Sigamos en contacto

CABA

La profesora de filosofía a la que le labraron una contravención por dar una clase pública: «El atentado es contra el pensamiento crítico»

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Lavaca conversó con Mónica Cragnolini, Doctora en Filosofía y docente de la Universidad de Buenos Aires a la que la policía le labró un acta contravencional por estar dando una clase pública como método de lucha. Qué tiene que ver su materia, Filosofía de la animalidad, con lo que pasa en el país y le sucedió a ella. Cómo va a discutir su culpabilidad. Y lo que está en juego con la lucha docente y estudiantil que siguen de paro en 57 universidades de todo el país.

Mónica Cragnolini es Doctora en Filosofía, profesora de la Universidad de Buenos Aires desde hace 35 años y una de las mayores especialistas en Nietzsche en el país. En la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires da clases en dos materias de la carrera de filosofía: Filosofía de la animalidad, y Metafísica. Además Cragnolini es investigadora principal del CONICET y tiene un vaso currículum académico que incluye libros en torno a Derrida, la biopolítica y la alteridad. Desde ese lugar y ese pensamiento Mónica interpreta lo que le sucedió el viernes 17 en la puerta de la Facultad de Filosofía y Letras donde trabaja: ese día la policía le labró un acta contravencional por estar dando una clase pública en repudio al desfinanciamiento de la universidad en particular y de la educación pública en general.

Al igual que otras 56 facultades en el país, la de Filosofía y Letras en la que Cragnolini trabaja no empezó el segundo cuatrimestre. Muchas de ellas mantienen las clases públicas como método de lucha. «Tomaron mi documento y me dijeron que me llegaba el acta a mi casa; todavía no llegó. No me dieron una copia. Ellos se fueron a la comisaría a hacerla”, relata a lavaca la situación.

Mónica entiende que la contravención es por obstruir la vía pública. Antes de que la policía le labrara el acta, resistió la medida de la clase pública cuatro veces: “Primero vinieron a preguntarme qué hacía, después volvieron a decirme que lo que hacía era una falta contravencional, a la tercera vez dijeron que sino levantaba la clase iban a avisar a fiscalía, y a la cuarta dijeron que la fiscalía había dicho que si no dejaba un carril libre para los autos me tenían que levantar un acta contravencional”.

Mónica consideró que liberar un carril era peligroso para los alumnos, ya que muchos automovilistas pasaban y los insultaban.

Para que se entienda: la justicia contravencional regula lo que sucede en la calle. Sus principales víctimas son los manteros y las trabajadoras sexuales. El sistema funciona así: un policía ve una situación y llama a la fiscalía que por teléfono le da el aval para actuar. Los policías son así los ojos del fiscal, que no presencia los operativos. Y de esta manera manejan la arbitrariedad de la situación, y también los negocios.

La justicia contravencional y de faltas de la Ciudad de Buenos Aires es una justicia sin juicios. La mayor parte de los trámites se dirimen en las llamadas “probation”, que es una suspensión de juicio a prueba en la que por adelantado el acusado asume su culpa y realiza tareas comunitarias o una donación económica. Pero a lo que la justicia no está acostumbrada – fiscal que acusa, policía que labró el acta, defensa que recomienda «agarrar» la probation- es a reunir pruebas, es decir, a discutir la culpa. Mónica, adelanta a lavaca, piensa discutir su culpabilidad: “Yo la voy a discutir porque yo lo que leí en el artículo 78 es que no pueden entrar en conflicto los derechos constitucionales contra las contravenciones. Entonces yo entiendo que hay un derecho constitucional a la libre expresión, a la protesta y a al defensa de los derechos laborales y ahí si entran en contradicción. Eso lo dice específicamente en ese punto”.

La profesora de filosofía a la que le labraron una contravención por dar una clase pública: «El atentado es contra el pensamiento crítico»

El artículo que presuntamente le imputaron a Cragnolini.

El eterno retorno

Las clases públicas no nacieron ayer: se dieron con todos los gobiernos y en todas las facultades del país. Es un método de lucha límite que sobreviene a paros y otras metodologías para intentar forzar un cambio de postura – en general inflexible- de las autoridades para la comunidad educativa. Desfinanciamiento, precarización de las condiciones de estudio y de trabajo y pérdida de poder adquisitivo para el salario docente son algunos de los principales reclamos históricos que vuelven año tras año.

Mónica lleva 35 años solo como profesora regular de la Universidad de Buenos Aires. Desde esa mirada larga, y en medio de un aula en la que estudiantes reciben sus diplomas de grado y posgrado, analiza con lavaca el actual conflicto docente: “La policía, después de lo de Fuentealba, se cuida mucho con los docentes por una cuestión de tolerancia a las manifestaciones docentes. Posiblemente esto sea un indicio de una arremetida, de ir cada vez más fuerte contra los docentes, como van contra los trabajadores. En mi caso particular lo que pasó es que por el hecho de ser la única profesora que estaba en ese momento en la calle, el único curso, la policía parecía no saber de qué se trataba. Como que no estaba al tanto de que había un paro docente, ni qué significaba, y lo vio como un acto individual mío. Todo empezó con un conductor que se bajó del auto y empezó a arremeter contra los estudiantes, un estudiante lo fue a parar, y empezó a decir «son todos unos vagos, unos improductivos, por qué no se meten adentro».

El famoso discurso de «para qué sirven las humanidades». ¿Qué se le responde a ese conductor? 

¿Hay que explicarle? Acá la cuestión va más allá de las humanidades: tiene que ver con todas las universidades. Nosotros estamos defendiendo no solamente nuestro salario sino el futuro de sus hijos y de sus nietos. Con este ataque que hay, lo público es lo que está en juego. Ahora, explicarle a alguien que cree que lo único relevante del conocimiento tiene que ver con la producción tecnológica, en lo agropecuario, etcétera, es muy difícil. En general está la idea de que lo que nosotros hacemos es del orden de un lujo innecesario en la sociedad. Acá lo más importante es hacerle ver a esa gente que estamos defendiendo el espacio que van a ocupar sus hijos, sus nietos y las generaciones futuras.

Lo que dejó el debate por el rol del Conicet: ¿para qué sirve financiar investigaciones en Ciencias Sociales?

En ese momento estaba dando la materia Filosofía de la animalidad. ¿De qué trataba la clase?

La tesis que manejaba en esa clase es que la clase trabajadora está en una condición animalizada para el gobierno. ¿Por qué? Porque piensa a los trabajadores como bestias de producción reciclables, como todo el mundo piensa a los animales.

Parece que algo de relación tiene la filosofía con la realidad…

Totalmente. Yo justamente lo que decía a los estudiantes es que esta materia, Filosofía de la animalidad, en un gobierno que supuestamente es amigo de los animales en realidad es una paradoja. Lo que pienso personalmente, y es el camino que hice desde el pensamiento, es: uno no puede llegar al problema de la animalidad si no pasó antes por el problema de la alteridad, por la cuestión del otro. Y en este gobierno si hay algo que no saben, que no conocen, que no les interesa es el problema del otro. Entonces es una cuestión de snobs, de cools preocuparse por “los animalitos”; aparece como algo de una determinada clase social. Posiblemente han hecho encuestas, focus groups para ver a quiénes les interesa y si a aquellos que los votan les interesan los animales de compañía. Lo único que les preocupa son los animales de compañía.

¿Cree que también hicieron encuestas y focus groups a ver si a esas personas les importa la educación pública?

El proyecto del gobierno con respecto a la educación pública es el mismo con respecto a la salud pública y a todos los ámbitos de lo público, de los que considera que no debe ocuparse. Hacen como una especie de desgaste para ir borrando de lo público a docentes, médicos, enfermeros, etcétera, para que por las condiciones de trabajo no puedan llevar la existencia de manera digna, y así vayan abandonando esos espacios. Es como una desertificación de lo público. Es un gobierno que está interesado en los negocios privados. Entonces posiblemente esto también sea parte de un proyecto de erradicar todo lo que es gratuito para fomentar la posibilidad de que algunos de sus amigos tengan negocios en la universidad.

O una profesora como usted, por ejemplo, vaya a una facultad privada

Claro, que todos los docentes vayan. La idea es que ya no podemos seguir enseñando porque no hay condiciones de trabajo y porque no tenemos un sueldo digno y tengamos que… Ahí sí sería “caer”, ahí sería claramente “caer” en la universidad privada. Esa sí que es una «caída».

Es cierto que se ataca a lo público en general, pero también en particular a los gremios docentes e incluso a los profesorados públicos, donde se forman esos docentes.  ¿Cree que hay un ataque al rol docente?

En toda forma de gobierno en la cual se gobierna tratando de tapar muchas cosas, de lo que se trata es que nadie piense lo que está pasando. Los ámbitos de educación universitaria y de escuela media son espacios de formación de pensamiento crítico. El atentado es contra eso.

Una masiva feria en el Congreso contra el recorte en ciencia y técnica

Derechos Humanos

A 40 años de la sentencia: ¿Qué significa hoy el Juicio a las Juntas?

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

Este martes 9 de diciembre se cumplen 40 años de la lectura de la sentencia del Juicio a las Juntas Militares. Habrá un acto en la Corte Suprema de homenaje a los jueces Carlos Arslanián, Ricardo Gil Lavedra, Guillermo Ledesma y Jorge Valerga Aráoz (fallecieron los otros dos integrantes de aquella Cámara Federal: Andrés D’Alessio y Jorge Torlasco).

Testigo privilegiado de muchas de las audiencias por su cobertura para el diario La Razón, Sergio Ciancaglini, actual periodista de MU y coautor del libro Nada más que la verdad (junto a Martín Granovsky) repasa escenas, revelaciones y el contexto de una experiencia inédita en el mundo en la que por primera vez se juzgó un crimen masivo cometido desde el Estado por una dictadura.

Los testigos, los alegatos, las sorpresas, la ubicación de la locura y de la cordura. Los gestos de Videla, Massera y Viola. Los testimonios de las mujeres sobre los ataques y violaciones que sufrieron. El antisemitismo militar. El peso desde el cual los médicos calculaban que era factible torturar. El sitio de lo impensable, y la proyección de aquella historia pensando en los derechos humanos del presente.

Por Sergio Ciancaglini

A 40 años de la sentencia: ¿Qué significa hoy el Juicio a las Juntas?
Los militares en 1985, de pie ante los jueces. Fotos gentileza de Telam y Fondo Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas. Archivo Memoria Abierta.
(más…)
Seguir leyendo

Portada

Sin pan y a puro circo: la represión a jubilados para tapar otra derrota en el Congreso

La marcha pacífica de jubilados y jubiladas volvió a ser reprimida por la Policía de la Ciudad para impedir que llegara hasta la avenida Corrientes. La Comisión Provincial por la Memoria confirmó cuatro detenciones (entre ellas, un jubilado) que la justicia convalidó y cuatro personas heridas. Una fue una jubilada a quien los propios manifestantes […]

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

La marcha pacífica de jubilados y jubiladas volvió a ser reprimida por la Policía de la Ciudad para impedir que llegara hasta la avenida Corrientes. La Comisión Provincial por la Memoria confirmó cuatro detenciones (entre ellas, un jubilado) que la justicia convalidó y cuatro personas heridas. Una fue una jubilada a quien los propios manifestantes salvaron de que los uniformados la pasaran por arriba. En medio del narcogate de Espert, quien pidió licencia en Diputados por “motivos personales”, las imágenes volvieron a exhibir la debilidad del Gobierno, golpeando a personas con la mínima que no llegan a fin de mes, mientras sufría otra derrota en la Cámara baja, que aprobó con 140 votos afirmativos la ley que limita el uso de los DNU por parte de Milei.

Por Francisco Pandolfi y Lucas Pedulla.

Fotos: Juan Valeiro.

Un jubilado de setenta y tantos eleva un cartel bien alto con sus dos manos. 

“Pan y circo”, dice. 

Pero el “pan” y la “y” están tachados, porque en este miércoles, como en esta época, lo que falta de pan sobra de circo. El triste espectáculo lo ofrece una vez más la policía, hoy particularmente la de la Ciudad, que desplegó un cordón sobre Callao, casi a la altura de Sarmiento, para evitar que la pacífica movilización de jubilados y jubiladas llegara hasta la avenida Corrientes. Detrás de los escudos, aparecieron los runrunes de la motorizada para atemorizar. Y envalentonados, los escudos avanzaron contra todo lo que se moviera, con una estrategia perversa: cada tanto, los policías abrían el cordón y de atrás salían otros uniformados que, al estilo piraña, cazaban a la persona que tenían enfrente. Algunos zafaron a último milímetro. 

Pero los oficiales detuvieron a cuatro: el jubilado Víctor Amarilla, el fotógrafo Fabricio Fisher, un joven llamado Cristian Zacarías Valderrama Godoy, y otro hombre llamado Osvaldo Mancilla.

Las detenciones de Cristian Zacarías y del fotógrafo Fabricio Fisher. La policía detuvo al periodista mientras estaba de espaldas. Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

En esa avanzada, una jubilada llamada María Rosa Ojeda cayó al suelo por los golpes y fue la rápida intervención de los manifestantes, del Cuerpo de Evacuación y Primeros Auxilios (CEPA), y de otros rescatistas los que la ayudaron. “Gracias a todos ellos la policía no me pasó por encima”, dijo. Su única arma era un bastón con la bandera de argentina.

Como en otros miércoles de represión, la estrategia pareciera buscar que estas imágenes opaquen aquellas otras que evidencian el momento de debilidad que atraviesa el Gobierno. Hoy no sólo el diputado José Luis Espert, acusado de recibir dinero de Federico «Fred» Machado, empresario extraditado a Estados Unidos por una causa narco, se tomó licencia alegando “motivos personales”, sino que la Cámara baja sancionó, por 140 votos a favor, 80 negativos y 17 abstenciones, la ley que limita el uso de los Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) por parte del Presidente. El gobierno anunció un clásico ya de esta gestión: el veto.

Por ahora, el proyecto avanza hacia el Senado.

Sin pan y a puro circo: la represión a jubilados para tapar otra derrota en el Congreso

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

El poco pan

La calle preveía este golpe, y por eso durante este miércoles se cantó:

“Si no hay aumento, 

consiganló, 

del 3% 

que Karina se robó”. 

Ese tema fue el hit del inicio de la jornada de este miércoles, aunque hilando fino carece de verdad absoluta, porque las jubilaciones de octubre sí registraron un aumento: el 1,88%, que llevó el haber mínimo a $326.298,38. Sumado al bono de 70 mil, la mínima trepó a $396 mil. “Es un valor irrisorio. Seguimos sumergidos en una vida que no es justa y el gobierno no afloja un mango, es tremendo cómo vivimos”, cuenta Mario, que no hay miércoles donde no diga presente. “Nos hipotecan el presente y el futuro también, cerrando acuerdos con el FMI que nos impone cómo vivir, y no es más que pan para hoy y hambre para mañana, aunque el pan para hoy te lo debo”. 

Victoria tiene 64 años y es del barrio porteño de Villa Urquiza. Cuenta que desde hace 10 meses no puede pagar las expensas. Y que por eso el consorcio le inició un juicio. Cuenta que otra vecina, de 80, está en la misma. Cuenta que es insulina dependiente pero que ya no la compra porque no tiene con qué. Cuenta que su edificio es 100% eléctrico y que de luz le vienen alrededor de 140 mil pesos, más de un tercio de su jubilación. Cuenta que está comiendo una vez por día y que su “dieta” es “mate, mate y mate”. Vuelve a sonreír cuando cuenta que tiene 3 hijos y 4 nietos y cuando dice que va a resistir: “Hasta cuando pueda”. 

Sin pan y a puro circo: la represión a jubilados para tapar otra derrota en el Congreso

A María Rosa la salvó la gente de que la policía la pasara por arriba. Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

El mucho circo

Desde temprano hubo señales de que la represión policial estaba al caer. A diferencia de los miércoles anteriores, la Policía no cortó la avenida Rivadavia a la altura de Callao. Tampoco cortó el tránsito, lo que permitió que los jubilados y las jubiladas cortaran la calle para hacer semaforazos. Después de media hora, cuando la policía empezó a desviar el tránsito y la calle quedó desolada, comenzó la marcha, pero en vez de rodear la Plaza de los Dos Congresos como es habitual, caminó por Callao en dirección a Corrientes, hasta metros de la calle Sarmiento, donde se erigió un cordón policial y empezó a avanzar contra las y los manifestantes. 

Desde atrás, irrumpieron con violencia dos cuerpos en moto: el GAM (Grupo de Acción Motorizada) y el USyD (Unidad de Saturación y Detención), pegando con bastones e insultando a quienes estaban en la calle. “Vinieron a pegarme directamente, mi pareja me quiso ayudar y lo detuvieron a él, que no estaba haciendo nada”, cuenta Lucas, el compañero de Cristian Zacarías, uno de los detenidos.

Sin pan y a puro circo: la represión a jubilados para tapar otra derrota en el Congreso

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

Cercaron el lugar una centena de efectivos de la policía porteña, que no permitieron a la prensa acercarse ni estar en la vereda registrando la escena. 

“¿Alguien me puede decir si la detención fue convalidada”, pregunta Lucas al pelotón policial. 

Silencio. 

“¿Me pueden decir sí o no?”. 

Silencio.  

Un comerciante mira y vocifera: “¿Sabés lo que hicieron a la vuelta? Subieron a la vereda con las motos”.

Otro se acerca y pregunta: “¿A quién tienen detenido acá, al Chapo Guzmán?”

“No”, le responde seco un periodista: “A un pibe y a un jubilado”.

La Comisión Provincial por la Memoria confirmó las cuatro detenciones (fue aprehendida una quinta persona y derivada al SAME para su atención) y cuatro personas heridas. El despliegue incluyó la presencia también de Policía Federal, Prefectura y Gendarmería detrás del Congreso mientras el despliegue represivo fue «comandado por agentes de infantería de la Policía de la Ciudad». El organismo observó que después de semanas donde el operativo disponía el vallado completo, en los últimos miércoles el dispositivo dejó abierta una vía de circulación que es la que eligen las fuerzas para avanzar contra los manifestantes.

Sin pan y a puro circo: la represión a jubilados para tapar otra derrota en el Congreso

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

También se hizo presente Fabián Grillo, papá de Pablo, que sufrió esa represión el 12 de marzo, en esta misma plaza, y continúa su rehabilitación en el Hospital Rocca. “Su evolución es positiva”, comunicó la familia. El fotorreportero está empezando a comer papilla con ayuda, continúa con sonda como alimento principal, se sienta y se levanta con asistencia y le están administrando medicación para que esté más reactivo. “Seguimos para adelante, lento, pero a paso firme”, dicen familiares y amigos. El martes, la jueza María Servini procesó al gendarme Héctor Guerrero por el disparo. El domingo se cumplirán siete meses y lo recordarán con un festival. 

Pablo Caballero mira toda esta disposición surrealista desde un costado. Tiene 76 años y cuatro carteles pegados sobre un cuadrado de cartón tan grande que va desde el piso del Congreso hasta su cintura:

  • “Roba, endeuda, estafa, paga y cobra coimas. CoiMEA y nos dice MEAdos. Miente, se contradice, vocifera, insulta, violenta, empobrece, fuga, concentra. ¿Para qué lo queremos? No queremos, ¡basta! Votemos otra cosa”.
  • “El 3% de la coimeada más el 7% del chorro generan 450% de sobreprecios de medicamentos”.
  • El tercer cartel enumera todo lo que “mata” la desfinanciación: ARSAT, INAI, CAREM, CONICET, ENERC, Gaumont, INCAA, Banco Nación, Aerolíneas, Hidrovía, agua, gas, litio, tierras raras, petróleo, educación. Una enumeración del saqueo.

El cuarto cartel lo explica Pablo: “Cobro la jubilación mínima, que equivale al 4% de lo que cobran los que deciden lo que tenemos que cobrar, que son 10 millones de pesos. No tiene sentido. Por eso, hay que ir a votar en octubre”.

Pablo mira al cielo, como una imploración: «¡Y que se vayan!».

Sin pan y a puro circo: la represión a jubilados para tapar otra derrota en el Congreso

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

Sin pan y a puro circo: la represión a jubilados para tapar otra derrota en el Congreso

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

Sin pan y a puro circo: la represión a jubilados para tapar otra derrota en el Congreso

Foto: Juan Valeiro para lavaca.org

Seguir leyendo

Artes

Un festival para celebrar el freno al vaciamiento del teatro

Publicada

el

Con poquito aportás muchísimo ¡Sumate!

La revista Llegás lanza la 8ª edición de su tradicional encuentro artístico, que incluye 35 obras a mitad de precio y algunas gratuitas. Del 31 de agosto al 12 de septiembre habrá espectáculos de teatro, danza, circo, música y magia en 15 salas de la Ciudad de Buenos Aires. El festival llega con una victoria bajo el brazo: este jueves el Senado rechazó el decreto 345/25 que pretendía desguazar el Instituto Nacional del Teatro.

Por María del Carmen Varela.

«La lucha continúa», vitorearon este jueves desde la escena teatral, una vez derogado el decreto 345/25 impulsado por el gobierno nacional para vaciar el Instituto Nacional del Teatro (INT).

En ese plan colectivo de continuar la resistencia, la revista Llegás, que ya lleva más de dos décadas visibilizando e impulsando la escena local, organiza la 8ª edición de su Festival de teatro, que en esta ocasión tendrá 35 obras a mitad de precio y algunas gratuitas, en 15 salas de la Ciudad de Buenos Aires. Del 31 de agosto al 12 de septiembre, más de 250 artistas escénicos se encontrarán con el público para compartir espectáculos de teatro, danza, circo, música y magia.

El encuentro de apertura se llevará a cabo en Factoría Club Social el domingo 31 de agosto a las 18. Una hora antes arrancarán las primeras dos obras que inauguran el festival: Evitácora, con dramaturgia de Ana Alvarado, la interpretación de Carolina Tejeda y Leonardo Volpedo y la dirección de Caro Ruy y Javier Swedsky, así como Las Cautivas, en el Teatro Metropolitan, de Mariano Tenconi Blanco, con Lorena Vega y Laura Paredes. La fiesta de cierre será en el Circuito Cultural JJ el viernes 12 de septiembre a las 20. En esta oportunidad se convocó a elencos y salas de teatro independiente, oficial y comercial.

Esta comunión artística impulsada por Llegás se da en un contexto de preocupación por el avance del gobierno nacional contra todo el ámbito de la cultura. La derogación del decreto 345/25 es un bálsamo para la escena teatral, porque sin el funcionamiento natural del INT corren serio riesgo la permanencia de muchas salas de teatro independiente en todo el país. Luego de su tratamiento en Diputados, el Senado rechazó el decreto por amplia mayoría: 57 rechazos, 13 votos afirmativos y una abstención.

“Realizar un festival es continuar con el aporte a la producción de eventos culturales desde diversos puntos de vista, ya que todos los hacedores de Llegás pertenecemos a diferentes disciplinas artísticas. A lo largo de nuestros 21 años mantenemos la gratuidad de nuestro medio de comunicación, una señal de identidad del festival que mantiene el espíritu de nuestra revista y fomenta el intercambio con las compañías teatrales”, cuenta Ricardo Tamburrano, director de la revista y quien junto a la bailarina y coreógrafa Melina Seldes organizan Llegás.

Más información y compra de entradas: www.festival-llegas.com.ar

Un festival para celebrar el freno al vaciamiento del teatro
Seguir leyendo

Lo más leido

Anticopyright lavaca. Todas nuestras notas pueden ser reproducidas libremente. Agradecemos la mención de la fuente. ©2025 Agencia lavaca.org. Riobamba 143, Ciudad Autónoma de Buenos Aires - Argentina - Editor responsable: Cooperativa de Trabajo Lavaca ltda. Número de propiedad intelectual: 50682265 - [email protected] | Tel.: +54 9 11 2632-0383

Vistas el día de hoy: 37.022