Nota
Tres miradas del temblor

Isidro Casanova, en La Matanza; Moreno en el oeste y la Villa 31 en CABA nos informan qué pasa y qué no pasa en esos territorios golpeados por la inflación y la desestabilización.
Saqueos: Mirada desde Isidro Casanova:
“No son saqueos: son robos”
Edith Garay tenía 10 años en diciembre de 2001. Sigue viviendo en Isidro Casanova, plena zona matancera, y hoy integra la Cooperativa de Trabajo La Matanza, metalúrgica dedicada a la fabricación de tornillos.
“Estamos en un distrito populoso, la gente está indignada porque acá no se está saqueando, se está robando. Hubo dos incidentes en locales de ropa en Gregorio de Laferrere. El Municipio dijo que no había pasado nada, pero es mentira y los propios vecinos trataron de defender esos negocios, porque son trabajadores que se levantan todos los días para seguir viviendo, o subsistiendo, a los que les roban. Y los que roban no se sabe quiénes son: todos encapuchados. Eran hombres, de noche. Raro. Yo era chica pero me acuerdo de los saqueos de 2001, y eran otra cosa”.

Edith está asombrada: “Este domingo festejamos el Día de las infancias acá en el barrio, y ponemos una caja de los deseos o caja de los sueños para que los chicos escriban. Vinieron más de 300 personas. Fue lindísimo. A la noche nos pusimos a mirar qué había escrito la gente en la caja. Había algunos deseos que no me esperaba. Uno, con letra de grande, decía: ‘Que gane Milei’, y otro que decía lo mismo y agregaba: ‘para que se arregle el país’. Y en los sobres de los chicos había cartas que pedían dólares: ‘quiero tener 5.000 dólares’, y cosas por el estilo. Los chicos, serían de 7 a 11 años, están hablando de lo que escuchan en la casa o en la tele”.
¿Cómo se llega a eso? La mirada en el propio territorio: “Escuché a muchos vecinos y compañeros denigrando a veces un poco a los votantes. Yo pienso lo contrario. No hay que enojarse con el que vota o con el que quiere un cambio. La están pasando mal, plantean cosas que para mí no van, pero la culpa es de los políticos que tenemos y también de los que militamos, pero no se generó en los últimos años una propuesta o un cuadro político que esté a la altura de la circunstancia”.
¿Por qué?
Desde 2003 al 2011 a gente empezó a creer nuevamente en la política. Fue un abismo comparado con lo actual. Después, la política fue cayendo en decadencia. No la política: los políticos. No pondría todos en la misma bolsa, pero este discurso de la antipolítica pega, porque muchos por abajo decimos un montón de cosas de algunos políticos. Para mí captaron ese enojo de la gente con la política, con palabras sencillas, puteando, la gente compró eso y yo lo entiendo perfectamente”.
¿Hubo amenazas de saqueos o conflictos este miércoles, como se diseminaba desde las redes?
En realidad para mí lo están fomentando. Pero de este lado hay mucha gente que no quiere que pase porque ya lo vivió. Yo trato de bajarle el tono a eso, de no sumarme. Porque la verdad es que si le damos una chispita de verdad, va a terminar pasando eso en serio.
¿Qué ocurrió en tu barrio desde las PASO?
Empeoró todo por los aumentos de precios. Un pestañeo, y te subió todo el 20 o 30%. Eso puso indignadísima a toda la gente. El kilo de carne más básica para un guiso está a 4.200 pesos el kilo. Hace 10 días estaba a 2.800. El pan, esperá que le pregunto a mi papá que compró hoy… ¿en serio? Mirá: mi papá dice que entre 1.200 y 1.500 el kilo. Y el azúcar se fue de 650 a 1.000”.
Edith dice que se siente resignada: “Pero igual trato de hablar con todo el mundo para que vean que va a ser mucho peor si viene todo eso que están votando, aunque sé que no puedo decir que esto otro va a ser mejor: estamos endeudados, hasta la gente que está en blanco está muchas veces debajo de la línea de la pobreza, hay una crisis. Pero creo que es menos malo esto que lo otro: mirá lo que te digo”. Agrega: “Lo de los precios de la comida es lo peor de todo. Una familia te compraba medio kilo de carne como para darle sabor a la comida, pero ahora la cuenta te da 6 o 7.000 pesos para un guiso una vez por día. ¿Cómo hacés para llegar?”
Sostiene Edith que seguirá trabajando para que gane el mal menor: “Está difícil la tarea, pero no imposible. Jamás digamos imposible”.
Saqueos: Mirada desde Moreno:
“Si de alguna manera no hay freno a la inflación, es jugar con fuego”
Quien ahora nos informa, analiza y compara es Juan Manuel Giménez, fundador de la escuela de gestión social Creciendo Juntos, de Moreno.
¿Hay saqueos o no hay saqueos en Moreno?
Hubo, hubo. En el centro de Moreno, a una casa de ropa de la marca Narrow, entraron y le sacaron toda la ropa. Ya pasé el saqueo del 89, y esto no tiene nada que ver con eso.
¿Por qué?
Acá se nota que son, según la información que tengo, 15 o 20 pibes, la mayoría menor de edad, que entraron a robar ropa. No es la gente que vos veías en 2001, y menos que menos en el 89. No tiene nada que ver.

¿Es algo preparado?
No sé, no puedo decir eso, pero sí que no es por falta de alimentos. En el 2001 sí era la olla. En la época de la pandemia, también. Ahora, no. Pero esos jóvenes tal vez, igual, estén desesperados por algo. Que los jóvenes están votando a Milei, es verdad. ¿Por qué? Es para analizar largo y tendido. ¿Que vos me digas si los convoca? Ahí no sé, pero algo hay debajo de todo esto. No es lo mismo que 2001: eso te lo puedo asegurar, era otro miedo. En el 2001 yo no me acuerdo que hayan saqueado casas de ropa: eran supermercados.
¿Miedo a qué se huele hoy?
Si de alguna manera no hay un freno a la inflación, si no agregan plata en los planes… si dejan de mandar alimentos a los comedores… Es jugar con fuego. Esto lo tienen que resolver en 10, 15 días.
¿Cómo?
Con plata en la calle.
¿Alcanza?
Algo hace.
¿Qué análisis político hacen post PASO?
En Moreno Mariel Fernández (actual intendenta, Unión por Todos) gana unas PASO holgadamente, incluso un 12 por ciento arriba de la lista de Massa, 6 por ciento arriba de la lista de Kicilof. Quiere decir que hubo mucho corte de boleta: gente que votaba a Milei y a Mariel… Hacía rato que no se cortaba tanto la boleta para elegir a esta intendencia. Y eso que Moreno fue uno de los municipios que más votos aportó a Massa.
¿Por qué el corte?
Porque básicamente hay una disconformidad bastante grande con este gobierno. Acá el gobierno municipal se ha preocupado por la obra pública – luces, asfalto, residuos-, brindar servicios que no es ayuda social, no son planes. Eso la gente lo valora, lo otro se ve que no.
¿Cómo se explica el voto a Mariel, una joven que viene de una organización social, de un barrio pobre, y Milei, que representa tal vez todo lo contrario?
Por la inflación.
Saqueos: Mirada desde la Villa 31:
“Esto solo se resuelve con la participación de la gente”
Quién informa es Julián Wald, fundador del Club Social y Deportivo El Campito, y de la organización Vecinos organizados de la Villa 31.
¿Cambió algo en el barrio desde las PASO?
No hubo demasiados cambios. Volvió a ganar el peronismo, Milei salió segundo y Larreta tercero, a pesar de la plata que pusieron, que es un escándalo. Pusieron cientos de autos para llevar a votar, no uno: cientos. Y toda esa plata sale del bolsillo de nosotros, no es que la ponen ellos.
Ahora ¿se habla de saqueos?
Hay gente que está agitando, hay rumores, pero no pasó nada. Esto es día a día, hoy capaz no pasa nada y mañana estalla todo.

Julián Wald, vecino del Barrio Mugica/Villa 31 (Foto: Nacho Yuchark).
¿Por qué?
Nosotros, desde una posición independiente, hacemos campaña para que no gane la derecha, para que gane el peronismo, pero la verdad es que se está manejando todo mal, no están haciendo nada, pareciera que no están gobernando. Está complicado. Este muchacho está más preocupado por ir al FMI que por gobernar. En nuestro barrio el gobierno de la Ciudad se ha movido mucho, hay mucha obra pública, quizás no de buena calidad, pero hay. Pero el Gobierno Nacional no, y se ve en lo que nos afecta a todos, no solamente acá en el barrio. En Argentina hay cuatro vivos que hacen lo que se les canta: aumenta el dólar, aumentan los precios, son diez empresas que manejan todo, y no los tocan. Evidentemente están empujando para que sea un nuevo 1989: hiper, caos, crisis, y después ellos vienen a arrasar a todos. En el barrio no escapamos de lo que afecta a todos
¿Por ejemplo?
Por ejemplo: los precios. En el barrio, como estamos en zona norte, los precios son más altos que en zona sur: kilo de pan 700/800 pesos. Entonces la gente por más que tenga un plan con esta escalada inflacionaria no hay plata que alcance. Están generando un caldo de cultivo para que estalle. Cuando la gente empieza a ver que se va rompiendo la legalidad… porque que te aumenten todo todas las semanas es un viva la pepa, y si es un viva la pepa voy y te saqueo. La cosa funciona así. Esto de la inflación hace seis, siete meses la vienen empujando. Y la responsabilidad del gobierno nacional es no plantarse. No podés dedicarte a administrar la crisis. Si sos el candidato del campo popular, no tenés que salir a aguantar: tenés que armar algo.
¿Por qué Milei salió segundo en el barrio?
Hay mucha juventud que lo vota, que está profundamente despolitizada. El asistencialismo que se instauró hace 15 años es nefasto. Se perdió la política como algo transformador y de formación de la gente, de conciencia. Y por otro lado estamos viviendo crisis desde hace muchos años: un sistema que empobrece, que genera laburo precario, y donde hoy vemos un montón de gente que labura por dos mangos y a la que nadie le habla. Y decimos hace años: la clase política funciona hace años como una clase, no decimos casta pero sí clase. Todos tienen buenos sueldos, no la pasan mal, tienen sus punteros, y la gente lo ve acá y en todo el país. Y aparece un tipo que dice voy a mandar a todos a la mierda, vende imagen de rebelde, y nadie se pone a pensar demasiados qué está proponiendo y quién lo acompaña. Son esos factores: la gente está viviendo muy marginada, no hay perspectiva de futuro, hay simplemente perspectiva de poder llegara fin de mes y nada más; y ellos manejan medios, redes sociales y google y es un bombardeo permanente de esa información y tergiversación. Y sumá que en este gobierno son muy tibios, son muy clase media. Para gobernar este país tenés que tener huevos y ovarios, y sino, no te metas. Si sos un gobierno popular te tenes que enfrentar a intereses que son nefastos y vienen haciendo bolsa este país; pero como no lo hacen la realidad estalla.
¿Cómo salimos de esta?
Nosotros planteamos hace muchos años que la democracia representativa está agotada, generó una clase política que está ahí y no termina de resolver nada. Así que esto se resuelve solo con la participación de la gente.
Nota
83 días después, Pablo Grillo salió de terapia intensiva

83 días.
Pasaron 83 días desde que a Pablo Grillo le dispararon a matar un cartucho de gas lacrimógeno en la cabeza que lo dejó peleando por su vida.
83 días desde que el fotógrafo de 35 años se tomó el ferrocarril Roca, de su Remedios de Escalada a Constitución, para cubrir la marcha de jubilados del 12 de marzo.
83 días desde que entró a la guardia del Hospital Ramos Mejía, con un pronóstico durísimo: muerte cerebral y de zafar la primera operación de urgencia la noche del disparo, un desenlace en estado vegetativo.
83 días y seis intervenciones quirúrgicas.
83 días de fuerza, de lucha, de garra y de muchísimo amor, en su barrio y en todo el mundo.
83 días hasta hoy.
Son las 10 y 10 de la mañana, 83 días después, y ahí está Pablito, vivito y sonriendo, arriba de una camilla, vivito y peleándola, saliendo de terapia intensiva del Hospital Ramos Mejía para iniciar su recuperación en el Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca, en el barrio porteño de Monte Castro.
Ahí está Pablo, con un gorro de lana de Independiente, escuchando como su gente lo vitorea y le canta: “Que vuelva Pablo al barrio, que vuelva Pablo al barrio, para seguir luchando, para seguir luchando”.
Su papá, Fabián, le acaricia la mejilla izquierda. Lo mima. Pablo sonríe, de punta a punta, muestra todos los dientes antes de que lo suban a la ambulancia. Cuando cierran la puerta de atrás su gente, emocionada, le sigue cantando, saltan, golpean la puerta para que sepa que no está solo (ya lo sabe) y que no lo estará (también lo sabe).
Su familia y sus amigos rebalsan de emoción. Se abrazan, lloran, cantan. Emi, su hermano, respira, con los ojos empapados. Dice: “Por fin llegó el día, ya está”, aunque sepa que falta un largo camino, sabe que lo peor ya pasó, y que lo peor no sucedió pese a haber estado tan (tan) cerca.
El subdirector del Ramos Mejía Juan Pablo Rossini confirma lo que ya sabíamos quienes estuvimos aquella noche del 12 de marzo en la puerta del hospital: “La gravedad fue mucho más allá de lo que decían los medios. Pablo estuvo cerca de la muerte”. Su viejo ya lloró demasiado estos casi tres meses y ahora le deja espacio a la tranquilidad. Y a la alegría: “Es increíble. Es un renacer, parimos de nuevo”.
La China, una amiga del barrio y de toda la vida, recoge el pasacalle que estuvo durante más de dos meses colgado en las rejas del Ramos Mejía exigiendo «Justicia por Pablo Grillo». Cuenta, con una tenacidad que le desborda: «Me lo llevo para colgarlo en el Rocca. No vamos a dejar de pedir justicia».
La ambulancia arranca y Pablo allá va, para continuar su rehabilitación después del cartucho de gas lanzado por la Gendarmería.
Pablo está vivo y hoy salió de terapia intensiva, 83 días después.
Esta es parte de la vida que no pudieron matar:
Nota
La transfiguración de Miguelito Pepe: los milagros seducen
Una obra teatral que recurre al milagro como ingrediente imprescindible para una transformación. Un niño santo en un pueblo perdido. Su primera intervención paranormal desata furor y de todas partes van a suplicarle lo imposible. La transfiguración de Miguelito Pepe es un unipersonal con la dramaturgia y dirección de Martina Ansardi en el que el actor Tuco Richat se pone en la piel de varios personajes que dialogan con lo sagrado y lo profano. Este viernes 30 de mayo a las 20.30 podés ver en MU Trinchera Boutique la primera de tres funciones.
Por María del Carmen Varela.
La transfiguración de Miguelito Pepe gira en torno a un fenómeno que sucede en un pueblo norteño. Miguelito, un niño de Famaillá, se convierte de la noche a la mañana en la gran atracción del pueblo. De todas partes van a conocerlo y a pedirle milagros. En todo el pueblo no se habla de otra cosa que del niño santo, el que escucha los pedidos de quien se le acerque y concede la gracia.
La obra tiene dramaturgia y dirección de la activista y artista travesti Martina Ansardi, directora teatral, actriz, bailarina, coreógrafa y socia de Sintonía Producciones, quien la ideó para que fuera itinerante.
Se trata de un unipersonal en el que el actor Tuco Richat se luce en varios personajes, desde una secretaria de un manosanta que entrega estampitas a quien se le cruce en el camino, una presentadora de televisiòn exaltada a un obispo un tanto resentido porque dios le concede poderes a un changuito cualquiera y no a él, tan dedicado a los menesteres eclesiásticos.
La voz de la cantante lírica Guadalupe Sanchez musicaliza las escenas: interpreta cuatro arias de repertorio internacional. A medida que avanza la trama, Richat irá transformando su aspecto, según el personaje, con ayuda de un dispositivo móvil que marca el ritmo de la obra y sostiene el deslumbrante vestuario, a cargo de Ayeln González Pita. También tiene un rol fundamental para exhibir lo que es considerado sagrado, porque cada comunidad tiene el don de sacralizar lo que le venga en ganas. Lo que hace bien, lo merece.
Martina buscó rendir homenaje con La transfiguraciòn de Miguelito Pepe a dos referentes del colectivo travesti trans latinoamericano: el escritor chileno Pedro Lemebel y Mariela Muñoz. Mariela fue una activista trans, a quien en los años `90 un juez le quiso quitar la tenencia de tres niñxs. Martina: “Es una referenta trans a la que no se recuerda mucho», cuenta la directora. «Fue una mujer transexual que crió a 23 niños y a más de 30 nietes. Es una referenta en cuanto a lo que tiene que ver con maternidad diversa. Las mujeres trans también maternamos, tenemos historia en cuanto a la crianza y hoy me parece muy importante poder recuperar la memoria de todas las activistas trans en la Argentina. Esta obra le rinde homenaje a ella y a Pedro Lemebel”.
Con el correr de la obra, los distintos personajes nos irán contando lo que sucedió con Miguelito… ¿Qué habrá sido de esa infancia? Quizás haya continuado con su raid prodigioso, o se hayan acabado sus proezas y haya perdido la condición de ser extraordinario. O quizás, con el tiempo se haya convertido, por deseo y elección, en su propio milagro.
MU Trinchera Boutique, Riobamba 143, CABA
Viernes 30 de mayo, 20.30 hs
Entradas por Alternativa Teatral

Nota
Relato salvaje guaraní: una perla en el teatro

Una actriz que cautiva. Una historia que desgarra. Música en vivo. La obra Perla Guaraní volvió de la gira en España al Teatro Polonia (Fitz Roy 1475, CABA) y sigue por dos domingos. El recomendado de lavaca esta semana.
Por María del Carmen Varela
La sala del teatro Polonia se tiñe de colores rojizos, impregnada de un aroma salvaje, de una combustión entre vegetación y madera, y alberga una historia que está a punto de brotar: Perla es parte de una naturaleza frondosa que nos cautivará durante un cuarto de hora con los matices de una vida con espinas que rasgan el relato y afloran a través de su voz.
La tonada y la crónica minuciosa nos ubican en un paisaje de influjo guaraní. Un machete le asegura defensa, aunque no parece necesitar protección. De movimientos rápidos y precisos, ajusta su instinto y en un instante captura el peligro que acecha entre las ramas. Sin perder ese sentido del humor mordaz que a veces nace de la fatalidad, nos mira, nos habla y nos deslumbra. Pregunta: “¿quién quiere comprar zapatos? Vos, reinita, que te veo la billetera abultada”. Los zapatos no se venden. ¿Qué le queda por vender? La música alegre del litoral, abrazo para sus penas.

La actriz y bailarina Gabriela Pastor moldeó este personaje y le pone cuerpo en el escenario. Nacida en Formosa, hija de maestrxs rurales, aprendió el idioma guaraní al escuchar a su madre y a su padre hablarlo con lxs alumnxs y también a través de sus abuelxs maternxs paraguayxs. “Paraguay tiene un encanto muy particular”, afirma ella. “El pueblo guaraní es guerrero, resistente y poderoso”.
El personaje de Perla apareció después de una experiencia frustrante: Gabriela fue convocada para participar en una película que iba a ser rodada en Paraguay y el director la excluyó por mensaje de whatsapp unos días antes de viajar a filmar. “Por suerte eso ya es anécdota. Gracias a ese dolor, a esa herida, escribí la obra. Me salvó y me sigue salvando”, cuenta orgullosa, ya que la obra viene girando desde hace años, pasando por teatros como Timbre 4 e incluyendo escala europea.
Las vivencias del territorio donde nació y creció, la lectura de los libros de Augusto Roa Bastos y la participación en el Laboratorio de creación I con el director, dramaturgo y docente Ricardo Bartis en el Teatro Nacional Cervantes en 2017 fueron algunos de los resortes que impulsaron Perla guaraní.
Acerca de la experiencia en el Laboratorio, Gabriela asegura que “fue un despliegue actoral enorme, una fuerza tan poderosa convocada en ese grupo de 35 actores y actrices en escena que terminó siendo La liebre y la tortuga” (una propuesta teatral presentada en el Centro de las Artes de la UNSAM). Los momentos fundantes de Perla aparecieron en ese Laboratorio. “Bartís nos pidió que pusiéramos en juego un material propio que nos prendiera fuego. Agarré un mapa viejo de América Latina y dos bolsas de zapatos, hice una pila y me subí encima: pronto estaba en ese territorio litoraleño, bajando por la ruta 11, describiendo ciudades y cantando fragmentos de canciones en guaraní”.
La obra en la que Gabriela se luce, que viene de España y también fue presentada en Asunción, está dirigida por Fabián Díaz, director, dramaturgo, actor y docente. Esta combinación de talentos más la participación del músico Juan Zuberman, quien con su guitarra aporta la cuota musical imprescindible para conectar con el territorio que propone la puesta, hacen de Perla guaraní una de las producciones más originales y destacadas de la escena actual.
Teatro Polonia, Fitz Roy 1475, CABA
Domingos 18 y 25 de mayo, 20 hs
Más info y entradas en @perlaguarani
- Revista MuHace 4 semanas
Mu 203: En la mira
- Derechos HumanosHace 2 semanas
Memoria, verdad, justicia y Norita
- ActualidadHace 4 semanas
Viajar al Pepe: crónica de la despedida a José Mujica
- MúsicasHace 7 días
Susy Shock y Liliana Herrero: un escudo contra la crueldad
- #NiUnaMásHace 2 semanas
Caso Lucía Pérez: matar al femicidio