecieron los runrunes de la motorizada para atemorizar. Y envalentonados, los escudos avanzaron contra todo lo que se moviera, con una estrategia perversa: cada tanto, los policías abrían el cordón y de atrás salían otros uniformados que, al estilo piraña, cazaban a la persona que tenían enfrente. Algunos zafaron a último milímetro.
Pero los oficiales detuvieron a cuatro: el jubilado Víctor Amarilla, el fotógrafo Fabricio Fisher, un joven llamado Cristian Zacarías Valderrama Godoy, y otro hombre llamado Osvaldo Mancilla.



Las detenciones de Cristian Zacarías y del fotógrafo Fabricio Fisher. La policía detuvo al periodista mientras estaba de espaldas. Foto: Juan Valeiro para lavaca.org
En esa avanzada, una jubilada llamada María Rosa Ojeda cayó al suelo por los golpes y fue la rápida intervención de los manifestantes, del Cuerpo de Evacuación y Primeros Auxilios (CEPA), y de otros rescatistas los que la ayudaron. “Gracias a todos ellos la policía no me pasó por encima”, dijo. Su única arma era un bastón con la bandera de argentina.
Como en otros miércoles de represión, la estrategia pareciera buscar que estas imágenes opaquen aquellas otras que evidencian el momento de debilidad que atraviesa el Gobierno. Hoy no sólo el diputado José Luis Espert, acusado de recibir dinero de Federico «Fred» Machado, empresario extraditado a Estados Unidos por una causa narco, se tomó licencia alegando “motivos personales”, sino que la Cámara baja sancionó, por 140 votos a favor, 80 negativos y 17 abstenciones, la ley que limita el uso de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) por parte del Presidente. El gobierno anunció un clásico ya de esta gestión: el veto.
Por ahora, el proyecto avanza hacia el Senado.

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org
El poco pan
La calle preveía este golpe, y por eso durante este miércoles se cantó:
“Si no hay aumento,
consiganló,
del 3%
que Karina se robó”.
Ese tema fue el hit del inicio de la jornada de este miércoles, aunque hilando fino carece de verdad absoluta, porque las jubilaciones de octubre sí registraron un aumento: el 1,88%, que llevó el haber mínimo a $326.298,38. Sumado al bono de 70 mil, la mínima trepó a $396 mil. “Es un valor irrisorio. Seguimos sumergidos en una vida que no es justa y el gobierno no afloja un mango, es tremendo cómo vivimos”, cuenta Mario, que no hay miércoles donde no diga presente. “Nos hipotecan el presente y el futuro también, cerrando acuerdos con el FMI que nos impone cómo vivir, y no es más que pan para hoy y hambre para mañana, aunque el pan para hoy te lo debo”.
Victoria tiene 64 años y es del barrio porteño de Villa Urquiza. Cuenta que desde hace 10 meses no puede pagar las expensas. Y que por eso el consorcio le inició un juicio. Cuenta que otra vecina, de 80, está en la misma. Cuenta que es insulina dependiente pero que ya no la compra porque no tiene con qué. Cuenta que su edificio es 100% eléctrico y que de luz le vienen alrededor de 140 mil pesos, más de un tercio de su jubilación. Cuenta que está comiendo una vez por día y que su “dieta” es “mate, mate y mate”. Vuelve a sonreír cuando cuenta que tiene 3 hijos y 4 nietos y cuando dice que va a resistir: “Hasta cuando pueda”.

A María Rosa la salvó la gente de que la policía la pasara por arriba. Foto: Juan Valeiro para lavaca.org
El mucho circo
Desde temprano hubo señales de que la represión policial estaba al caer. A diferencia de los miércoles anteriores, la Policía no cortó la avenida Rivadavia a la altura de Callao. Tampoco cortó el tránsito, lo que permitió que los jubilados y las jubiladas cortaran la calle para hacer semaforazos. Después de media hora, cuando la policía empezó a desviar el tránsito y la calle quedó desolada, comenzó la marcha, pero en vez de rodear la Plaza de los Dos Congresos como es habitual, caminó por Callao en dirección a Corrientes, hasta metros de la calle Sarmiento, donde se erigió un cordón policial y empezó a avanzar contra las y los manifestantes.
Desde atrás, irrumpieron con violencia dos cuerpos en moto: el GAM (Grupo de Acción Motorizada) y el USyD (Unidad de Saturación y Detención), pegando con bastones e insultando a quienes estaban en la calle. “Vinieron a pegarme directamente, mi pareja me quiso ayudar y lo detuvieron a él, que no estaba haciendo nada”, cuenta Lucas, el compañero de Cristian Zacarías, uno de los detenidos.

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org
Cercaron el lugar una centena de efectivos de la policía porteña, que no permitieron a la prensa acercarse ni estar en la vereda registrando la escena.
“¿Alguien me puede decir si la detención fue convalidada”, pregunta Lucas al pelotón policial.
Silencio.
“¿Me pueden decir sí o no?”.
Silencio.
Un comerciante mira y vocifera: “¿Sabés lo que hicieron a la vuelta? Subieron a la vereda con las motos”.
Otro se acerca y pregunta: “¿A quién tienen detenido acá, al Chapo Guzmán?”
“No”, le responde seco un periodista: “A un pibe y a un jubilado”.
La Comisión Provincial por la Memoria confirmó las cuatro detenciones (fue aprehendida una quinta persona y derivada al SAME para su atención) y cuatro personas heridas. El despliegue incluyó la presencia también de Policía Federal, Prefectura y Gendarmería detrás del Congreso mientras el despliegue represivo fue «comandado por agentes de infantería de la Policía de la Ciudad». El organismo observó que después de semanas donde el operativo disponía el vallado completo, en los últimos miércoles el dispositivo dejó abierta una vía de circulación que es la que eligen las fuerzas para avanzar contra los manifestantes.

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org
También se hizo presente Fabián Grillo, papá de Pablo, que sufrió esa represión el 12 de marzo, en esta misma plaza, y continúa su rehabilitación en el Hospital Rocca. “Su evolución es positiva”, comunicó la familia. El fotorreportero está empezando a comer papilla con ayuda, continúa con sonda como alimento principal, se sienta y se levanta con asistencia y le están administrando medicación para que esté más reactivo. “Seguimos para adelante, lento, pero a paso firme”, dicen familiares y amigos. El martes, la jueza María Servini procesó al gendarme Héctor Guerrero por el disparo. El domingo se cumplirán siete meses y lo recordarán con un festival.
Pablo Caballero mira toda esta disposición surrealista desde un costado. Tiene 76 años y cuatro carteles pegados sobre un cuadrado de cartón tan grande que va desde el piso del Congreso hasta su cintura:
- “Roba, endeuda, estafa, paga y cobra coimas. CoiMEA y nos dice MEAdos. Miente, se contradice, vocifera, insulta, violenta, empobrece, fuga, concentra. ¿Para qué lo queremos? No queremos, ¡basta! Votemos otra cosa”.
- “El 3% de la coimeada más el 7% del chorro generan 450% de sobreprecios de medicamentos”.
- El tercer cartel enumera todo lo que “mata” la desfinanciación: ARSAT, INAI, CAREM, CONICET, ENERC, Gaumont, INCAA, Banco Nación, Aerolíneas, Hidrovía, agua, gas, litio, tierras raras, petróleo, educación. Una enumeración del saqueo.
El cuarto cartel lo explica Pablo: “Cobro la jubilación mínima, que equivale al 4% de lo que cobran los que deciden lo que tenemos que cobrar, que son 10 millones de pesos. No tiene sentido. Por eso, hay que ir a votar en octubre”.
Pablo mira al cielo, como una imploración: «¡Y que se vayan!».

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org
Artes
Un festival para celebrar el freno al vaciamiento del teatro

La revista Llegás lanza la 8ª edición de su tradicional encuentro artístico, que incluye 35 obras a mitad de precio y algunas gratuitas. Del 31 de agosto al 12 de septiembre habrá espectáculos de teatro, danza, circo, música y magia en 15 salas de la Ciudad de Buenos Aires. El festival llega con una victoria bajo el brazo: este jueves el Senado rechazó el decreto 345/25 que pretendía desguazar el Instituto Nacional del Teatro.
Por María del Carmen Varela.
«La lucha continúa», vitorearon este jueves desde la escena teatral, una vez derogado el decreto 345/25 impulsado por el gobierno nacional para vaciar el Instituto Nacional del Teatro (INT).
En ese plan colectivo de continuar la resistencia, la revista Llegás, que ya lleva más de dos décadas visibilizando e impulsando la escena local, organiza la 8ª edición de su Festival de teatro, que en esta ocasión tendrá 35 obras a mitad de precio y algunas gratuitas, en 15 salas de la Ciudad de Buenos Aires. Del 31 de agosto al 12 de septiembre, más de 250 artistas escénicos se encontrarán con el público para compartir espectáculos de teatro, danza, circo, música y magia.
El encuentro de apertura se llevará a cabo en Factoría Club Social el domingo 31 de agosto a las 18. Una hora antes arrancarán las primeras dos obras que inauguran el festival: Evitácora, con dramaturgia de Ana Alvarado, la interpretación de Carolina Tejeda y Leonardo Volpedo y la dirección de Caro Ruy y Javier Swedsky, así como Las Cautivas, en el Teatro Metropolitan, de Mariano Tenconi Blanco, con Lorena Vega y Laura Paredes. La fiesta de cierre será en el Circuito Cultural JJ el viernes 12 de septiembre a las 20. En esta oportunidad se convocó a elencos y salas de teatro independiente, oficial y comercial.
Esta comunión artística impulsada por Llegás se da en un contexto de preocupación por el avance del gobierno nacional contra todo el ámbito de la cultura. La derogación del decreto 345/25 es un bálsamo para la escena teatral, porque sin el funcionamiento natural del INT corren serio riesgo la permanencia de muchas salas de teatro independiente en todo el país. Luego de su tratamiento en Diputados, el Senado rechazó el decreto por amplia mayoría: 57 rechazos, 13 votos afirmativos y una abstención.
“Realizar un festival es continuar con el aporte a la producción de eventos culturales desde diversos puntos de vista, ya que todos los hacedores de Llegás pertenecemos a diferentes disciplinas artísticas. A lo largo de nuestros 21 años mantenemos la gratuidad de nuestro medio de comunicación, una señal de identidad del festival que mantiene el espíritu de nuestra revista y fomenta el intercambio con las compañías teatrales”, cuenta Ricardo Tamburrano, director de la revista y quien junto a la bailarina y coreógrafa Melina Seldes organizan Llegás.
Más información y compra de entradas: www.festival-llegas.com.ar

CABA
Festival ENTRÁ: Resistencia cultural contra el Decreto 345 que quedó ¡afuera! y un acto performático a 44 años del atentado a El Picadero

A 44 años del atentado en plena dictadura contra el Teatro El Picadero, ayer se juntaron en su puerta unas 200 personas para recordar ese triste episodio, pero también para recuperar el espíritu de la comunidad artística de entonces que no se dejó vencer por el desaliento. En defensa del Instituto Nacional del Teatro se organizó una lectura performática a cargo de reconocidas actrices de la escena independiente. El final fue a puro tambor con Talleres Batuka. Horas más tarde, la Cámara de Diputados dio media sanción a la derogación del Decreto 345 que desfinancia al Instituto Nacional del Teatro, entre otros organismos de la Cultura.
Por María del Carmen Varela
Fotos Lina Etchesuri para lavaca
Homenaje a la resistencia cultural de Teatro Abierto. En plena dictadura señaló una esperanza.
Esto puede leerse en la placa ubicada en la puerta del Picadero, en el mítico pasaje Discépolo, inaugurado en julio de 1980, un año antes del incendio intencional que lo dejara arrasado y solo quedara en pie parte de la fachada y una grada de cemento. “Esa madrugada del 6 de agosto prendieron fuego el teatro hasta los cimientos. Había empezado Teatro Abierto de esa manera, con fuego. No lo apagaron nunca más. El teatro que quemaron goza de buena salud, está acá”, dijo la actriz Antonia De Michelis, quien junto a la dramaturga Ana Schimelman ofició de presentadoras.


Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.
La primera lectura estuvo a cargo de Mersi Sevares, Gradiva Rondano y Pilar Pacheco. “Tres compañeras —contó Ana Schimelman— que son parte de ENTRÁ (Encuentro Nacional de Teatro en Resistencia Activa) un grupo que hace dos meses se empezó a juntar los domingos a la tarde, a la hora de la siesta, ante la angustia de cosas que están pasando, decidimos responder así, juntándonos, mirándonos a las caras, no mirando más pantallas”. Escuchamos en estas jóvenes voces “Decir sí” —una de las 21 obras que participó de Teatro Abierto —de la emblemática dramaturga Griselda Gambaro. Una vez terminada la primera lectura de la tarde, Ana invitó a lxs presentes a concurrir a la audiencia abierta que se realizará en el Congreso de la Nación el próximo viernes 8 a las 16. “Van a exponer un montón de artistas referentes de la cultura. Hay que estar ahí”.


Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.
Las actrices Andrea Nussembaum, María Inés Sancerni y el actor Mariano Sayavedra, parte del elenco de la obra “Civilización”, con dramaturgia de Mariano Saba y dirección de Lorena Vega, interpretaron una escena de la obra, que transcurre en 1792 mientras arde el teatro de la Ranchería.
Elisa Carricajo y Laura Paredes, dos de las cuatro integrantes del colectivo teatral Piel de Lava, fueron las siguientes. Ambas sumaron un fragmento de su obra “Parlamento”. Para finalizar Lorena Vega y Valeria Lois interpretaron “El acompañamiento”, de Carlos Gorostiza.

Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.

Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.
Con dramaturgia actual y de los años ´80, el encuentro reunió a varias generaciones que pusieron en práctica el ejercicio de la memoria, abrazaron al teatro y bailaron al ritmo de los tambores de Talleres Batuka. “Acá está Bety, la jubilada patotera. Si ella está defendiendo sus derechos en la calle, cómo no vamos a estar nosotrxs”, dijo la directora de Batuka señalando a Beatriz Blanco, la jubilada de 81 años que cayó de nuca al ser gaseada y empujada por un policía durante la marcha de jubiladxs en marzo de este año y a quien la ministra Bullrich acusó de “señora patotera”.
Todxs la aplaudieron y Bety se emocionó.
El pasaje Santos Discépolo fue puro festejo.
Por la lucha, por el teatro, por estar juntxs.
Continuará.

Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.

Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.


Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.

Foto: Lina M. Etchesuri para lavaca.
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